Buscar

2012/03/26

Tuenti lanzará un producto inspirado en la privacidad

Este producto, que verá la luz antes del verano, supondrá un "valor añadido" a la oferta de la red social española, que ya cuenta con su propia operadora de telefonía móvil, Tu, para "facilitar una conexión a internet en todo momento y asequible" a los jóvenes.
La nueva herramienta "seguirá la estrategia de privacidad de Tuenti", limpiando la comunicación "de polvo y ruido" para no empañar "la información relevante".
Muriel, quien cree que "aún hay nicho" en el campo de las redes sociales, resume esta propuesta diciendo que será "como si Tuenti se hubiera creado en 2012 en lugar de en 2006"
"Internet ha demostrado que no son precisamente los agentes ya establecidos los que más innovan", ha comentado el directivo acerca de que el próximo gran hito de internet "lo están gestando ahora mismo dos chavales en un garaje".
Pese a que la mayoría de los usuarios de Tuenti tienen entre 14 y 21 años, Muriel no cree que se trate de una red social para jóvenes, sino "para gente que quiere tener una relación más íntima", una idea que apoya en las estadísticas de la página.
Sus usuarios tienen menos amigos que el promedio de otras redes sociales y pasan de media 103 minutos conectados a Tuenti, casi el doble de lo que lo hacen los internautas en otras páginas.
Para Muriel, las conversaciones en Tuenti tienen carácter privado porque no se indexan en Google y las fotos no se pueden consultar por la red, un terreno en el que, según ha dicho, "Twitter no puede competir porque lo que pasa allí es público".
Esta característica diferencial se deja ver también en las estrategias de las empresas para llevar publicidad a los usuarios: tienen que hacer un esfuerzo por "plantear acciones que impliquen interacción, sean creativas o sorprendan" para que sean los propios miembros de Tuenti quienes las compartan con amigos.
Se generan así, ha dicho Muriel, "elementos emocionales" que las empresas tienen que desarrollar para llegar a los jóvenes "que no ven la tele ni leen los periódicos como lo hacíamos nosotros, por eso hay que utilizar Tuenti para llegar a ellos, porque si no estás en Tuenti, no estás".

Amazon amplía su catálogo en España con productos de terceros

Desde hoy, los clientes de Amazon.es tendrán acceso a más de un millón de productos adicionales ofrecidos por vendedores externos, dentro de los departamentos de música, cine y TV, software, videojuegos y electrónica. Y, según la compañía, esto es sólo el principio, pues el catálogo de su marketplace crecerá rápidamente en los próximos meses para incluir productos de otras categorías ya disponibles en el sitio web.
"Amazon está encantado de ofrecer a sus clientes esta gran selección, donde pueden encontrar desde los DVDs de 'Cuéntame cómo pasó' hasta el simulador de vuelo X-Plane 10, pasando por baterías para móviles y CDs de Adele", explica en una nota Eric Broussard,vicepresidente de los servicios a los vendedores para Amazon Services Europe Sàrl. "El principal objetivo de Amazon es ser la compañía más centrada en el cliente del mundo, ser un referente donde los consumidores puedan encontrar y descubrir cualquier cosa que deseen comprar y en este sentido, los vendedores externos constituyen una parte muy importante de nuestro trabajo".
El gigante del comercio electrónico explica que con el marketplace, los clientes disponen de una mayor selección de productos y se benefician de la experiencia de compra de Amazon.es, que incluye tanto sus métodos de pago como una completa garantía, que cubre todas las compras realizadas a través de vendedores externos y garantiza que el proceso sea sencillo y seguro­. Uno de cada tres artículos solicitados por los clientes de Amazon en todo el mundo se vende a través de los más de dos millones de vendedores que forman parte de su mercado virtual.
Amazon asegura que vender en su marketplace "es muy sencillo" y defiende que los servicios para el vendedor en Amazon.es permiten a miles de empresas acceder a millones de potenciales clientes cada día. Para empezar, explican, sólo es necesario listar los productos en Amazon.es a través de la interfaz "Seller Central". Con esta herramienta, los vendedores pueden gestionar todos los aspectos de sus ventas en Amazon.es: añadir información sobre un producto, actualizar su inventario, gestionar pedidos y pagos, etc. Asimismo, los vendedores en Amazon.es pueden comercializar sus productos en otros portales de Amazon en Europa, como por ejemplo Amazon.de, Amazon.co.uk, Amazon.fr o Amazon.it.
Y como muestra un botón. Según la nota enviada por Amazon, el vendedor de accesorios de electrónica iMotic han incrementado "considerablemente sus ventas" desde que está en Amazon.es. Así, Laura Iglesias, cofundadora de la citada empresa, explica que se están planteando expandir su negocio al Reino Unido, Francia y Alemania, "que son nuevos mercados a los que difícilmente podríamos acceder de otro modo".

