Mark Zuckerberg quiere que los inversores tengan clara la filosofía de su empresa. El folleto de salida a bolsa de Facebook, presentados este miércoles ante la SEC (el regulador estadounidense), incluye una misiva de Zuckerberg dirigida a los accionistas en la que el fundador de la red social se explaya acerca de la filosofía de su empresa.
"Facebook no se creó originalmente para ser una compañía. Se construyó para lograr una misión social: hacer el mundo más abierto y conectado. Creemos que es importante que cualquiera que invierta en Facebook comprenda lo que esta misión significa para nosotros", expone en su carta, incluida en el documento de salida a bolsa presentado a las autoridades bursátiles.
"Facebook aspira a construir servicios que den a la gente el poder de compartir y les ayude una vez más a transformar muchas de nuestras instituciones e industrias clave. Hay una amplia necesidad y una gran oportunidad de conseguir que todo el mundo esté conectado, de dar a todo el mundo voz para ayudar a transformar la sociedad para el futuro", prosigue Zuckerberg.
Pese a las aspiraciones de su compañía, eso sí, el fundador de Facebook no tiene intención de dar voz a los accionistas. El CEO de Facebook, que puso en marcha la red social más grande de Internet desde su dormitorio en la Universidad de Harvard, controlará el 56,9% de las acciones que dan derecho a voto de una firma que se espera sea evaluada en hasta 100.000 millones de dólares (76.120 millones de euros) cuando salga a bolsa.
Ello no es óbice para que el joven empresario, de 27 años, quiera que los inversores entiendan la filosofía de su red social: "Que la gente comparta más (incluso si sólo es con sus amigos cercanos o familiares) crea una cultura más abierta y lleva a una mejor comprensión de las vidas y perspectivas de otros (...) Ya hemos ayudado a más de 800 millones de personas a planear más de 100.000 millones de conexiones hasta ahora y nuestro objetivo es ayudar a acelerar esta conexión".
"Facebook no se creó originalmente para ser una compañía. Se construyó para lograr una misión social: hacer el mundo más abierto y conectado. Creemos que es importante que cualquiera que invierta en Facebook comprenda lo que esta misión significa para nosotros", expone en su carta, incluida en el documento de salida a bolsa presentado a las autoridades bursátiles.
"Facebook aspira a construir servicios que den a la gente el poder de compartir y les ayude una vez más a transformar muchas de nuestras instituciones e industrias clave. Hay una amplia necesidad y una gran oportunidad de conseguir que todo el mundo esté conectado, de dar a todo el mundo voz para ayudar a transformar la sociedad para el futuro", prosigue Zuckerberg.
Pese a las aspiraciones de su compañía, eso sí, el fundador de Facebook no tiene intención de dar voz a los accionistas. El CEO de Facebook, que puso en marcha la red social más grande de Internet desde su dormitorio en la Universidad de Harvard, controlará el 56,9% de las acciones que dan derecho a voto de una firma que se espera sea evaluada en hasta 100.000 millones de dólares (76.120 millones de euros) cuando salga a bolsa.
Ello no es óbice para que el joven empresario, de 27 años, quiera que los inversores entiendan la filosofía de su red social: "Que la gente comparta más (incluso si sólo es con sus amigos cercanos o familiares) crea una cultura más abierta y lleva a una mejor comprensión de las vidas y perspectivas de otros (...) Ya hemos ayudado a más de 800 millones de personas a planear más de 100.000 millones de conexiones hasta ahora y nuestro objetivo es ayudar a acelerar esta conexión".