En el caso de la clase ABC1, esos gastos pueden partir desde los $560 mensuales y orillar los $1.000, si se cuentan las cuotas de los planes para pagar dispositivos tecnológicos necesarios para aprovechar esos servicios.
Una medida habitual en el mercado de las TIC para analizar el consumo de los servicios tecnológicos es el ARPU, es decir los ingresos medios por usuario (el acrónimo está en inglés).
De acuerdo a datos suministrados a iProfesional.com por la consultora TBI Unit, este indicador, a nivel general, tenía a diciembre de 2009 los siguientes números:
- Telefonía fija: $63
- Telefonía móvil: $43
- Internet: $67
- Cable: $87
¿Cuántos abonados tienen cada uno de estos servicios? Pablo Tedesco, director de TBI Unit, describe así el mercado local:
- Los abonados de telefonía móvil representaban en 2009 47,8 millones.
- Las líneas de telefonía fija en servicio ascendían a 9,2 millones.
- Los abonados al cable alcanzaban los 6,1 millones.
- Había 3,9 millones de conexiones a Internet.
La clase ABC1 se encuentra a la vanguardia de los consumos de servicios. La “canasta tecnológica” a la cual acceden estas familias incluye la telefonía móvil y la fija, el acceso a la banda ancha a la red y televisión por cable en alta definición (HD), en el área metropolitana Buenos Aires.
A pedido de iProfesional.com, el consultor Enrique Carrier tomó los valores que estos servicios tenían el año pasado y los actualizó para que reflejen los ajustes en los distintos precios.
Como la penetración del servicio HD no alcanza al total de las redes de los cables operadores, se abrieron alternativas. Para este servicio, Carrier consideró un paquete de canales de películas.
Así, la “canasta tecnológica” mensual para el segmento ABC1 quedó conformada, según los cálculos del director de la consultora Carrier y Asociados, de la siguiente manera:
- Telefonía fija: $108.
- Telefonía móvil: $210.
- Internet: $130.
- TV paga: $120 (con HD, ese valor ascendería a $190).
Si se comparan estas cifras con los datos de TBI Unit ($260) se comprueba que la “canasta tecnológica” de la clase ABC1 supera por más del doble al promedio general del mercado.
Carrier explicó a iProfesional.com que estos consumos cambiarán en el mediano plazo, por lo menos en la manera de cuantificarlos, dada la canibalización que existe entre la telefonía fija y la móvil. Esto es así dado que cada año aumentan en forma indetenible los accesos a Internet a través de las redes de telefonía móvil.
“La tendencia es que el gasto en telefonía celular crezca, dado que su uso es cada vez más naturalizado, y se le suman paquetes de datos, que incluyen el e-mail y el acceso a redes sociales” desde el móvil, dijo el analista.
En cuanto a Internet, Carrier apuntó que el mercado está “planchado” si se lo mide por la cantidad de conexiones o abonados. Y a mediano plazo, en este ingrediente de la “canasta” se generará otro problema para medirla, con la llegada de los servicios de video bajo demanda (VOD, sigla en inglés). “¿Serán de TV paga o de Internet?”, se preguntó el analista.
La pregunta apunta a la posibilidad de que los cables operadores puedan utilizar sus redes para ofrecer videos o guardar programas para luego ser vistos por los clientes.
“Esto explica por qué las telefónicas quieren ingresar al negocio del video”, señaló. “La comparación de lo que pase hoy con la telefonía fija y la banda ancha no tendrá gran sentido en el futuro”, estimó.
Sin embargo, esta tendencia de acceder por banda ancha a Internet desde las redes de los operadores móviles depende de varios factores, entre ellos el despliegue de las conexiones 3G y la comercialización de los servicios.
“La tendencia es ‘Te vendo por servicios’, con el armado de paquetes a medida, como pasa con el e-mail y las redes sociales en el móvil”, apuntó Carrier.
Otras variables“Los usuarios ABC1 hace rato que entraron a la sociedad del conocimiento”, analizó Alejandro Prince, director de la consultora Prince & Cooke. Los hogares que están en esta categoría tienen ingresos mensuales por más de $10.000, es decir, entre el 10% y el 15%.
