Los trabajadores mineros de España están movilizados
por el recorte a las ayudas a este sector, impulsado por el gobierno en
sintonía con las autoridades europeas en Bruselas. En medio de esta
situación está teniendo lugar el acopio de carbón procedente de Colombia
en el puerto de Gijón, en el norte del país, cuyo precio podría
multiplicarse por el cierre de las empresas locales.
Los sindicatos alegan que hay una intención de
especular con el precio del carbón por parte de la empresa importadora,
Goldman Sachs. Algunos expertos alertan sobre el riesgo de que se
desvirtúe el mercado del carbón con un aumento de precios sin techo. La
empresa sostiene que se trata de una operación "natural".
La importación de carbón es algo normal en España, dado que la
producción local no alcanza a satisfacer la demanda, sobre todo de las
centrales termoeléctricas. Sin embargo, según distintos agentes del
sector minero, el acopio no se daba ni en la magnitud ni en la forma que
está teniendo en Gijón.
"Inmediatamente después de que se anuncian unos
recortes del 73% a las subvenciones a la minería aparece una empresa
acopiando carbón con el único objetivo de especular", denuncia José Luis
Villares, representante minero del sindicato Comisiones Obreras (CCOO),
en diálogo con BBC Mundo.
Especulación
El sindicalista no duda en asegurar que la intención de Goldman Sachs
es "especular con el carbón en detrimento de la producción nacional".
Según explica, están acumulando existencias hasta que empiecen a cerrar
las empresas locales.
"Los analistas internacionales contemplan que a
partir del año que viene el carbón de importación va a pegar un repunte
de precio muy importante", añade. De hecho, la Agencia Internacional de
la Energía (IEA, por siglas en inglés) prevé un crecimiento del 65% de
la utilización del carbón a nivel mundial en los próximos 25 años.
Villares sostiene que la razón de que el carbón
colombiano, entre otros, sea mucho barato es que "las condiciones
sociolaborales en ciertos países del mundo, como puede ser Colombia, no
son iguales que las de los trabajadores de España". Según el argumento
oficial la diferencia está en la dificultad de la extracción del
mineral.
Algunos ven esta operación de Goldman Sachs como
el inicio de una tendencia para el futuro. "Como se sabe que la
explotación de carbón está bajando por los recortes a los subsidios de
la minería eso va a hacer que venga cada vez más carbón con fines
especulativos", señala Juan María Menéndez Aguado, experto en
explotación de minas de la Universidad de Oviedo.
Efecto llamada
"En Asturias hay centrales termoeléctricas que necesitan carbón
entonces saben que ese carbón se va a vender tarde o temprano", explica.
"Cuando las centrales tengan que dejar de consumir una cantidad de
carbón nacional, el carbón que se va a quemar va a ser fundamentalmente
de importación", concluye Menéndez Aguado, quien coincide que los
recortes pueden producir un "efecto llamada" al carbón de otras
latitudes.
En lo que no está de acuerdo es en que se
critique las condiciones laborales del sector en el país sudamericano.
"Yo conozco las explotaciones mineras colombianas y son como las del
primer mundo, tanto a cielo abierto como minería interior", apunta.
En lo que muchos analistas del sector minero
parecen coincidir es en advertir sobre el tema de la especulación. Pero,
¿qué fundamento tiene esta acusación? "Es porque desvirtúan el
mercado", opina Fernando Hernández Sánchez, Decano-Presidente del
Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos de Minas del Principado de
Asturias.
Según Hernández Sánchez el precio del carbón
local, aunque sea una producción por debajo de la demanda, sirve como
límite al precio del de importación.
Sin precedentes
"Con la finalización de las ayudas, el 1 de enero de 2013 muchas
empresas del carbón en España desaparecerán y al no haber un precio
local de referencia, el que se importa se pondría a los precios que
ellos quisieran", argumenta el experto. "Estaríamos en manos de los
especuladores", vaticina.
La máxima autoridad del Colegio de Ingenieros
Técnicos de Minas asturiano subraya la importancia de la cantidad de
carbón colombiano que Goldman Sachs está acumulando. "No había sucedido
que una empresa acumulara tantas toneladas en el puerto, llegan y llegan
barcos", cuenta con preocupación a BBC Mundo.
Hernández coincide con los sindicatos en
asegurar que el carbón llega de lugares donde las condiciones laborales
son "las de España hace 40 años".
Proceso natural
En la prensa asturiana se han publicado
distintas cifras sobre la cantidad de toneladas de carbón acopiadas. BBC
Mundo constató con un representante de comunicación para Goldman Sachs
que se trata de 156.000 toneladas, una cifra sin precedentes en dicho
puerto, según los analistas.
Los portavoces de la compañía estadounidense no quisieron hacer comentarios sobre las acusaciones de "especulación".
Se limitaron a señalar que "Goldman Sachs, en un
proceso natural de su negocio, tiene necesidades de almacenamiento de
diferentes productos de materias primas, en este caso en concreto en
Gijón al igual que en otras instalaciones en el mundo".
El carbón que se está descargando en Gijón proviene de la mina a
cielo abierto El Cerrejón, situada en el departamento de La Guajira, en
la región Caribe de Colombia. Se han publicado diferentes informaciones
sobre las condiciones de trabajo en dicho establecimiento.
La empresa declinó cualquier responsabilidad
sobre un supuesto uso especulativo del mineral ya que una vez realizada
la venta y la entrega "Cerrejón no tiene ningún control sobre el destino
o uso que el cliente pueda darle al carbón".
También dejaron en claro que sus costes de
producción son competitivos debido al tamaño de la mina y a "los
rendimientos y economías de escala". En el mismo sentido, rechazan que
se deba a condiciones laborales inadecuadas.
Por el contrario, las califican de "excelentes" y
remarcan que cumplen con los requerimientos de la OIT, y que incluso
disponen de diferentes beneficios para los trabajadores y su familia.