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2011/08/29

Los opiáceos, fuera de control en EEUU


En ocasiones, los fármacos más necesarios pueden convertirse en los más temidos. Algo así está pasando en EEUU con los opiáceos, los derivados del opio que constituyen la mejor alternativa terapéutica para el tratamiento de algunos tipos de dolor agudo.
En dicho país, las muertes por este tipo de medicamentos como la de Michael Jackson hace poco más de dos años superan en la actualidad a los fallecimientos por sida, mieloma múltiple (un tipo de cáncer sanguíneo de muy mal pronóstico) y enfermedad hepática asociada al alcoholismo, según un estudio publicado en la última edición del British Medical Journal (BMJ), que llama a controlar este tipo de drogas para reducir la mortalidad asociada a su consumo.
Según explica el autor principal del estudio, el médico del Hospital St. Michael de Toronto (Canadá) Irfan Dhalla, el problema se refiere, sobre todo, al dolor crónico no asociado al cáncer. "Creo que muchos de los facultativos que recetan opiáceos para este tipo de problemas no son conscientes de que no hay ensayos aleatorios y controlados que apoyen su utilización a largo plazo".
El jefe de la Unidad de Toxicología del Hospital Clínic de Barcelona, Santiago Nogué, subraya que "es innegable" que el uso de opiáceos es una "fuente de problemas" pero ve diferencias entre la situación en España y la descrita por Dhalla. "Aquí la prescripción de opiáceos está muy regulada, tanto en oncología como en otras especialidades", subraya. Para Nogué, el problema es que el paciente "puede no hacer buen uso de estos fármacos, que son potentes". Esta situación hace que, según Nogué, la llegada al servicio de Urgencias de su hospital por intoxicación de opiáceos sea "un fenómeno que sí se observa".

El problema del futuro

Para Rafael Maldonado, catedrático de Farmacología de la Universidad Pompeu Fabra, la situación descrita en el BMJ "no se puede dar en España" en este momento, pero sí es un peligro a largo plazo.
"Aquí pecamos más de falta de prescripción que de exceso", señala Maldonado, que cree no obstante "que hay que ser precavidos, para cuando estas sustancias se empiecen a usar todo lo que se debería, como en EEUU". El especialista cree que en la Europa mediterránea "aún hay prejuicios para el uso de opiáceos como tratamiento del dolor". En el país norteamericano, en cambio, se ha pasado del defecto al exceso, "excendiéndose la prescripción en determinadas poblaciones".
Maldonado comenta que en EEUU no es raro que se receten opiáceos para dolores banales como los odontológicos. "Muchos médicos no saben que existen alternativas igual de eficaces para dolores no tan agudos", apunta Dhalla.
Maldonado predice que la prescripción de estos fármacos en España aumentará. "Es una situación que va a llegar y, entonces, habrá que evitar que se sobreprescriban", apunta. El control exhaustivo, sobre todo si la receta es a largo plazo, será entonces imprescindible. "Jamás se puede recetar un opiáceo y mandar al paciente a casa", advierte.

2011/07/06

Una 'droga interna' del cuerpo induce a comer grasas

Unas moléculas llamadas endocanabinoides, que el organismo produce de forma natural y son parecidas a componentes de la marihuana, son las responsables de que cueste tanto parar de ingerir alimentos grasientos durante una comilona. Según un estudio publicado este martes en PNAS, comer grasas promueve la producción en el intestino delgado de esta especie de droga natural que manda mensajes de apetito al cerebro. Por eso resulta tan difícil comer solamente una patata frita.
La investigación, desarrollada por científicos de la Universidad de California, se realizó con ratas e identificó altos niveles de endocanabinoides en sus intestinos si el alimento ingerido era rico en lípidos, pero no si lo era en hidratos de carbono o proteínas.
Cuando se ingieren las grasas, la lengua envía una señal al cerebro que viaja al intestino, donde se empiezan a sintetizar los endocanabinoides. Su presencia genera cambios en las células intestinales que crean la necesidad de comer más, "probablemente por la liberación de moléculas digestivas asociadas al hambre", declaró Daniele Piomelli, director de la investigación.
Piomelli aseguró que, desde un punto de vista evolutivo, los endocanabinoides existen por la necesidad de los animales de consumir grasas, que pueden escasear en el alimento y son cruciales para la nutrición.
El estudio abre las puertas a la lucha contra el sobrepeso y la obesidad, ya que el conocimiento del mecanismo se podría aplicar a la síntesis de fármacos.

Publico 

2011/06/03

El "fracaso" de la guerra al narco: una declaración de efecto incierto

Es algo que ya se ha dicho y parece obvio. Surge de un informe en el que participaron varios ex presidentes y ex funcionarios internacionales, además de intelectuales. ¿Por qué reiterarlo? ¿De qué sirve? ¿Qué cambia? ¿Por qué esos ex no hicieron algo cuando estuvieron a cargo?
Éstas y otras preguntas se desprenden del reciente reporte de la Comisión Global sobre Política de Drogas, que recomienda a los gobiernos reconocer que la llamada guerra contra las drogas ha fracasado y que la salida es despenalizar el uso de las sustancias hoy prohibidas.