El analista hizo para iProfesional.com la siguiente descripción del “hogar digital”: "Tiene una PC en casa, si hay un hijo en la escuela secundaria o en la universidad habrá una o dos computadoras portátiles más. Si hay chicos, una (consola de videojuegos) Play Station o similar. Todos los mayores de 12 años tendrán un celular. Por lo menos hay un televisor en cada ambiente grande, es decir, living, los cuartos, la cocina, el cuarto de servicio. Hay varias cámaras digitales, una por persona adulta. Por supuesto, conexión de banda ancha a Internet y TV por cable o satelital. Y en cuanto a telefonía fija, todos los servicios de valor agregado, como el ‘call ID’ (identificador de llamada ingresante y el llamado automático”).
Pero además, el segmento analizado copa casi todas las conexiones a Internet desde el celular, si no se toma en cuenta en esta variable a los abonos de empresas.
Puesto a mensurar los costos mensuales de este hogar digital ABC1, Prince informó los siguientes valores:
- Internet más TV por cable: A partir de $150, si se toma en cuenta algunos de los paquetes que incluyen estos dos servicios.
- Telefonía fija: $50.
- Telefonía móvil: $200. Prince tomó en cuenta algunos paquetes que incluyen comunicaciones gratuitas entre números asignados. Si se agregan dos hijos jóvenes, el gasto sube otros $100 ($300 en total para este ítem).
En ese sentido, señaló que “cada dos o tres años se renueva el celular y la notebook, no la computadora ni el televisor”. En este caso, la cuota de amortización de estos bienes asciende a unos 100 pesos mensuales.
Los mundiales de fútbol son eventos que motivan cada cuatro años a la renovación del entretenimiento tecnológico hogareño, con los TV de plasma en su momento, luego el LCD y hoy el LED, y los sistemas de home theater. En este caso, Prince estimó que las cuotas mensuales ascienden a un total de $300 mensuales.
Por lo tanto, si no se toman en cuenta estos gastos de renovación, la “canasta tecnológica” para Prince ascendería a unos $500 mensuales.
Ahora, si se suma las erogaciones para comprar equipos, la cifra se eleva a unos 900 mensuales.
ConvergenciaPero esta “canasta tecnológica” variará en el mediano plazo, porque “la ubicuidad de la banda ancha dentro de los hogares argentinos conectados a Internet está cambiando de raíz la forma en que los usuarios acceden a los contenidos audiovisuales, impactando, directa e indirectamente, sobre los medios tradicionales”, indicó Carrier.
“El caso del video es por demás elocuente. La mitad de los usuarios (51%) ven videos en forma online en sus computadoras (streaming), porcentaje que crece a medida que desciende la edad. Tal es así que tanto entre nativos como adaptados, la relación de quienes miran videos online es de 3 de cada 4”, señaló el analista, a partir del informe “Usuario online argentino – 2010”, hecho por su consultora.
“Tanta difusión del consumo online de video no podía dejar de tener un impacto en la TV tradicional. De hecho, 1 de cada 4 quisiera poder ver estos mismos contenidos desde el receptor de TV. La relación entre TV e Internet se da también en el sentido inverso, ya que 1 de cada 5 mira contenidos creados para televisión desde la red, siendo más alta entre los adolescentes, quienes encuentran en la misma una forma de consumir TV mucho más acorde a lo que están acostumbrados. La posibilidad de consumir on demand es la principal motivación para dirigirse a Internet para acceder a contenidos televisivos”, indicó.
Más allá del streaming, casi 1 de cada 5 de los usuarios descarga videos de la red, según este estudio. “Nuevamente, la posibilidad de consumir bajo demanda surge como la primera motivación para hacerlo, seguido por la gratuidad y el acceso a estrenos. Este último punto cuestiona el modelo de ‘ventanas’ aplicado hasta el momento por la industria del cine y de algunas producciones televisivas”, explicó Carrier.
Acceso bajo demanda y amplitud de contenidos son en definitiva los grandes ejes que impulsan el consumo de video a través de Internet, tanto vía streaming como descargas.
“Por ahora, los operadores tradicionales de TV paga sólo pueden ofrecer un set acotado de contenidos y pocos de éstos bajo demanda. Así, nada hace pensar que la relevancia de la red para acceder a éstos vaya a disminuir. Algo que parece haber entendido claramente Google con el anuncio de su servicio Google TV”, concluyó el analista.