Fuente:
Libertad Digital.
Ahora le llega el turno a Resonance of Fate, la gran esperanza de Tri-Ace y Sega por revitalizar un género anquilosado en fórmulas del pasado.
RPG con sabor a pólvora
Todo en esta vida es cíclico, y las modas son un ejemplo de ello. Hace años, la llegada de un RPG japonés era poco menos que un acontecimiento. Hablo de la época de la primera PlayStation, que tan buenos frutos dio con los tres Final Fantasy (VII, VIII y IX), Grandia o Legend of Dragoon. Luego empezó el ocaso del género, en buena parte debido a la llegada de Bioware y una profunda renovación en los RPG occidentales. Desde entonces, varios han sido los grandes lanzamientos en torno al RPG japonés, convenciendo a los amantes del género, pero lejos de alcanzar los niveles de popularidad que vimos en la época de la PlayStation.
A pesar de esto, siempre ha habido compañías con ganas de innovar. Uno de los estudios a los que se podría adscribir en esta tendencia es Tri-Ace, que han sido los encargados de desarrollar este Resonance of Fate.
La historia de Resonance of Fate gira en torno a la ciudad de Basel, una especie de torre donde sigue habiendo vida, a pesar de las funestas condiciones del exterior. Dicha torre está dividida en varios niveles, ofreciendo así una organización estamental por clases.
Nosotros manejaremos a Vashyron, Zephyr y Leanne, un trío de aventureros que realizarán todo tipo de encargos para los habitantes de Basel. Todos ellos pertenecen a la zona gremial de Basel, aunque les tocará visitar las diferentes zonas para ir abriendo camino a todos los lugares que, poco a poco, han ido quedando aislados dentro de la propia ciudad.
La historia es bastante buena, ofreciendo interesantes tramas relacionadas con los personajes a los que controlaremos y los demás secundarios. Al principio le costará coger ritmo, pero luego vemos que sirve como excusa perfecta para avanzar hacia el final de la aventura.
Jugabilidad
Si por algo destaca Resonance of Fate es por ofrecer un sistema de combate novedoso y original, que ofrece una gran profundidad de juego. Este no será el único punto llamativo de la jugabilidad de Resonance of Fate, puesto que también incorpora un interesante modo de exploración de los escenarios y un cuidado sistema de trabajos y tareas que nos mantendrá entretenidos durante muchas horas, pero vayamos por partes.
La principal novedad del sistema de combate de Resonance of Fate es que los personajes principales atacarán a sus rivales por medio de armas de fuego, pudiendo especializarse en ametralladoras, pistolas o granadas. Podremos movernos libremente por los escenarios, teniendo que situarnos lo más cerca posible de nuestros enemigos para que nuestros ataques puedan ser más efectivos y rápidos (aquí, la velocidad será un factor determinante).
El sistema de combate se basa en el típico sistema de turnos de otros RPG japoneses, aunque aquí va un paso más allá. Al empezar el turno de uno de nuestros personajes podremos moverlos por el escenario o ejecutar la acción que deseemos. Hay una barra que irá descendiendo poco a poco si decidimos caminar por el escenario, o que lo hará más deprisa si cargamos nuestras armas para ejecutar un disparo. Evidentemente, la carga del disparo se realizará de una manera mucho más rápida si estamos situados a pocos metros de nuestro rival. Esto es muy importante, pues si tenemos bastante cargada la barra de acción, podremos cargar varios ataques con nuestra arma, realizando así ataques mucho más potentes.
Para volver más complejo este sistema, vemos que los enemigos ejecutan sus ataques en tiempo real, así que habrá que saber cuándo hemos de cargar nuestros ataques y cuando hemos de esperar. Decimos esto porque si el enemigo nos ataca mientras cargamos nuestro ataque, perderemos la opción de consumar nuestra acción, y eso en un juego de estas características marca la inflexión entre la victoria y la derrota.
Una vez que nos acostumbremos a los principios básicos del combate de Resonance of Fate, podremos empezar a indagar sobre los ataques especiales que incorpora. Por una parte tenemos las acciones individuales, que se activarán pulsando el botón cuadrado. Así veremos cómo se traza una línea en el mapa, por el que se moverá el personaje seleccionado. Durante este trazado, podremos saltar y atacar al enemigo. Si conseguimos levantarlo del suelo, podremos ejecutar combos más dañinos.
Por último tenemos el Tri-Ataque, una función para la que necesitaremos puntos Resonance, que se consiguen llevando a cabo una serie de movimientos en ataques individuales. Este Tri-Ataque consiste en un movimiento conjunto de los tres personajes, que deberán estar colocados formando un triángulo. Si tienen puntos Resonance y a un enemigo dentro del área imaginaria que ocupa el triángulo que forman, todos se pondrán a ejecutar golpes a la vez, causando graves daños a los enemigos que se encuentren en el interior de dicho triángulo imaginario.
Todo esto puede parecer un tanto lioso... y la verdad es que el tutorial hace poco por aclarar el funcionamiento de los mismos. Aún así, bastará con dedicarle un poco de tiempo para pillar la idea y disfrutar de los combates como Dios manda.
