Jarro de agua fría el que se ha llevado la bolsa de Nueva York con la fuerte caída registrada por el dato de confianza del consumidor que elabora la Universidad de Michigan en su primera lectura de julio. A pesar de que los indicadores venían remontando posiciones, la publicación de este dato ha devuelto al rojo, aunque el Nasdaq se mantiene en el verde.
Ante este duro panorama, el Dow Jones corrige posiciones en la apertura de sesión al caer un 0,51%, hasta los 8.141 puntos, el S&P 500 cede un 0,51%, hasta los 878 puntos. El Nasdaq tecnológico logra permanecer en el verde, aunque recorta su velocidad al subir un 0,17%, hasta los 1.756 puntos.
La reacción que venían mostrando los indicadores minutos antes de la publicación del dato de confianza del consumidor, ha quedado estancada y tanto el S&P 500 como el Dow Jones pasan a cotizar en negativo. No es para menos, el dato ha sido muy negativo en su primera lectura de julio, con una caída inesperada hasta los 64,6 puntos, desde los 70,8 registrados a finales de junio. Además, el mercado esperaba que bajara un poco, hasta los 70 puntos, pero no este fuerte descenso.
El nuevo aumento del desempleo en Estados Unidos en el último mes, con una tasa disparada rumbo al 10%, sigue lastrando al moral de los consumidores estadounidenses, que temen por su trabajo. Así, la recuperación economíca tardará más en comenzar, si no se recupera la confianza de los consumidores, en una economía en la que el consumo es fundamental.
Además, el mercado ha conocido que el déficit comercial de Estados Unidos ha caído en el último mes hasta los 28.790 millones de dólares, gracias a un inesperado incremento de las exportaciones, lo que le permite situarse en su nivel más bajo desde noviembre de 1999.
Mientras tanto, las exportaciones han crecido un 1,6%, hasta 123.300 millones de dólares (su mayor crecimiento desde julio de 2008), mientras que las importaciones han descendido un 0,6%, hasta 149.300 millones, su nivel más bajo desde julio de 1994 y la décima caída mensual consecutiva.
No obstante, las malas referencias vienen de fuera ya que las exportaciones chinas se han desplomado en junio un 21%, un nuevo dato que pone en cuarentena los deseos de una temprana recuperación económica.
En el lado positivo, el mercado ha conocido que los precios a la importación subieron en junio un 3,2%, aunque en términos interanuales se ha contabilizado una caída del 17,4%. No obstante, estas dos referencias han mejorado las previsiones del mercado, un dato positivo para las expectativas de los inversores.
Chevron enciende las alarmas
Es uno de los principales motivos por los que la bolsa de Nueva York arranca con descensos. La petrolera dio ayer un avance de sus resultados, que presentará oficialmente el próximo 31 de julio, en los que aseguró que la subida del precio de la materia prima en los últimos meses apenas tendrá relevancia en sus cuentas del segundo trimestre.
La debilidad de la demanda por la recesión económica ha provocado el resultado del área de refino y comercialización (downstream) se prevé "significativamente menor que en el primer trimestre", lo que eclipsará totalmente las mejoras logradas en su actividad de marketing. Sus acciones caen un 2,3% y las de su rival Exxon, también componente del Dow Jones, ceden un 1,3%
También sigue en claro retroceso el precio del crudo, que vuelve a perder más de un dólar y cotiza en los 59,14 dólares en los primeros minutos de sesión. La AIE ha vuelto a reafirmarse en sus previsiones de caída de la demanda global de petróleo en este 2009 que estima en un descenso del 2,9%. Para el próximo año, la agencia espera una recuperación del 1,7% por el tirón de los países en desarrollo.
AIG y los bonus
Después de la polémica suscitada con el pago de bonus a altos directivos después de ser rescatada en numerosas ocasiones por el Estado, ahora AIG vuelve a plantearse la idea de pagar bonus a algunos de sus máximos ejecutivos.
Por eso se encuentra en negociaciones con el Gobierno, que controla un 80% del accionariado, aunque no lo va a tener fácil. Sus acciones prolongan el desplome de ayer, cercano al 30%, con otra caída del 8%. Los analistas de Citi ven el valor de su acción en cero.