La Comisión les pide a políticos y figuras públicas "tener el coraje de articular públicamente lo que muchos de ellos reconocen de forma privada: que la evidencia demuestra abrumadoramente que las estrategias represivas no resolverán el problema de las drogas".
Y dice que que debe ponerse el énfasis en el consumo de narcóticos como un problema de salud pública que evite la marginalización de sus usuarios y eventualmente reduzca el negocio de las bandas criminales que operan su comercialización.
clic Lea también: "La guerra contra las drogas ha fracasado"
Expertos consultados por BBC Mundo coincidieron en que, si bien no se trata de una propuesta nueva, lo novedoso es el alto perfil de quienes -en otras palabras- piden cambiar la estrategia impulsada fundamentalmente por Estados Unidos en América Latina y en el resto del mundo desde los tiempos del presidente Richard Nixon.
"La importancia de este reporte no es lo que dice, sino quién lo dice", le comenta a BBC Mundo Michael Reid, editor de las Américas de la revista británica The Economist.
"Es un grupo cada vez más grande de políticos jubilados y de actualidad que están llegando a la conclusión de que las drogas son fundamentalmente un problema de salud pública y no solamente de seguridad".

Entre las personalidades que participaron en el informe figuran los ex mandatarios César Gaviria (Colombia), Ernesto Zedillo (México) y Fernando Henrique Cardoso (Brasil), además del ex secretario general de Naciones Unidas Kofi Annan, el ex encargado de Relaciones Exteriores de la Unión Europea Javier Solana, el ex presidente de la Reserva Federal de EE.UU. Paul Volcker y el ex secretario de Estado estadounidense George Shultz.
Escritores como Mario Vargas Llosa y Carlos Fuentes también integran la nómina.
Si bien Annan ha sido de la partida, en la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito prefirieron no opinar sobre el informe. Un portavoz, Alun Jones, le dijo a BBC Mundo: "Estamos analizando el reporte. Por ahora es prematuro sacar conclusiones".

¿Por qué ahora?

Una de las preguntas que muchos se hacen es por qué los ex gobernantes y ex funcionarios unen sus voces ahora para admitir que la guerra contra las drogas "no ha sido, no podrá y no será ganada" y que la estrategia actual ha tenido "devastadoras consecuencias" para personas y países. Mirando casos como el México, ¿no es algo obvio a estas alturas?

"El debate de la prohibición versus la despenalización de las drogas es viejo. Pero este reporte es novedoso en el sentido de que nunca hemos tenido líderes de semejante calibre diciendo que la guerra contra el narcotráfico debe terminar y hay que comenzar a regular el consumo de distintas drogas, incluyendo la posibilidad de despenalizarlas", le dice a BBC Mundo Danny Kushlick, de la Fundación de Políticas de Drogas Transform, con sede en el Reino Unido.
Y el tema es hoy más relevante que nunca, según Kushlick: "Estamos en una situación en la que miles de personas han muerto en la guerra contra el narcotráfico en México o en la que Colombia sigue siendo profundamente problemática por la participación de paramilitares en el cultivo de coca".
"Al parecer, estamos peor que nunca en la guerra contra las drogas. Se gastan US$100.000 millones al año en esta lucha que sólo genera desesperación y degradación entre las personas más desfavorecisas del planeta".
Michael Reid, de The Economist, añade: "Uno de los factores que ha llevado a este grupo de personalidades a llamar la atención sobre el problema es precisamente que en los últimos diez o 15 años las mafias de la droga se han desplazado de Colombia a México, de México a Centroamérica, y han desembarcado por ejemplo en Perú y Bolivia".
"En otras palabras, el supuesto 'éxito' de la estrategia de seguridad en un país -como el Plan Colombia- lleva a fracasos en otros".

Electorado y dinero

En las lista de nombres que contribuyeron al informe de la Comisión Global sobre Política de Drogas llaman la atención los de políticos que fueron presidentes en América Latina.
En el caso del ex mandatario colombiano César Gaviria (1990-1994), su cambio de parecer sobre la guerra contra las drogas ha sido radical y, por lo tanto, inocultable: durante su gobierno impulsó una batalla frontal contra el narcotráfico, en especial contra el cartel de Cali, y persiguió y mató al capo del alto perfil Pablo Escobar.

¿Por qué él y los otros ex presidentes, notablemente el mexicano Ernesto Zedillo (1994-2000), no aplicaron las políticas que ahora recomiendan cuando estaban en el gobierno?
Los analistas consultados por BBC Mundo coincidieron en dos puntos: que hablar de despenalizar las drogas ha sido impopular entre el electorado y que la catarata de fondos de Estados Unidos en ayuda militar y de otra naturaleza para luchar contra el narcotráfico ha hecho más difícil -o menos tentador- cambiar el rumbo de las políticas.
"En el fondo todo es una cuestión de valentía. Lamentablemente, cuando los políticos están en funciones piensan que abogar por la legalización o la despenalización de las drogas es el beso de la muerte, porque es un argumento que va en contra de lo que cree mucha gente", afirma Reid.
"Los padres de familia piensan que las drogas son peligrosas para sus hijos. Es verdad, pero el tema es cómo se enfrenta ese peligro, porque la prohibición no funciona. El riesgo sigue ahí y sus hijos van a encontrar las drogas en circunstancias más nefastas y peligrosas. Un político podría decir, con lógica, que la guerra contra el narcotráfico cuesta mucho dinero y que esos fondos podrían usarse para el tratamiento y la educación. Pero es un argumento que ha costado vender al electorado".