Apple también cierra servicios

Que Google haga limpieza no sorprende tanto como que lo haga Apple. La segunda no lo hace de una manera tan sonora, pero sí contundente. La forma habitual de comunicación suele ser una correo electrónico a los suscriptores de los servicios que pronto desaparecerán.
MobileMe, un intento inicial de pasar a los clientes de iPhone, iPad y ordenadores Mac a la nube dejará de estar operativo el 30 de junio de 2012. En el correo remitido se invita a los clientes a mudarse a iCloud, más práctico y sencillo, pero que carece de dirección de correo.
Al contratar MobileMe se recibía un email personalizable cuyo final era @me.com. Servía, como es lógico, para envíar y recibir correo, así como para tener actualizada la agenda de contactos en cualquier aparato o un calendario común. MobileMe se considera sucesor de .Mac, un almacén virtual para fotos, vídeos y proyectos web.
El 31 de julio, solo un mes más tarde, es la fecha de caducidad para iWork. La mudanza de documentos tendrá que ser antes de ese día. Este servicio sirve para algo muy parecido a Office 360 o Google Docs. El almacenamiento es gratis, pero para compartir había que pagar cada mes. Aunque tuvo cierta aceptación nunca dejó de estar en versión beta, como se llama "de prueba" en el argot.
De nuevo, la empresa de la manzana invita a usar iCloud como la mejor alternativa.

El móvil revoluciona el 'súper'

A media distancia es un trampantojo muy bien traído. Los productos se alinean como en los estantes de un supermercado normal. Y casi se pueden tocar. Pero si nos acercamos más veremos que se trata de una película adhesiva con fotos de artículos que se iluminan en una pantalla en forma de caja de luz. El engaño resulta casi total. La imagen sucede estos días en algunas estaciones de metro de Corea del Sur y el lector puede comprobar el verismo de la ilusión en este enlace de Youtube.
 La firma de comercio minorista británica Tesco ha diseñado estas pantallas —similares a las de una tienda física— que permiten a los clientes usar sus teléfonos inteligentespara escanear etiquetas QR (similar al código de barras) y colocar sus productos en el carro de la compra del móvil de la misma forma que adquieren artículos a través de la web de la cadena. Esto ha generado una pequeña revolución en el país.
Los surcoreanos están considerados los asiáticos que más horas trabajan, y para muchos, hacer la compra es buscar un momento que nunca aparece. Así que han decidido, en palabras de la propia Tesco, “transformar el tiempo de espera hasta que llega el tren en tiempo de compra”. Mientras van y vienen del trabajo y aguardan en el andén, llenan el carrito virtual en su teléfono y, en pocas horas, un repartidor les entrega el pedido en casa. Los expertos dejan caer un dato: los surcoreanos son los consumidores asiáticos más parecidos a los españoles.
Este es el mundo al que nos vemos incesantemente arrastrados. Guste más o menos. Casi la mitad de los teléfonos de los internautas españoles —según la firma de estudios de mercado Nielsen— son ya inteligentes —aunque aún solo un 7% los use para comprar—, y esto abre las puertas a un tiempo nuevo que, por ejemplo, ya viven en EE UU. “Hay aplicaciones que permiten escanear con el móvil el código de barras del producto y saber su precio —o los cometarios online que hay del artículo— no solo en ese establecimiento, sino en el de la competencia”, apunta Gustavo Entrala, director general de la agencia de publicidad 101.

