La crisis en el sector tecnológico
continúa poniendo en peligro tanto puestos de trabajo como desarrollos
que con el tiempo que llevan a sus espaldas sin llegar a despuntar no
parece que con esta situación vayan a terminar de remontar el vuelo.
La sede que LG tiene en el californiano Silicon Valley se ha visto afectada por un recorte de plantilla enmarcado en su programa para fusionar los grupos dedicados a la gestión de producto y al diseño de la interfaz de usuarios.
Desde LG se afirma que el ajuste laboral no afectará al trabajo que vienen desempeñando desde hace tiempo para desarrollar webOS, el sistema operativo propio que emplean, por ejemplo, los televisores inteligentes de la propia marca, precisamente una de las divisiones de la empresa que mejor resultado de ventas está teniendo, al contrario que la división encargada del negocio de smartphones, con cifras de venta en claro descenso.
Continúa así con poca fortuna la trayectoria del sistema operativo webOS, inicialmente obra de Palm que pasó a Hewlett Packard y finalmente a LG, quien acertadamente lo ha incluido en sus televisores pero no está obteniendo tanto éxito al intentar que también pase al mundo de los smartphones. En el futuro la marca surcoreana quiere llegar a implementarlo en automóviles inteligentes pero estos ajustes de personal que inevitablemente afectan al personal que trabaja en su desarrollo no hacen augurar un futuro muy optimista al respecto.
A aclarar este panorama no contribuye la imparable caída en el negocio de venta de smartphones, con un 37 % de descenso de ingresos en verano del presente año en comparación con el año pasado.
La sede que LG tiene en el californiano Silicon Valley se ha visto afectada por un recorte de plantilla enmarcado en su programa para fusionar los grupos dedicados a la gestión de producto y al diseño de la interfaz de usuarios.
Desde LG se afirma que el ajuste laboral no afectará al trabajo que vienen desempeñando desde hace tiempo para desarrollar webOS, el sistema operativo propio que emplean, por ejemplo, los televisores inteligentes de la propia marca, precisamente una de las divisiones de la empresa que mejor resultado de ventas está teniendo, al contrario que la división encargada del negocio de smartphones, con cifras de venta en claro descenso.
Continúa así con poca fortuna la trayectoria del sistema operativo webOS, inicialmente obra de Palm que pasó a Hewlett Packard y finalmente a LG, quien acertadamente lo ha incluido en sus televisores pero no está obteniendo tanto éxito al intentar que también pase al mundo de los smartphones. En el futuro la marca surcoreana quiere llegar a implementarlo en automóviles inteligentes pero estos ajustes de personal que inevitablemente afectan al personal que trabaja en su desarrollo no hacen augurar un futuro muy optimista al respecto.
A aclarar este panorama no contribuye la imparable caída en el negocio de venta de smartphones, con un 37 % de descenso de ingresos en verano del presente año en comparación con el año pasado.
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