Reid recuerda que en 2004 el ahora presidente estadounidense, Barack Obama, describió la guerra contra las drogas como un "fracaso", pero que no ha dicho nada como eso desde que asumió el poder. Y que siendo un parlamentario raso, el ahora primer ministro británico, David Cameron, pidió en 2002 un debate sobre la despenalización de las drogas en la ONU, pero que una vez en el gobierno no ha querido tocar el asunto.
Kushlick coincide en que se trata de una cuestión de agallas, pero que en el caso de América Latina también ha habido fuertes razones económicas.
"Durante muchas décadas ha sido políticamente imposible para líderes en ejercicio promover reformas significativas en la política global sobre drogas. La razón es que Estados Unidos les ha dado mucho dinero", sostiene.
Sin embargo, Kushlick afirma que las situación está cambiando en todo el mundo, incluso en los países más afectados por el narcotráfico: "Los presidentes de México y Colombia han abierto el debate sobre la efectividad de la lucha contra las drogas y la posibilidad de aplicar políticas alternativas".
Y apunta que la discusión ya está instalada también dentro del propio Estados Unidos, donde varios estados -incluyendo California- discuten si regulan o no la producción y el suministro de marihuana.

¿Útil?

En cuanto a las consecuencias prácticas del informe de la Comisión Global sobre Política de Drogas, las opiniones son divergentes.

Para Danny Kushlick, de la Fundación de Políticas de Drogas Transform, lo que hace el reporte es darles "más credibilidad" a los líderes políticos para que sean suficientemente valientes y emprendan reformas.
"Quiero creer que les dará fuerza para ponerse de pie frente a Estados Unidos, decirle que la guerra contra las drogas tiene que terminar y que, en cambio, debe buscarse una estrategia alternativa. Al mismo tiempo, pienso que Washington se encontrará cada vez más aislado si no participa en este debate que cada vez más países impulsan".
Por su parte Michael Reid, de The Economist, expresa sus dudas sobre la utilidad del reporte: "Es otro grano de arena en una playa que se está llenando lentamente con más granos de arena. Pero todavía falta muchísimo".
Para él, América Latina enfrenta un gran dilema. Los carteles ya se han vuelto poderosos y representan una amenaza para la democracia, y en esta situación se pregunta si basta con abordar el problema de las drogas como un tema de salud pública o si al mismo tiempo debe mantenerse algún tipo de política de seguridad, aunque distinta de la actual.
"Los narcos ya están instalados y no van a desarticularse por sí mismos", completa Reid.

BBC Mundo



"La guerra contra las drogas ha fracasado"

Los que promueven la descriminalización de las drogas cuentan ahora en el coro con las notables voces de varios ex presidentes, destacados líderes internacionales, intelectuales y empresarios.
Son las voces de los integrantes de la Comisión Global sobre Política de Drogas que en un informe publicado este jueves recomienda a los gobiernos reconocer que la llamada guerra contra las drogas ha fracasado y que la salida es legalizar el uso de las sustancias hoy prohibidas.

La Comisión pide a políticos y figuras públicas “tener el coraje de articular públicamente lo que muchos de ellos reconocen privadamente: que la evidencia demuestra abrumadoramente que las estrategias represivas no resolverán el problema de la droga”.
Aunque no es una propuesta nueva, lo novedoso en este caso es el alto perfil de quienes piden desmontar la estrategia que empezó a promover con esa etiqueta el gobierno de EE.UU. en tiempos del presidente Richard Nixon.

No es legalización

“La guerra contra la droga no ha sido, no podrá y no será ganada”, dice el informe de la comisión que tiene 19 integrantes que consideran que la estrategia ha tenido “devastadoras consecuencias” para personas y países.

Haciendo referencia a datos de la ONU, en el texto se informa que el consumo de drogas ha crecido entre 1998 a 2008 (opiáceos en 34,5 %; cocaína en 27%, cannabis en 8,5%).
A cambio proponen un enfoque que haga énfasis en el consumo de drogas como un problema de salud pública que evite la marginalización de sus usuarios y eventualmente reduzca el negocio de las bandas criminales que operan su comercialización.
Uno de los miembros del grupo, el ex presidente de Colombia, César Gaviria, aclaró a la BBC que legalización “no es una palabra que estamos usando en nuestro informe”.
“Estamos hablando de definir el consumo de drogas como un problema de salud y no como un problema criminal”, dijo Gaviria, quien aseguró que “la gente está enferma”.
“La gente tiene un problema de salud y tú tienes que lidiar con el problema de esa forma, no sólo poniendo personas en la cárcel. Eso no resuelve el problema de la sociedad”, aseguró Gaviria.

“Informe equivocado”

El reporte es muy crítico de la política estadounidense que es la que ha incentivado en el todo el mundo la persecución policial y militar de productores y consumidores de drogas.

En cambio se asegura que en aquellos países donde se han ensayado políticas menos restrictivas, como Portugal, Holanda, Suiza y Gran Bretaña, no se ha podido demostrar una incidencia directa en el patrón de consumo.
“Particularmente en EE.UU. el consumo de drogas, que es el más alto del mundo, no ha cambiado en los últimos veinte años” dijo Gaviria a la BBC, y afirmó que no veía en Washington una evolución “compatible con nuestros intereses”.
Cuando en 2009 el presidente Barack Obama nombró a Gil Kerlikowske para ocupar el cargo del llamado zar antidrogas de la Casa Blanca, se hizo hincapié en la óptica “menos represiva” que traía al puesto, demostrada en su tiempo como jefe policial en Seattle.
Sin embargo, a través de su portavoz, el zar dijo que el informe estaba “equivocado”.
“Hacer las drogas más disponibles, como sugiere este reporte, hará más difícil mantener nuestras comunidades seguras y sanas” dijo el portavoz Rafael Lemaitre.
Para contrarrestar los datos del informe, Lemaitre presentó cifras que indican que el uso de drogas en EE.UU. ha bajado en los últimos 30 años, junto a una caída de 46% en el consumo de cocaína entre adultos jóvenes en el último lustro.

