Fuente:
BBC Mundo.
Las autoridades lo decidieron: en 2010 quedan prohibidos los trajes de baño de alta tecnología que han colaborado con la ola de récords obtenidos en en el mundial de natación que aún tiene lugar en Roma, Italia.
La Federación Internacional de Natación (FINA por sus siglas en francés) informó que la nueva normativa restringirá el material de los bañadores para todas las competencias.
"Nuestra idea es empezar con los nuevos bañadores en 2010", dijo el presidente de la FINA, el uruguayo Julio Maglione, elegido el pasado 24 de julio en la capital italiana.
Aunque la semana pasada se había informado que se volvería a los trajes de baño de tela a partir de mayo, ahora se habla de enero como nueva fecha, luego de consultar a los fabricantes.
Cabe señalar que hace unos días, Bob Bowman, entrenador del múltiple medallista olímpico Michael Phelps, amenazó con sacar al nadador de la competencia por el retraso en la aplicación de las nuevas reglas.
El nadador estadounidense celebró el regreso a los bañadores tradicionales: "Está bien que a partir del 1 de enero todos vamos a llevar casi los mismos bañadores y volveremos a hablar de natación y no de trajes de baño".
Trajes bajo la lupa
Una comisión dirigida por el profesor suizo Jan-Anders Madson, experto en los bañadores, más cinco científicos y un campeón olímpico trabajarán durante los próximos meses para elaborar un listado con las condiciones que deberán tener los nuevos trajes de baño.
De por sí, quedarán prohibidos los modelos completos y los hechos 100% de poliuretano.
Según la FINA, los productores de bañadores recibirán toda la información antes de terminar el año para poder adaptarse a las nuevas normas.
"Los fabricantes están preparados", dijo el director ejecutivo de la FINA, Cornel Marculescu, en una rueda de prensa. "Ahora, sin ninguna duda, las nuevas normas se aplicarán a partir del 1 de enero de 2010", agregó.
Los trajes se van, los récords se quedan
De manera inesperada en la natación, en menos de dos años se han batido más de 130 marcas. En estos mundiales de Roma se han roto hasta el momento 29 marcas, sólo dos de ellas con bañadores hechos sólo de tela.
El nadador Michael Phelps, tras su derrota en los 200 metros libres con el alemán Paul Biedermann, dijo que "esto no es natación. Los bañadores deben ocupar un lugar y los nadadores, otro. Espero el día en que podamos volver a llamar natación a este deporte".
Por su parte la estrella australiana de la natación, Libby Trickett, señaló en entrevista con la BBC: "Pienso que el deporte no debería haber llegado donde lo hizo, en términos de trajes de neopreno y el poliuretano. No creo que, de ninguna manera, sea correcto para nuestro deporte. Es decepcionante que haya tomado esa dirección y es decepcionante que la FINA le haya permitido avanzar de la manera en que lo hizo".
Sin embargo y a pesar de las críticas, Marculescu aseguró que los récords que figuran en la tabla de mejores marcas del mundo logrados con los bañadores de nueva generación, con elementos de poliuretano e impermeables, son válidos a todos los efectos.
Historia de un bañador mágico
En 1995, la marca deportiva Speedo lanzó el primer bañador completo con bandas de resina que dan menos fricción a la piel en el agua. Las marcas Arena y Jaked no se quedaron atrás.
Sin embargo, fue en los Juegos Olímpicos de Beijing en 2008 que los trajes de baño de segunda generación -100% poliuretano- tuvieron su auge. Estos bañadores comprimen los músculos, aumentan la flotabilidad y agregan propulsión al nadador.
En la capital china se presentó el bañador Lazer, creado por Speedo en colaboración con la NASA y utilizado por Phelps en la obtención de ocho medallas de oro. El traje tiene las costuras unidas con ultrasonido, el tejido reduce la resistencia al agua en un 10% y posee un núcleo estabilizador que sostiene al nadador, entre otras cualidades.
Los rumores no se hicieron esperar cuando, hace unos días en Roma, el nadador estadounidense lamentó el uso de la tecnología al perder ante Biedermann. Entonces Phelps no usaba su famoso bañador tecnológico.