Y esto ha dado lugar a que en EE UU varios supermercados hayan prohibido el uso de los teléfonos inteligentes en sus establecimientos, ya que, gracias a estas aplicaciones, el cliente puede “comparar precios en la propia superficie y, con un solo clic, adquirirlo allí donde esté más barato, que, por cierto, no tiene por qué coincidir con el punto de venta en el que se encuentra el consumidor”, puntualiza Gustavo Entrala.
De esta forma, cada vez hay más paseantes de lineales que, tras comparar precios, compran virtualmente en varios lugares a la vez y después esperan tranquilamente la entrega de los productos en su domicilio.
Esta infidelidad en el supermercado demuestra “cómo lo digital está impactando en todo el proceso de compra”, afirma María Ángeles Zabaleta, responsable de Estudios Shopper de Nielsen España. “Ahora, lo digital cubre todo el viaje de compra: dentro de casa, de casa a la tienda y en el propio establecimiento”.
Y para dar forma a este nuevo supermercado se han desarrollado a su alrededor una serie de aplicaciones que, incorporadas en los teléfonos inteligentes, permiten leer de una forma innovadora el juego de comprar y vender. Por ejemplo, Shopkick mejora la experiencia de compra dentro de la tienda pues el consumidor recibe ofertas y descuentos personalizados, así como preferencias de compras de clientes y amigos con gustos similares.

“Estos dispositivos se han convertido en nuevos canales de comunicación con los usuarios. Sobre todo, las aplicaciones del mundo Apple”, resume Javier Vello, socio responsable de retail y consumo de PwC.
Precisamente, un programa que tiene gran aceptación entre los usuarios del iPhone de Apple es Foursquare, que facilita a quien lo usa geolocalizarse a través de las redes sociales y recibir descuentos y promociones. “Todo esto enriquece la experiencia de compra, tanto física como virtual, de una forma totalmente nueva”, reflexionaba Gavin Michael, experto en tecnología de la consultora Accenture, en un reciente comentario en la revista Forbes.
Esta es otra seña de identidad de esta época revolucionaria: la conjunción de lo real y lo virtual, al tiempo que se desarrollan empresas creadas solo para dar este tipo de soporte. El gigante americano de la distribución Walmart ha lanzado una división tecnológica denominada Walmart Labs, destinada a aplicar las nuevas tecnologías móviles y las redes sociales en los procesos de compra con el fin de aumentar los beneficios. Tesco, con su propuesta en Corea del Sur, asegura que ha incrementado el 130% sus ventas.
Todo esto parece que, por ahora, sucede lejos de España. Aquí, el sector textil —con Mango e Inditex como referencias— está más desarrollado en el uso de estas tecnologías que la gran distribución. “Cuanto más discrecional es la compra, mayor interacción necesitas”, apunta Javier Vello.
De esta manera lo han entendido en Mango, que desde 2010 desarrolla varias aplicaciones para iPhone, Android e iPad. Tanto es así que a mediados de 2011 el comercio electrónico a través de dispositivos móviles “creció exponencialmente, representando algunos meses hasta el 8% de la venta online de la compañía”, desgrana un portavoz de la firma textil.
Eroski presentará en breve un programa piloto de envío de ofertas personalizadas a través de Internet a móviles. Y también están digitalizando bonos descuento para esos dispositivos. Además, en una treintena de hipermercados ya funcionan las etiquetas electrónicas. Por su parte, Caprabo (grupo Eroski), a lo largo de este año y el que viene, implantará en todos sus lineales —unos 1.600 pasillos— lectores de pago con tarjeta a distancia, que es el paso previo al abono por teléfono móvil.
Y, por si se lo preguntan, ya sabemos el aspecto que presumiblemente tendrá el súper en el futuro. “En unos pocos años, cuando estemos en un supermercado, nuestro teléfono móvil lo sabrá, y nos llegarán ofertas personalizadas en función de nuestros gustos, las adquisiciones pasadas y las experiencias de compras de nuestros amigos y círculo social más cercano. Y no tendremos que llevar la tarjeta de crédito, ya que pagaremos con el teléfono y sin tener que esperar largas colas en las cajas”, vaticina José Ángel Cantera, socio responsable de Tecnología, Media y Telecomunicaciones en el área de Management Consulting de KPMG.

Los altavoces pierden los cables

La industria del sonido está adaptando sus aparatos a los nuevos hábitos de escucha de la música, ya sea con un teléfono móvil inteligente, una tableta iPad, los portátiles o cualquier reproductor de bolsillo.
Si en los últimos años las compañías de audio habían creado múltiples sistemas de altavoces con una base de conexión física para iPod o MP3, ahora promueven altavoces que funcionan sin cables, gracias a las tecnologías bluetooth y al sistema wifi de Apple, conocido como Airplay.
Es inevitable llevar puestos unos cascos si se quiere escuchar música mientras se camina, pero los altavoces son el medio más cómodo en una sala de estar o en una habitación. Cuando la música viene de un reproductor de bolsillo, basta con enchufarlo a la base de un sistema de altavoces situado a cierta distancia. Si, como suele ocurrir ahora, la música se reproduce con un teléfono móvil o una tableta, el aparato se quiere tener al alcance de la mano para cambiar la música, y no lejos, donde están los altavoces.
Una solución para este dilema es que los auriculares sean inalámbricos; así el móvil puede estar cerca y los altavoces más lejos sin necesidad de levantarse cada vez que suena el teléfono. Como la mayoría de móviles, smartphones, tabletas y portátiles llevan bluetooth incorporado, lo más natural es que los altavoces funcionen sin cables a través de esta tecnología. Y mejor si estos altavoces son pequeños, porque así caben en la maleta y se pueden llevar de viaje y escuchar la música preferida en la habitación del hotel.
Un altavoz sin cables que tiene éxito es el SoundLink de Bose, justamente por su tamaño reducido para la calidad de sonido que proporciona. Tiene un espesor de cinco centímetros y lleva una batería que dura hasta ocho horas sin necesidad de recarga. La tapa de protección sirve a la vez de base de apoyo y está en distintos colores. Cuesta unos 310 euros.

El alcance del sistema bluetooth es de unos 10 metros, más que suficiente para esta aplicación. Una desventaja es que la señal de audio tiene que comprimirse ligeramente porque bluetooth no tiene ancho de banda suficiente para transmitir en calidad CD. La compresión, sin embargo, es automática en modo bluetooth y generalmente inapreciable para el tamaño y calidad de los altavoces utilizados.
Una alternativa al sistema sin cables bluetooth es la transmisión Airplay, que es una red de banda ancha sin cables idéntica al wifi, pero que solo funciona con aparatos Apple o que lleven la marca Airplay certificada por Apple.
Uno de los altavoces Airplay más conocidos es el Zeppelin Air de Bowers & Wilkins, que funciona con los iPhone, iPad y iPod Touch. No lleva bluetooth, precisamente para remarcar la exclusividad Apple. Cuesta unos 600 euros y no está pensado para ser transportado de un sitio a otro, tanto por su tamaño como por la necesidad de una señal inalámbrica estable y con buena cobertura para que se oiga bien.
Sony tiene previsto introducir en breve el XA-900, un sistema de altavoces inalámbrico que funciona tanto con bluetooth como con Airport. Así, cualquier propietario de un smartphone, sea Android, iPhone o Windows 7 Phone, puede utilizarlo, y también con un portátil. Su precio es de 550 euros, con calidad de sonido comparable al Zeppelin Air y más versátil que aquel. Un modelo más sencillo en forma de esfera de Sony es el BTV25, que va solo con bluetooth.
Otra marca que hace mucho esfuerzo con las estaciones de sonido inalámbrico es Philips, pero en este caso tiene modelos para Airplay y otros para Bluetooth, pensados fundamentalmente para smartphones Android.
El nombre común de Philips para esta gama es Fidelio, con los modelos DS9800 y DS8800 para Airplay y los AS851 y AS351 para Bluetooth, entre los más recientes. Otro fabricante muy activo en sonido inalámbrico es Sonos. Para los próximos meses se espera una auténtica avalancha de modelos para captar la atención de los millones de usuarios de smartphones, como ya pasó con las estaciones de sonido preparadas para los aparatos iPod.
El reto para todos los fabricantes es conseguir la máxima calidad en la reproducción del sonido y con el altavoz más pequeño, ligero.

Insumisos de las redes sociales

Ni muros, ni tuits, ni tuentis ni whatsapps. En la era de la hiperconexión todavía muchos prefieren comunicarse a la vieja usanza, con llamadas, algún e-mail y, sobre todo, cara a cara. No son legión, pero tampoco un puñado de tecnófobos. En España un 9% de internautas entre 16 y 45 años pasa olímpicamente de las redes sociales y un 56% de la población aún no lleva smartphone.Usan Internet para casi todo salvo para lo que hace la mayoría, conectarse al Facebook.
Alba García, de 26 años, es un buen ejemplo: joven, preparada y protecnología. Es arquitecta, hizo un máster y ahora trabaja para un despacho de arquitectura en Tarragona. “Hablo con mi jefe por Skype, tengo un iPod, escucho música en Grooveshark y almaceno archivos en Dropbox. Utilizo Internet para comprar e informarme, pero las redes sociales ni las toco. Si un amigo me quiere enseñar sus fotos ya sabe mi número, quedamos personalmente”.
Pese a ser la red social dominante, Facebook alimenta a un nutrido grupo de detractores que lo considera una perfecta pérdida de tiempo. Un 85% de internautas españoles mantiene cuenta activa, pero el 15% restante, según The Cocktail Analysis, no la usa, se ha dado de baja o ni siquiera ha llegado a entrar. “La gente va a Facebook básicamente a cotillear, a ver qué dice uno o cuelga el otro. No me gusta pertenecer a este movimiento, no lo necesito, vivo igual de feliz sin ello”, dice Alba.
Según Felipe Romero, socio director de The Cocktail Analysis, hay un componente sociológico que explica en parte esta actitud. “A muchos les gusta ir en contra de las modas, de lo popular y de la mainstream”. ¿Insumisos digitales? “En cierta manera sí, aunque hay varios tipos. Unos acaban entrando de forma muy controlada, con precaución y otros optan por quedarse fuera para siempre”. Alba es del segundo grupo: “Me declaro insumisa 100%”, sonríe con orgullo.
Elsa Goñi, de 33 años, licenciada en derecho y responsable de un hotel en una de las principales cadenas españolas, más que a la rebeldía apunta a la escasa utilidad. “Probé Facebook hace tiempo, no me gustó, me daba la sensación de estar perdiendo el tiempo y cancelé la cuenta. Además, me paso ocho horas delante de un ordenador en el trabajo y lo último que me apetece es llegar a casa y sentarme frente a una pantalla”, dice. Es la principal razón de abandono de las redes sociales: uno de cada cuatro internautas españoles entre 16 y 45 años no les ve utilidad.
“Me considero más bien una objetora de conciencia digital. Reconozco el valor de la tecnología, la uso, pero no considero necesario estar constantemente conectado. Si ocurre una noticia, ¿qué más da enterarse ahora que dentro de tres horas? Twitter y otras redes nos han creado una necesidad. Resulta que ahora cualquier tontería es noticia”, dice Goñi. Salvo Facebook, con cifras demoledoras de uso y permanencia (cada visitante le dedica 6,7 horas de media al mes), el resto de redes tiene bastantes problemas para convencer a los escépticos.
En España, una de cada tres personas con cuenta en Tuenti no la usa o se ha dado de baja. En Twitter es casi el 40% y en LinkedIn más de la mitad. Google+ presenta las peores cifras: 6 de cada 10 registros son inactivos y un 20% del total de internautas entre 16 y 45 años ni siquiera la conoce.
El temor por perder la privacidad aleja a otros de estas páginas. Ignacio Villanueva, de 41 años, jefe de proyecto en una consultora, reconoce que nunca se ha dado de alta en una red social, pero si lo hiciera jamás volcaría allí sus fotos ni publicaría información personal.
“Cuando te metes aceptas sus normas, tu vida privada pasa a su disposición y utilizan esa información para venderte de todo. La gente no es consciente”, dice Villanueva. El 26% de los internautas españoles que no utiliza su cuenta de Facebook lo hace precisamente por miedo a perder la intimidad. Hace poco el fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, volvió a cambiar la política de privacidad. Y van unas cuantas.
Pese a las reticencias, la popularidad de las redes sociales no ha dejado de aumentar. De hecho España es el tercer país del mundo que más las utiliza a diario. En 2008 el 45% de internautas españoles tenía cuenta activa, ahora es un 91%. La duda es saber si han tocado techo, predecir cómo se comportarán los que ya están dentro y qué harán los que han preferido no entrar.
“Mi sensación es que hemos llegado a un punto de saturación, ambas categorías se mantendrán estables. Quienes ya las usan irán saltando de unas a otras según vaya apareciendo más y el porcentaje de insumisos seguirá en torno al actual”, dice Romero. Pinterest da una idea de la volatilidad de este fenómeno: en solo un año ya cuenta con casi 11 millones de personas registradas que le dedican una hora y media al mes, más del doble de tiempo que destinan a LinkedIn y Twitter juntos.
Los teléfonos inteligentes han supuesto un boom en la conexión a Internet y a las redes sociales sobre la marcha, pero no para todos. Elsa Goñi se niega a comprar uno. “La gente a mi alrededor se pasa el día colgada del móvil; no lo veo saludable. Y ahora con Whatsapp, peor. Caeré, en cuanto se me muera el Nokia no hay otra opción, pero lo utilizaré lo justo”.
España es uno de los países con mayor penetración mundial de smartphones, un 44% de la población tiene uno. Gema García, de 42 años, administrativa en una multinacional, no está en ninguna red social, pero sí se ha comprado un smartphone, un Samsung Galaxy. “Lo utilizo para mirar mi cuenta bancaria, leer noticias y acceder al e-mail, pero desde luego no para las redes sociales, no me interesan”.

Pinterest rectifica ante las críticas y promete no vender contenidos de usuarios

El peso de las crecientes críticas en la Red ha hecho reaccionar al fin al equipo de Pinterest, la última red social 'de moda'. Así, anuncia una modificación de sus términos de servicio y condiciones de uso que, entre otras cosas, elimina un punto realmente polémico: hasta la fecha, Pinterest se reservaba el derecho de vender los contenidos subidos por los usuarios.
Pinterest es una exitosa red social que, básicamente, funciona como un 'tablón de corcho virtual'. En él los usuarios pueden ir colocando todo aquello que les gusta en Internet, así como su propio contenido, de una manera fácil y con un resultado final agradable, bonito.
Creado hace dos años, su crecimiento ha sido exponencial en los últimos meses. Business Inside estima que podría valer entre 2.000 y 5.000 millones de dólares, y generó 17,8 millones de visitantes el pasado mes, un crecimiento del 52% respecto del mes anterior.
Las cifras son de vértigo, por tanto es lógico que muchas miradas se hayan posado en las actividades de este fenómeno de al Red. Algunos usuarios pusieron hace semanas el grito en el cielo al leer detenidamente las condiciones de uso del servicio. Otros criticaron los nulos esfuerzos de Pinterest por frenar la proliferación de mensajes pro anorexia, que son fuertemente controlados en otras redes sociales.
Así, por ejemplo, Knoed Creative, un estudio de diseño de Chicago, publicó a principios de marzo un post demoledor en el que recomendaba abandonar la cuenta de Pinterest si no se modificaban los términos de uso. Su mensaje corrió como la pólvora por la propia red social.
Según los términos aún vigentes de Pinterest, cada usuario reconoce y acepta que es "el único y exclusivo propietario de todos los contenidos que se ponen a disposición a través de la web" o que tiene los derechos sobre esos contenidos, un extremo altamente improbable dada la propia naturaleza del servicio: coleccionar (hacer 'pin') contenidos favoritos vistos en Internet.
Y al colgarlos en el perfil, da una licencia mundial a Code Brew Labs (la empresa dueña de Pinterest) para realizar cualquier tipo de explotación -incluso la venta- de esos contenidos.
Es más, incluso al aceptar esos términos uno acepta pagar los gastos legales derivados de cualquier demanda por propiedad intelectual contra Code Brew Labs. Es decir, en teoría, Pinterest puede vender cualquier material, como una imagen, que uno coloque en su perfil y, de afrontar alguna reclamación del legítimo dueño de ese material, la responsabilidad recae en el dueño del perfil desde el cual Pinterest ha tomado dicha imagen.
No obstante, un post posterior aclara que son unos términos del servicio con lo que Pinterest, como muchas otras compañías de Internet, trata de protegerse de posibles demandas por infracción de 'copyright' y hace que el usuario asuma la responsabilidad de lo que 'sube' a la Red.
De hecho, otros muchos servicios (Facebook, Flickr, YouTube…) cuentan con términos de uso que aluden a cesiones de derechos para explotar contenidos, pero añaden el matiz "sólo en relación con el servicio", es decir: necesitan el permiso del usuario para explotar el material subido a la red en la medida que es necesario para proporcionar el servicio que prestan.
En cualquier caso, el equipo de Code Brew Labs ha reaccionado y ha anunciado mediante un correo a sus usuarios y un post en su blog oficial algunos cambios en sus términos del servicios, políticas de uso y políticas de privacidad, que entrarán en vigor el 6 de abril.
"Nuestras condiciones originales señalan que mediante la publicación de contenido en Pinterest se otorga a Pinterest el derecho de vender su contenido", comenta el equipo, y añade: "La venta de contenido nunca fue nuestra intención y hemos quitado esto de nuestros términos actualizados".
También se comprometen a eliminar los 'pins' que "alienten explícitamente a la autolesión o el autoabuso", como respuestas a las recientes críticas que acusaban al sitio de ser un auténtico paraíso para la apología de la anorexia.
Por último, Pinterest promete herramientas más sencillas y eficaces para controlar posibles infracciones de derechos de autor o de derechos de marca.