México “abierto" al debate

También el reporte generó reacciones en México, actualmente el terreno más caliente de la lucha contra el narcotráfico, donde el gobierno dijo estar abierto a un debate "integral y global".
“Tomar medidas parciales es insuficiente e ineficaz porque es un fenómeno trasnacional, con una estructura de mercado internacional y requiere ser analizado en un contexto mucho más amplio que en un solo Estado", señaló un comunicado de la Secretaría Técnica del Consejo de Seguridad Nacional.
“Pensar que el crimen organizado en México es igual a narcotráfico, ignora que el crimen organizado comete otros delitos como secuestro, extorsión y robo" y rechazó que la acción policial implique un incremento en la violencia de los narcotraficantes.
Además de las recomendaciones de tipo político y sanitario la Comisión Global considera que hay que “romper” un molde cultural, ya que la mayoría de los usuarios no son los “lamentables adictos amorales” que muchos rechazan, mientras que los cultivadores de coca o marihuana suelen ser campesinos pobres que sobreviven con esos cultivos.

BBC Mundo


2010/11/17

Los adolescentes aficionados a los videojuegos consumen menos drogas

Los chicos adolescentes aficionados a los videojuegos son menos propensos al consumo de drogas (incluyendo tabaco y alcohol) que los de la misma edad que no juegan con videojuegos.

Curiosamente, en el caso de las chicas adolescentes las aficionadas a los videojuegos son más propensas a pelear o llevar armas a sus centros de estudios.

El estudio ha sido realizado por la American Academy of Pediatrics en base a 4.000 estudiantes de Connecticut.

Además, los jugadores habituales de videojuegos tienen una media superior en sus calificaciones. Las jugadoras habituales, por su parte, son menos propensas a la depresión.

De los encuestados, un 76% de los chicos y un 29% de las chicas se consideran aficionados habituales a los videojuegos. El 61% juega menos de siete horas a la semana.

Sólo el 4,9% de los aficionados a los videojuegos ha indicado tener problemas similares a la adicción, siendo más habitual en chicos que en chicas.

2010/11/12

Británicos y españoles, a la cabeza en consumo de cocaína

La cocaína cada vez mata y engancha más. El informe anual del Observatorio Europeo de las Drogas (OEDT), presentado ayer en Lisboa, sitúa de nuevo a España en el grupo de cabeza en el consumo de esta sustancia en Europa, aunque esta vez la primera posición de la clasificación corresponde a Reino Unido. España es la segunda.
El análisis del observatorio compara datos hasta 2008, antes del inicio de la crisis económica, y cifra en el 8,3% el porcentaje de españoles de entre 15 y 64 años que dice haber consumido cocaína al menos una vez en su vida. La cifra dobla la media europea, del 4,1%, y sólo es superada por el dato de Reino Unido, que encabeza el ranking con un 9,4%. Los españoles (población general) figuran por encima de los británicos en el consumo en el último año (3,1% frente a 3%), si bien esta estimación no recoge la reducción anunciada la semana pasada por la ministra de Sanidad, Leire Pajín, que sitúa el porcentaje en el 2,6% y constituye la primera caída de prevalencia registrada en los últimos 15 años. España, eso sí, mantiene su condición de puerta de entrada de droga a Europa junto con los Países Bajos. Entre los jóvenes, la prevalencia en el último año asciende al 5,5%, frente al 6,2% declarado por Reino Unido.

Un dato "preocupante"

El informe recuerda que, a pesar del descenso en el consumo que indican las encuestas, la cocaína sigue siendo una amenaza tan mortífera como silenciosa. Así, recoge que cada año se notifican en Europa mil muertes relacionadas con la cocaína, "habiéndose producido un marcado aumento en España y Reino Unido", sin concretar. El informe considera la cifra "preocupante" y estima que está muy por debajo de las cifras reales, ya que hay "problemas de infranotificación del papel de la cocaína en las muertes de consumidores que tenían problemas cardiovasculares previos".
"Las muertes causadas por la cocaína son un fenómeno mucho más complejo que el de las sobredosis por opiáceos", como la heroína, porque sus manifestaciones clínicas no son tan claras, según el OEDT. "La mayoría de las muertes están causadas por accidentes cardiovasculares y cerebrovasculares que no dependen de la dosis", señala, recordando que en muchas ocasiones no se ordenan análisis forenses para tratar de esclarecer la causa.
Según datos del Plan Nacional sobre Drogas, la cocaína estaba presente en el 67% de los fallecidos por reacción aguda a sustancias psicoactivas en 2007, lo que no quiere decir que fuera la causa única de los fallecimientos. El número de muertos ese año por reacción a sustancias psicoactivas fue de 475.
Para el jefe de la Unidad de Patrones de Consumo y Consecuencias del OEDT, el español Julián Vicente, "la tradición de vida nocturna" en Reino Unido y en España puede explicar que encabecen la lista de consumo de cocaína. "La socialización tiene lugar mayoritariamente en bares y discotecas", mientras que "en otros países son más habituales otros tipos de socialización, como ir a cenar a casa de amigos, por ejemplo", aseguró. Según el centro comunitario, el perfil de consumidor integrado y con una vida aparentemente normal se está imponiendo al del excluido socialmente.
En general, el número de personas que consumen drogas en Europa, incluida la cocaína, vive un incremento constante entre los de más de 40 años, entre quienes todavía se registran menos casos que en los adultos más jóvenes. Mientras que la República Checa es el país con los consumidores más jóvenes (26 años), España cuenta con los de mayor edad, ya que tienen de media 33 años.
La droga preferida por los europeos sigue siendo por el momento el cannabis. Un 10,1% de los españoles de entre 15 y 64 años reconoce haberlo tomado en el último año, sólo por detrás de Dinamarca y República Checa. Cuando los europeos echan la vista atrás, un 22,5% admite haberlo probado al menos una vez en su vida. Además de las drogas que llevan décadas implantadas en Europa, los expertos han identificado desde 2009 hasta 31 nuevas drogas, entre las que se encuentran la mefedrona y el llamado Spice, que ganan posiciones y ven en internet un canal de distribución idóneo. Así, el informe alerta del potencial que ofrecen estas nuevas sustancias, algunas de las cuales pueden tener usos legales no médicos, para la delincuencia organizada.

El efecto de la crisis

El documento alerta también del riesgo de que los preocupantes datos previos al estallido de la crisis económica empeoren bruscamente con ella. El motivo, además de la propia crisis, es la austeridad y recortes sociales planteados por una mayoría de gobiernos europeos. Según Wolfgang Götz, el director del OEDT, dos países a los que no quiso nombrar le han comunicado ya su intención de recortar los fondos dedicados a la lucha contra la droga, una medida desaconsejada por los expertos, ya que podría tener "unos costes a largo plazo muy superiores a los ahorros que pueden conseguirse a corto plazo".
"Las comunidades deprimidas tienen siempre un mayor riesgo de experimentar problemas con las drogas y sufrir los daños colaterales de delincuencia e inseguridad", apunta el informe, que lamenta que "los servicios destinados a consumidores de drogas están cada vez más amenazados por los recortes presupuestarios".

Lucha contra el alcohol

Por otro lado, el informe destaca que "existe una estrecha relación entre los problemas del alcohol y las drogas", y denuncia que hay países que "ni siquiera han formulado una estratregia frente al alcohol". "Se hace evidente la necesidad de adoptar un enfoque más global que abarque tanto las sustancias ilegales como las legales, y posiblemente también otras conductas adictivas".

Publico

2010/11/01

El alcohol, más destructivo que la heroína o el crack

El alcohol es más peligroso que el crack y la heroína cuando se evalúan los daños combinados para el consumidor y su entorno. Es la conclusión que se desprende de un estudio del Comité Científico Británico en Drogas (ISCD) publicado en la revista The Lancet.
El informe, elaborado por dos ex asesores del Gobierno británico, David Nutt y Leslie King, tiene por objetivo elaborar políticas estatales más eficaces para paliar el impacto social de sustancias adictivas, entre las que se incluyó también el tabaco.
La tarea no es fácil dado el amplio abanico de efectos dañinos que pueden tener las drogas en el consumidor y en su entorno, según explicaron los autores en el prólogo de la investigación.
Un estudio previo dirigido por Nutt en 2007 causó controversia al establecer nueve criterios principales de daño, desde el mal intrínseco de las drogas a los costes sanitarios que genera, cada uno de ellos con un mismo peso valorativo en la evaluación final.

Daño al individuo y al entorno

Para mejorar el resultado, este estudio empleó el denominado Análisis de Decisión Multicriterio (MCDA), una técnica que ya ha sido empleada con éxito para asesorar las autoridades en cuestiones con muchas aristas como el almacenamiento de residuos nucleares.
Nueve de los criterios tuvieron que ver con el daño que una droga causa en el individuo y otros siete con los daños causados a otros.
Todos ellos fueron divididos en cinco subgrupos referidos a los daños físicos, psicológicos y sociales. Las sustancias fueron valoradas del 0 al 100, siendo 100 el nivel máximo de daño causado en cada criterio específico.
Las nueve categorías de daño al individuo fueron: mortalidad a causa directa del consumo, mortalidad derivada del consumo, daño directo a causa del consumo, daño derivado del consumo, dependencia, discapacidad mental a causa del consumo, pérdida de capacidades de la percepción, daño a las relaciones personales y lesiones.
Las siete categorías de perjuicios a los demás fueron: crimen, conflicto familiar, daño al entorno cercano, daño al conjunto de la sociedad, coste económico y deterioro de la cohesión comunitaia.
Teniendo todas estas cuestiones en cuenta, el alcohol obtuvo una puntuación de 72, seguido de la heroína (55) y el crack (54).
El resto de drogas fueron: metanfetamina en cristal (33), cocaína (27), tabaco (26), anfetaminas (23), cannabis (20), ácido gama-hidroxibutírico (18), benzodiazepinas (15), quetamina (15), metadona (14), mefedrona (13), butano (10), khat (9), éxtasis (9), esteroides anabolizantes (9), LSD (7), buprenorfina (6) y setas (5).

Montar a caballo y consumir éxtasis 

Con estos resultados, los autores del estudio subrayaron que el alcohol, además de ser la droga más perjudicial en términos generales, es casi tres veces más dañina que la cocaína y el tabaco.
Los autores indicaron que la heroína, el crack y la metanfetamina en cristal fueron las sustancias más dañinas para el individuo que las toma, mientras que el alcohol, la heroína y el crack lideraron la lista de las más perjudiciales para el entorno directo.
El profesor Nutt, que fue despedido hace unos meses como asesor del Gobierno británico en cuestiones de drogodependencia tras afirmar que consumir éxtasis era menos peligroso que montar a caballo, defendió el modelo de clasificación y recordó que es el más preciso que se conoce hasta ahora para estas cuestiones.
"Encontrar los contrapesos necesarios es crucial porque influyen en los resultados generales. Este proceso ha de basarse necesariamente en los cálculos y la opinión, por lo que la mejor manera de llevarlo a cabo es a partir del consenso de un grupo de expertos trabajando de manera conjunta", explicó.
Los autores destacaron que sus conclusiones respaldan las de trabajos previos realizados en el Reino Unido y Holanda, "confirmando que el actual sistema de clasificación de las drogas no se corresponde con las pruebas acerca del daño que causan".
"También coinciden con la conclusiones de anteriores informes de expertos acerca de que afrontar de manera decidida los perjuicios derivados del alcohol es una estrategia de salud pública válida y necesaria", concluyeron.

2010/09/17

Crece el consumo de drogas en EE.UU.

BBC Mundo

En Estados Unidos 22 millones de personas consumen algún tipo de droga ilegal, 8,7% más que en 2008, según un estudio presentado este jueves por la Administración de Servicios Sanitarios Mentales y de Abuso de Sustancias (SAMHSA, por sus siglas en inglés).
Además unos siete millones de estadounidenses podría estar consumiendo drogas sin tener la prescripción requerida, en su mayoría fuertes medicamentos para el dolor. En este renglón, el aumento es del 20% comparado con el año 2002 cuando empezaron a llevarse estos registros.

Lea: Droga fácil para la juventud en la frontera

Entre 2008 y 2009 aumentó en 60% el uso de metanfetaminas, mientras que unas 750.000 personas habrían usado éxtasis.
"Los hallazgos de hoy son desilusionantes pero no sorprendentes", explicó Gil Kerlikowske, el director de la Oficina Nacional para Control de Drogas, cargo que es mejor conocido como "zar antidrogas".
"La actitud juvenil sobre el peligro de las drogas se ha suavizado en los últimos dos años. En el pasado eso frecuentemente ha señalado que vienen incrementos (en el consumo)", afirmó Kerlikowske.

"Estrategia errada"

El aumento general se debería a un incremento en el consumo de la marihuana y una percepción más "benevolente" sobre esta droga que dirigiría el interés a otras, de acuerdo con el reporte, que se basa en los hallazgos de una encuesta hecha a unas 70.000 personas.
El 77% de los encuestados reconocieron haber usado marihuana en el mes previo a la encuesta, mientras que entre adolescentes el consumo aumentó en 9%, en medio del debate sobre sus usos médicos y la posible legalización que decidirán los votantes en California.

Lea también: Cannabis, cada vez más legal en California

Ese debate habría dejado a los jóvenes estadounidenses "desinformados acerca de una droga cuya potencia se ha triplicado en los pasados 20 años" se lee en el informe de SAMHSA.
"El error aquí está del lado del gobierno, porque durante años ha puesto la marihuana, una droga relativamente segura, al lado de otras peligrosas como la heroína", aseguró a BBC Mundo, Mike Meno, portavoz del Proyecto Marihuana, un grupo que promueve la legalización y el uso médico de la hierba.
"Lo que el informe realmente muestra es que después de décadas de costosos esfuerzos policiales, el gobierno no ha logrado reducir la disponibilidad de la marihuana. Y la gente se está dando cuenta que la marihuana no es esa droga dañina que el gobierno presenta", afirmó.

Culpa de la crisis

De acuerdo con algunos analistas, la crisis económica y la lenta recuperación que ha experimentado el país han jugado un rol en el aumento del consumo de drogas.
"Hay una relación entre los asuntos económicos y el abuso de sustancias" afirmó la directora de SAMHSA, Pamela Hyde, al destacar que los consumidores desempleados duplican a aquellos que tienen un trabajo de tiempo completo, 17% contra 8%.
Para otros, la legalización del comercio de drogas "blandas", como la marihuana, podría servir para paliar parcialmente los problemas de la economía, al menos desde el punto de vista del ingreso impositivo, uno de los argumentos que hay detrás de la propuesta de legalización en California.
"Si quieres hablar de economía podríamos decir que cada vez más congresistas se dan cuenta de que tenemos este lucrativo mercado de marihuana y las leyes nos impiden tener ninguna ganancia legítima de ese comercio que estamos dejando en manos de carteles de narcotraficantes", afirmó Mike Memo.
Algunas estimaciones sitúan el mercado de la marihuana en EE.UU. en US$36.000 millones anuales, más que la suma de los cultivos de maíz y trigo.

2010/09/13

Los efectos de la cocaína pueden hacerse patentes 8 años después de su consumo

20minutos

Varios especialistas médicos y dedicados a la lucha contra la drogadicción han coincidido en advertir de la gravedad del consumo de cocaína, una "droga silenciosa" por la aparente invisibilidad de sus efectos y que puede provocar daños de salud mental incluso ocho años después de su consumo.
La consejera de Salud del Gobierno de Navarra, María Kutz, presidió una nueva jornada de 'Desayunos con Salud' dedicada a analizar el consumo de cocaína y sus efectos, con la participación de Fermín Castiella, director del Plan Foral de Drogodependencias; José Domingo Cabrera, subdirector de Salud Mental del Servicio Navarro de Salud, y Alfonso Arana, presidente del Proyecto Hombre en Navarra.

La consejera de Salud advirtió del daño que puede ocasionar esta droga, "aunque haya personas que piensen que por consumirla no pasa nada", y ha indicado que puede derivar en euforia, depresiones y psicosis incluso ocho años después de su consumo. Asimismo, resaltó que ocasiona "graves problemas de salud" como infartos cerebrales y cardiovasculares.
El 15% de los jóvenes de entre 15 y 29 años han tomado alguna vez cocaína, según los datos de la Encuesta de Juventud 2007-2008 que ofreció Fermín Castiella. En los casos extremos, este consumo provoca una forma específica de psicosis llamada cocaínica, caracterizada por delirios sensitivos y síntomas paranoides que, por último, pueden provocar daños permanentes en el sistema cognitivo del individuo. Otros efectos asociados son la ansiedad y la depresión.
Los expertos coincidieron en explicar en que no existe un patrón que permita asociar la cantidad de consumo con sus posteriores efectos y han advertido de que una sola noche de consumo podría bastar en algunas personas con determinadas características para provocar daños. Fermín Castiella indicó que el consumo de cocaína ha crecido en los últimos años tras verse asociado al "éxito" y a personalidades del papel cuché, y rodeado de "un halo de bondad que hacía su consumo apetecible al resto de mortales que no aparecerían en el papel cuché".

2010/05/26

"Dos horas de juego equivalen a una raya de cocaina"

Fuente: MeriStation.

No hay ni una sola semana en la que algún medio generalista recoja declaraciones alarmistas o sobre el mundo de los videojuegos. En esta ocasión, ha sido el periódico británico Lancashire Evening Post, el que publica varias declaraciones de un terapeuta británico llamado Steve Pope, que equipara el jugar a un videojuego con consumir cocaína.

"Jugar dos horas a un videojuego es el equivalente a consumir una raya de cocaína en cuanto al subidón que produce," explicaba, "Es la adicción de mayor crecimiento en nuestro país y está afectando la mentalidad de nuestros jóvenes, al mismo tiempo que lidera las causas de problemas físicos como la obesidad.
En el periódico se recogen datos como que tres de cada cinco jóvenes de menos de dieciseis años de edad, y cuatro de cada diez de menos de diez años, han jugado a niveles que muestran sígnos de adicción y se ha incrementado el número de jóvenes que buscan ayuda profesional. Pope continuaba añadiendo que "He visto a un joven de Preston de 14 años que había jugado 24 horas sin descanso, sin parar para comer y mostraba signos de deshidratación (...) Cuando sus padres intentaron quitarle la consola, se volvió agresivo e intentó saltar por una ventana."

Steve Pope tampoco desaprovechó la ocasión para enlazar la adicción a los videojuegos con la violencia, "La adicción a los videojuegos puede además derivar en una espiral de violencia tras jugar a juegos de esta naturaleza, que pueden cambiar la fantasía en realidad."

2010/05/24

La CIA ensayó con drogas para el control mental

Fuente: Publico.

En septiembre de 1952, la CIA administró, en una instalación secreta en Europa, una nueva droga a ocho desertores soviéticos. Buscaba dos cosas: saber si habían desertado de verdad y comprobar la eficacia de la sustancia en los interrogatorios. Este es uno de los experimentos que, según un memorando que el Pentágono acaba de desclasificar, llevó a cabo la agencia de inteligencia con LSD, codeína, benzedrina y otros 800 químicos para alterar la conducta o controlar la mente.
El informe es de 1977 pero no ha sido desclasificado hasta ahora. En él, el Departamento de Defensa menciona ocho amplios programas que, inspirados por la CIA, contaron con la participación directa o al menos financiación del Ejército de EEUU. Aunque se conocía la existencia de misteriosos proyectos, como el MK-Ultra o el MK-Delta, no se sabían muchos detalles sobre las sustancias probadas, las propiedades que se buscaban o si fueron aplicadas a seres humanos.

Pruebas con presos

Al calor de la Guerra Fría, el Ejército, y en especial la Marina, usaron sus fondos para probar las ocurrencias de la CIA. Así, en 1971 la agencia supo que el laboratorio de investigación Edgewood, de la Marina, había estado probando variaciones químicas del ácido glicólico. Una de ellas, denominada EA#3167, se había demostrado como un eficaz incapacitante en las pruebas con ratas. Después la probaron con varios presos de la prisión estatal de Holmesburg, en Filadelfia. El informe dice que eran voluntarios. La CIA les dio 37.000 dólares para que siguieran investigando.
El modelo era siempre el mismo: la CIA ideaba un objetivo, los militares la financiaban y contratistas privados hacían las pruebas, pero con supervisión militar.
Es el caso de la síntesis de estimulantes del sistema nervioso central. En 1970, una empresa privada sugirió a la CIA investigar análogos de la picrotoxina (un alcaloide venenoso), del alucinógeno ibogaína (un afrodisíaco hipnótico que se extrae de un árbol africano) y de la dopamina. El documento dice que "el objetivo de estos estudios es sintetizar nuevos tipos de drogas farmacológicas que afecten al sistema nervioso central y evaluar su impacto en la conducta humana". No hay constancia escrita de que se probaran en humanos.
El informe asegura que en esos días (1977) "no hay programas mantenidos por el Departamento de Defensa donde se prueben drogas en humanos en los que la CIA esté involucrada de alguna manera".

2010/01/01

La Generalitat valenciana alerta de una nueva forma de consumir drogas por vía ocular

Fuente: Publico.

Así lo ha confirmado Julia Aguilar, técnico de la FEPAD -organismo dependiente de la Generalitat valenciana-, quien ha indicado que este nuevo patrón de consumo ha sido detectado en dos conocidas discotecas de la provincia de Valencia y no se tiene constancia de que se lleve a cabo en otros lugares de España.

Según Aguilar, determinadas sustancias como el 'tripi' se están comenzando a consumir por vía conjuntival con el objetivo de potenciar sus efectos.

Los usuarios de esta nueva forma de consumo de drogas, según la técnico de la FEPAD, tienen edades superiores a los 25 años y han sido usuarios de la llamada 'ruta del bakalao', por lo que son consumidores de otro tipo de drogas y buscan nuevas sustancias.

Aguilar ha señalado que, aunque en los últimos años el consumo de LSD había descendido, ha tenido un importante repunte este año. Son dos las hipótesis fundamentales que están detrás de la ingesta de esta sustancia: los efectos psicodélicos que provoca y la facilidad a la hora de conseguirla.

También ha indicado que la crisis económica podría sumarse a la lista de hipótesis, ya que se trata de una droga muy barata.

Aguilar ha advertido del riesgo que conlleva esta forma de consumir drogas, tanto a nivel físico por los posibles daños oculares, como por los efectos que puede tener en el sistema nervioso central.

"El LSD es una sustancia que conlleva riesgo porque es un alucinógeno y cambia la percepción en la persona que lo consume, pierde el control sobre sí mismo y puede llegar a creer que vuela porque se cree Superman", ha señalado Julia Aguilar.

Además su consumo por vía ocular hace que el efecto sea "más rápido y potente" y, mientras en el consumo oral de 'tripis' o LSD el efecto llega en torno a los 40 minutos, cuando es por vía ocular el efecto se nota a los 15 ó 20 minutos debido a una más rápida absorción.

Una juventud que normaliza el policonsumo

Estas nuevas tendencias de consumo de drogas han sido detectadas a través de la Campaña Quioscos de Salud 2009, que la Consellería de Sanidad y la FEPAD, en colaboración con la ONG Controla Club, llevan a cabo en zonas de ocio y fiestas municipales.

A través de esta campaña también se están detectando unos patrones de consumo muy elaborados, basados en el policonsumo de determinadas sustancias como alcohol, cocaína, ketamina y MDMA.

Asimismo, muchos de los consumidores incluyen en sus noches un último punto de encuentro, 'el pajareo', que consiste en reunirse tras finalizar el ocio nocturno en casa de amigos donde el consumo de drogas todavía sigue presente.

Respecto al consumo de distintas sustancias, están apareciendo las conocidas como 'Calvin Klein', que mezclan cocaína y ketamina y que, cuando se combinan, permiten compensar sus efectos. Otras drogas como, por ejemplo, el 'éxtasis' se están sustituyendo por 'crystal'.

También se ha advertido de otra tendencia respecto al consumo de drogas como el alcohol: el denominado 'kit de campaña', que es "imprescindible entre determinados grupos de jóvenes durante el ocio nocturno" y que se basa en llevarse todos los materiales necesarios para consumir, desde la mesa hasta las sillas, pasando por el hielo, las bebidas y la nevera.

2007/12/13

Los 'videojugadores' tienden a beber y a drogarse menos que los que no juegan

Fuente: El Mundo.

Los usuarios de videojuegos "son personas normales" que si quisieran podrían drogarse, beber o incluso fumar, aunque muestran una tendencia a hacerlo menos que los que no juegan, según un estudio realizado por un profesor de la Universidad Complutense de Madrid.

El estudio, denominado 'Hábitos de consumo de drogas, alcohol y tabaco entre videojugadores y no videojugadores', saca principalmente la conclusión de que los los primeros consumen menos alcohol, droga y tabaco que los los segundos.

De hecho, dice que los videojuegos, tanto para los usuarios como para los que no lo son, "están escasamente asociados con hábitos no saludables, sobre todo en lo relativo a drogas y alcohol".

Antonio García Martínez, profesor titular de la UCM que ha dirigido el proyecto, con la colaboración de la Asociación de Videojugadores española, comentó que "el ocio de los videojuegos parece ser suficientemente gratificante en si mismo y la concentración que requiere puede ser un factor que aparte del consumo de estas sustancias mientras se juega".

"Los niveles de atención, destreza y superación personal que el videojuego requiere pueden llevar a alejarse de estos hábitos de excitación externa, una vez experimentada la novedad", añadió.

¿Hay relación?

Por su parte, el presidente de la Asociación de Videojugadores española, Julio Ignacio Ruiz, comentó que "no existe una relación directa entre el no consumo de drogas, alcohol y tabaco y los videojugadores, pero tampoco podemos establecer que los usuarios de videojuegos están por defecto aislados de estos hábitos".

"Los videojugadores beben igualmente y consumen diferentes tipos de drogas, son personas normales que no están aisladas de los hábitos generales, pero sí queremos resaltar la tendencia a no consumirlas que entre ellos existe", aseguró.

Los principales lugares de consumo de estas sustancias son las discotecas y los lugares de copas. Respecto a la edad, la franja en la que más se consumen este tipo de sustancias se sitúa entre los 18 y los 24 años destacando el consumo de cannabis y cocaína. A partir de los 35 años, el consumo declarado de éxtasis es nulo entre los videojugadores, y lo mismo sucede con otras drogas como las anfetaminas, los alucinógenos o la heroína, a diferencia de los no usuarios de videojuegos.

La muestra contó con más de 2.000 participantes entre los 18 y los 35 años, de los cuales el 40% eran mujeres. De todos ellos, cerca del 70% declararon haber utilizado videojuegos dos o más veces en el último mes, según informa Europa Press.