Buscar

2010/09/16

Las secuelas de la quiebra de Lehman Brothers continúan vivas dos años después

20minutos

Este miércoles se cumplen dos años del hecho que muchos consideran el pistoletazo de salida a la actual crisis económica: la quiebra de uno de los mayores bancos de inversiones de los EE UU, Lehman Brothers. El gigante financiero se venía abajo el 15 de septiembre de 2008 como consecuencia de la crisis de las hipotecas subprime o basura, que desde un año antes afectaba a la economía estadounidense.
La bola se hizo más grande cuando la bolsa de Wall Street reaccionó a esta caída (sumada a la venta de otro gigante financiero en dificultades Merrill Lynch y al rescate de la aseguradora AIG) y encadenó una semana negra con pérdidas que dejaron pequeñas las producidas por el 11-S, y que se generalizaron por los parqués de los cinco continentes. La comparación con el crack de 1929 y la Gran Depresión comenzó a hacerse patente, pero el temor era mayor: durante 150 años Lehman Brothers había aguantado todas las crisis, incluida la de los años 30.
A partir de ese punto el crédito se contrajo, algunas economías nacionales se tambalearon hasta llegar casi a la quiebra técnica, los estados tuvieron que rescatar con fondos públicos bancos y empresas, se habló de la necesidad de una refundación del capitalismo -que finalmente se quedó en poco o nada-, la situación laboral se resintió de un modo dramático...
Dos años después de aquel día fatídico la situación parece más estable, pero aún son muchas las sombras que planean sobre la economía mundial. El S&P 500, que mide la evolución de las 500 principales empresas cotizadas en Wall Street, está un 10,43% por debajo de los datos de 2008.
Aunque muchos mercados continúan resentidos o no han recuperado sus niveles previos, algunos otros, especialmente los de las economías emergentes, se han visto beneficiados de las penurias que vivían los más desarrollados, ya que ofrecen a los inversores una alternativa.  Los malos recuerdos hacen que los inversores sean cautos y se vayan hacia valores tradicionalmente seguros -como las materias primas- , lo que dificulta la recuperación de los mercados.
Los Estados han tardado tiempo, algunos hasta dos años, en modificar sus legislaciones y tomar medidas para combatir o al menos prevenir otras situaciones similares. Líderes, como el presidente español José Luis Rodríguez Zapatero, han repetido que las respuestas a esta recesión debían ser "globales y coordinadas": quizá haya sido esa idea,  el miedo a dar un paso en falso sin ver qué hacían los demás o el optimismo dado por algunos 'brotes verdes' que nunca germinaron lo que haya ralentizado las acciones gubernamentales -exceptuando los rescates financieros, que fueron bastante veloces-.
Los fantasmas de la crisis siguen vivos: en Europa la crisis de deuda ha hecho tambalear la unidad de la UE; en Estados Unidos el mercado inmobiliario está lejos de recuperarse y en todo el mundo "la situación del mercado laboral es catastrófica", según aseguró esta misma semana Dominique Strauss-Kahn, director del Fondo Monetario Internacional (FMI).
EE UU: la incógnita de la gran reforma
Si la crisis económica fue reiteradamente comparada con la Gran Depresión, el presidente de los EE UU, Barack Obama, se vistió de Roosevelt y logró aprobar, tras un largo y dificultoso debate político, la mayor reforma financiera del país desde aquellas décadas. La nueva legislación toca todos los puntos y, entre otras cosas, establece muchos límites a la banca, permite desmantelar empresas que pongan en peligro a la economía y aumenta la vigilancia sobre el sistema financiero y especialmente el mercado de derivados. Recientemente, Obama también ha presentado un plan de inversión de 38.800 millones de euros para infraestructuras.
La superpotencia norteamericana parecía empezar a capear el temporal y su economía había vuelto a crecer -hasta el 5% a finales de 2009 y un 3,7% a principios de 2010-, pero los últimos datos indican que ese crecimiento se está estancando tras bajar hasta el 1,6% entre abril y junio. Los datos del paro tampoco son halagüeños, desde 2007 hay 7,5 millones de desempleados más -actualmente hay 15 millones de parados-.
UE: recuperación a dos velocidades
La crisis económica está siendo una dura prueba para la Unión Europea y ha dejado en evidencia los desequilibrios entre los países miembros. Mientras hay países como Alemania que encabezan la recuperación mundial con un crecimiento -2,2%- que algunos califican de "vertiginoso", Grecia ha estado a punto de hundirse -y llevarse con él, de paso, el sistema económico común-, sino fuera por el plan de rescate de sus socios europeos. Otros países como Irlanda o España, atraviesan dificultades y desde algunos sectores se les ha mirado con desconfianza.

La deuda nacional es la gran preocupación y, por ende, la reducción del déficit, el gran objetivo. La preocupación es tal que artículos de prensa o rumores han provocado 'temblores' en las economías nacionales y las relaciones europeas.
A nivel comunitario, la UE ha avanzado reformas para controlar el sistema bancario y para revisar los presupuestos nacionales antes de su trámite parlamentario y aceptación nacional. El comisario de Mercado Interior y Servicios, Michel Barnier, aseguró este miércoles que hay que incrementar el control financiero para que los mercados no sean un "territorio del salvaje oeste" y originen nuevas crisis.
En el ámbito doméstico, cada estado ha preparado planes de austeridad y recortes para una reducción rápida del déficit, en no pocas ocasiones, sacrificando beneficios sociales.
España: entre el déficit y las reformas
Al Gobierno español de Zapatero se le ha acusado durante casi dos años de inmovilismo -a pesar de alguna tímida medida como el Plan E para inversión local que no tuvo demasiada repercusión- respecto a la crisis, pero una vez que se ha puesto manos a la obra sus recortes han sido contundentes: el conocido como 'tijeretazo' (eliminación del 'cheque bebé', bajada del salario de los funcionarios un 5%, etc), la reforma laboral, la reforma de las pensiones -que espera solventar antes de final de año-, la subida del IVA, congelación o retraso de numerosas obras públicas, recortes al cine, etc.
Las reformas han puesto a gran parte de la sociedad en contra del Gobierno y han dejado al PSOE en soledad en las cámaras parlamentarias. Sin embargo, los recortes planteados han contado con el apoyo de la UE y de instituciones internacionales como el FMI. Zapatero se enfrentará este 29 de septiembre a su primera huelga general, cuyos resultados están en el aire, no sólo por la incógnita de la participación, sino también porque la rectificación sería compleja tras haber sido aprobadas las reformas y contar con el beneplácito internacional.
Aún así los grandes problemas siguen siendo el paro -cuya tasa ronda el 20% y los cuatro millones de desempleados - y el déficit -el país pasó de superávit a situación de déficit en 2008 y el último dato lo cifraba en un 11%-. A pesar de todo, la economía española está creciendo tímidamente -un 0,2% en el segundo trimestre respecto al primero, aunque son niveles que no aseguran ninguna estabilidad.

No hay comentarios: