Quién iba a pensar que en el año en el que se conmemora el segundo centenario de Charles Darwin -y cuando ya todo, o casi todo, se daba por perdido en lo que se refiere a la evolución del ser humano-, la naturaleza volvería a demostrar su sapiencia: según datos recogidos por Wacoal América, empresa líder en la producción de sujetadores, el pecho de las mujeres ha aumentado en una talla en los últimos 15 años.
Por supuesto, las consecuencias no se han hecho esperar. Las casas de moda, acostumbradas a confeccionar prendas para cuerpos poco voluptuosos, se han topado con un 'valor añadido' a la hora de integrar sus diseños en la nueva anatomía de la mujer moderna. Más difícil todavía lo tienen en el sector lencero, donde ya han transformado la primera talla en segunda y la segunda en tercera. La prueba: en los seis primeros meses de 2009, la más comprada fue la cuarta, por encima de una tercera, muy solicitada el año pasado.
Así, algunas empresas han encontrado en este milagroso aumento de pecho un filón para hacer frente a la crisis. Elle Macpherson Intimates, por ejemplo, introducirá en su nueva colección sostenes para mujeres bien 'armadas' y aumentará su tallaje al número siete.
Pero, ¿cuáles son las razones de tanta abundancia? Las teorías son muchas. Algunos la atribuyen al imperante desaforado culto al cuerpo, que podría haber acelerado los tiempos de esta evolución. Sin embargo, como demuestra un estudio llevado a cabo en 2007 desde el centro norteamericano para la prevención y el control de los trastornos, la obesidad en mujeres adultas de todo el mundo también ha aumentado -en consonancia con sus pechos- en un 2,1% hasta 2004 y en un 35,3 % de 2004 hasta ahora. Otra de las causas es la creciente popularidad del bisturí; sin contar el arsenal de pomadas, proteínas especiales, estimuladores, etcétera, que aceleran los cambios hormonales.
En medio de este mar de datos, hay otra cuestión que considerar: la elección del sujetador; puesto que prolifera entre las adolescentes la costumbre de comprar sostenes una o dos tallas mayores para aparentar más voluptuosidad. Un dato: ocho de cada diez mujeres utilizan una talla de sujetador equivocada. Tanto es así que una de las presentadoras de televisión más famosa del mundo, Oprah Winfrey, ha dedicado al tema parte de su programa instando a las mujeres a usar sólo sujetadores de su tamaño. Parece que esta campaña de información ha surtido efecto en Estados Unidos y ha conseguido mostrar la verdadera identidad de los senos de las chicas americanas... que, aparentemente, no tienen nada que envidiarle a Sofia Loren en sus tiempos dorados.