El sistema de combate de Resonance of Fate aún es más complejo al ver que existen ataques rompebarras o al tener que estar pendientes de los puntos de héroe, que serán necesarios para que nuestros personajes puedan realizar ataques especiales y no entren en estado crítico. En caso de entrar en este estado, es fundamental curarse e intentar "tranquilizarlos", para que el combate no se nos vaya de las manos.
Por tanto, vemos que los combates de Resonance of Fate son sumamente atractivos y profundos, aunque deberemos dedicarle unas cuantas horas para pillarle el truco. A esto hay que sumarle el creciente nivel de dificultad de la IA, que alcanza algunos puntos realmente elevados. Por ello es muy recomendable pelear mucho contra enemigos comunes... aunque iros haciendo a la idea de ver con asiduidad el mensaje "Fin de la partida". Por fortuna, no tendremos por qué reiniciar la partida desde el último punto de guardado, pues el juego nos ofrece la opción de volver justo al inicio del combate en el que perdimos.
El sistema de evolución de personajes es diferente de lo visto en otros RPG. Aquí podremos subir el nivel de experiencia de cada personaje en tres áreas diferentes, que se corresponden con el tipo de armamento que utilicen en cada momento. Luego, el nivel de cada uno se obtiene de la suma de los niveles de experiencia que hayan adquirido con cada tipo de arma.
El mapeado de los exteriores de los principales barrios de Resonance of Fate está dividido en hexágonos, como si fuese el tablero de un RPG táctico. Además, algunas de las casillas estarán cerradas a nuestro paso hasta que no utilicemos unas células de energía, que abrirán el camino para llegar a nuevos lugares. Obtendremos estas células por medio de los combates, aunque también hay células de energía de un color específico que solamente podremos utilizar en aquellas casillas del mismo color. Es una manera bastante interesante de ir trabajando para desbloquear todas las zonas de Basel que podremos visitar.
Por último me gustaría hablar del sistema de misiones que Resonance of Fate ofrece. Para recibir información de los nuevos encargos disponibles tendremos que visitar un tablero donde se recogen todos los trabajos. Ahí se nos informa de lo más básico y se nos ofrece la dirección de la persona que quiere contratar nuestros servicios. Lo primero será ir a verlos para que nos especifiquen con claridad lo que debemos hacer y la recompensa que recibiremos por ello. Luego basta con adentrarse en el mapeado general de Resonance of Fate para cumplir la misión y listo.
Los objetivos de las misiones son bastante variados, manteniendo el interés en todo momento, y las recompensas son tan jugosas que querremos realizar todos los encargos disponibles que haya en cada momento. Por cierto, no nos podemos quejar de las horas de vida de Resonance of Fate, pues superará con suma facilidad las 20 horas de juego.
Gráficos
El apartado gráfico de Resonance of Fate destaca por el cuidado diseño artístico de la ciudad de Basel y el estupendo diseño de personajes y enemigos. De los personajes, creo que me quedo con el conjunto de animaciones que muestran durante los combates, aunque no se puede negar que cuentan con un nivel de detalle bastante elevado. Por otra parte, cabe señalar que el apartado gráfico, unido a la dirección artística, logra que los combates sean de lo más espectaculares que hemos visto en PlayStation 3 en este género.
Los fondos de los escenarios están bastante bien detallados, aunque algunos dan el aspecto de estar demasiado vacíos. La estética, a medio camino entre lo medieval y lo fantástico, es uno de los mayores aciertos de Resonance of Fate, a pesar de lo manido que pueda resultar en un principio.
Música/Sonido
La banda sonora de Resonance of Fate es francamente buena. Consta de una serie de temas orquestales que funcionan realmente bien durante todo el desarrollo de la aventura, ofreciendo melodías bastante pegadizas sin que se lleguen a hacer pesados.
Luego tenemos los notables efectos de sonido y un buen doblaje al inglés. Por tanto, pocos peros podemos ponerle a este título en el apartado sonoro.
Edición española
Resonance of Fate viene con textos de pantalla y manual en perfecto castellano. Por el contrario, las voces se mantendrán en inglés. La traducción es más que correcta, sin que haya detectado algún tipo de fallo.
Conclusión
Resonance of Fate destaca por un novedoso y profundo sistema de combate, que pondrá a prueba la habilidad de los jugadores. Al principio cuesta cogerle el ritmo a las partidas, y la IA tampoco nos lo pone fácil, pero una vez superados estos escollos podremos disfrutar de un título sumamente entretenido. Tri-Ace se ha propuesto ofrecer unos mecanismos de jugabilidad novedosos y lo han conseguido de sobremanera. Ahora solo falta por ver cómo responderá el público a este excelente RPG japonés.
Lo mejor: El sistema de combate. El método de evolución de los personajes. La exploración de los alrededores en el mapeado general de Basel. El apartado técnico está muy bien cuidado y la trama resulta bastante interesante.
Lo peor: Algunos combates pecan de ser demasiado duros. Al principio nos cuesta coger el truco a los combates, pudiendo resultar un tanto desesperantes.