El 'virus' del Partido Pirata se extiende en Alemania

Ya no es sólo un grupo de jóvenes con gafas de pasta y 'freaks' de Internet: el Partido Pirata crece en Alemania y las encuestas vaticinan que conseguirá entrar en tres nuevos parlamentos regionales.
En septiembre de 2011, el partido sorprendió al conseguir representación local en Berlín. El domingo, en las elecciones del estado de federado del Sarre, podría plantar una segunda bandera negra.
Las encuestas le otorgan el 5% de votos necesarios para entrar en el Parlamento. Y lo mismo dice para los comicios de Schleswig-Holstein del 6 de mayo y para los de Renania de Norte-Westfalia siete días después.
No tienen programa ni casi estructura, pero sus promesas de transparencia y de hacer partícipes a los ciudadanos están haciendo crecer una base cada vez más diversa. Un ejemplo es el Sarre. A diferencia de la cosmopolita, joven y urbana Berlín, en el pequeño estado rural del suroeste destaca una población envejecida.

Críticas y guiños

"No somos sólo un fenómeno de las grades ciudades, podemos movilizar a muchos votantes en otras zonas rurales del país", destaca Matthias Schrade, miembro de la dirección federal del partido, cuyo éxito está provocando en los partidos tradicionales tantas críticas como guiños de coqueteo.
Por ejemplo, el presidente de la conservadora CSU bávara y primer ministro de ese estado, Horst Seehofer, copia los predicamentos 'piratas' e imagina ya un "ministro de Internet'.
"Desde lo de Berlín nos conoce la gente. Lo importante es entrar en los parlamentos", dice Schrade antes de que el domingo llegue la primera de las tres pruebas: el Sarre.
Con sólo 347 miembros, una líder de 22 años y sin apenas estructura lograron fácilmente las 900 firmas necesarias para concurrir a las elecciones.
La oposición les achaca que no tienen programa. Los 'piratas' no ocultan que más allá de la legalización de las drogas, de que haya un salario base para todos y de la protección de datos en Internet no tienen de momento muchas más propuestas.

Transparencia

Se centran en la forma más que en el fondo. Y es una forma diferente respecto a la de los partidos tradicionales: transparencia y abrir las puertas a todos.
Sólo se necesita una conexión a Internet para seguir las reuniones a través de Liquid Feedback y Mumble, programas que permiten una videoconferencia abierta a todos para discutir temas. Aún con el riesgo consciente de ser espiados por los rivales.
También hay mesas redondas en las que el contacto es cara a cara. Verdadera democracia es lo que venden los piratas en un momento de desafección política.
Pero no quieren ser sólo un partido de protesta, sino que persiguen ganar influencia. Si todo va bien en las tres próximas elecciones se convertirían en el sexto partido de Alemania.

'Llevar un escáner al Parlamento'

Milchael Hilberer se presenta como candidato en el Sarre y tiene claro lo que hará si consigue escaño: "Llevar un escáner al parlamento", dijo al semanario Der Spiegel. ¿Para qué? "Para poner en Internet a disposición de todos los contratos públicos y los protocolos de las reuniones de las comisiones".
En Schleswig-Holstein ya se habla de que podrían entrar en una coalición de Gobierno. "Siempre con la condición de que las negociaciones se retransmitan en directo por Internet, aunque no me imagino que el resto de partidos quiera", dijo a Der Spiegel Torge Schmidt, candidato pirata en el estado del norte de Alemania.
En Renania del Norte-Westfalia, el estado más poblado del país, la base se ha duplicado desde la entrada en septiembre en el parlamento regional de Berlín.
Por Internet y twitter se expande la aún líquida ideología pirata. ¿Un virus que cambiará la política en Alemania?

Apple será más grande que España en tres años

Una acción de Apple cuesta ya tanto como un iPad. El pasado lunes, el título superó por primera vez los 600 dólares (unos 460 euros) impulsado por el anuncio de que la compañía repartirá dividendos por primera vez en 17 años. Las previsiones indican que el valor se puede casi triplicar y superar el PIB español en los próximos tres años.
Apple es la mayor empresa en Wall Street desde que superó la capitalización bursátil de Exxon el verano pasado. Vale más de 560.000 millones de dólares (unos 427.000 millones de euros) y contempla su futuro con tanto dinero en caja que no sabe qué hacer con él.
La compañía asegura haber vendido tres millones de unidades del nuevo iPad en los primeros tres días de su lanzamiento en Estados Unidos y otros nueve países. La tableta, que se puso a la venta en España este viernes, controla dos tercios del mercado, algo que se espera siga siendo así la mayor parte de esta década.
En los últimos tres meses de 2011, la compañía vendió 37 millones de iPhones, de los que depende más de la mitad de su negocio, 15,4 millones de iPads y 5,2 millones de Macs. Sus ingresos supusieron el 1,2% del PIB estadounidense ese trimestre.

Cifras de vértigo

La carrera por comprar acciones de Apple será aún más intensa cuando los fondos que no pueden adquirir títulos que no reparten dividendos entren en juego masivamente. Repartiendo dividendos, Apple ha encontrado destino a parte de los casi 100.000 millones de dólares (unos 75.000 millones de euros) que tenía en caja en diciembre de 2011.
Esto es más del doble que el capital disponible de Google y equivale, por ejemplo, al rescate de Portugal aprobado por la zona euro hace un año.
Con estos datos en la mano, el analista de Forbes Eric Jackson estima que para 2015 la acción de Apple ya estará en los 1.650 dólares (unos 1.260 euros) y su capitalización bursátil llegará por tanto a 1,53 billones de dólares (1,16 billones de euros). El precio de las acciones ya ha subido más de un 60% en el último año.

Más valor que España

El PIB español se enfrenta a un horizonte menos optimista para los próximos tres años. En 2011, sumaba 1,07 billones de euros. Si se cumplen las previsiones del FMI, caerá este año un 1,7% y el siguiente, un 0,3%. En 2014, se espera que vuelva a crecer a un ritmo del 2%. Estos cálculos dejarían el PIB español dentro de tres años de nuevo en 1,07 billones de euros, es decir (con el tipo de cambio actual del euro fuerte) 1,40 billones de dólares y por debajo del valor previsto para Apple.
El reparto de dividendos de la tecnológica empezará en verano. Cada título de Apple supondrá en el trimestre que empieza el 1 de julio 2,65 dólares, es decir algo más de dos euros. La última vez que la empresa repartió sus beneficios así fue en diciembre de 1995 y sólo fueron 12 centavos de dólar (nueve céntimos de euro) por acción.
Entonces no existía ni siquiera el iPod, Steve Jobs aún no había regresado a la empresa y el lanzamiento de Windows 95 había hundido un poco más a la escasa competencia de Microsoft.
El experto en Apple Gene Munster, de la consultora Piper Jaffrey, prevé que, después del primer año, el dividendo por acción suba un 20%. De los 54 analistas encuestados por Reuters que siguen a la tecnológica, sólo dos aconsejan vender.

Un tribunal japonés ordena suspender la función de autocompletar de Google

El Tribunal del Distrito de Tokio ha emitido una sentencia por la que ordena que el gigante de Internet Google suspenda la función de autocompletar de su buscador.
El dictamen da la razón a un hombre que denunció a Google porque considera que el autocompletar viola su derecho a la intimidad, ha explicado Hiroyuki Tomita, el abogado del demandante, en declaraciones a la agencia de noticias Kiodo.
La compañía ya ha respondido que no va a anular el autocompletado porque tienen su sede en Estados Unidos y los tribunales japoneses no tienen jurisdicción.