Microsoft tiene listo un nuevo buscador con el que quiere hacerle sombra a Google. El proyecto está en pruebas y aspira a ser el primer gran motor de búsqueda semántica de la Red. Las anteriores expediciones de este titán de la informática en el mundo de los buscadores han resultado ser un fracaso total. Se ha dejado millones en el camino, ha tratado de comprar Yahoo y, al final, lo ha resumido todo en una palabra: Kumo.
Kumo.com es el nombre de este nuevo buscador. En japonés, este término puede significar "nube" o "araña". Pero lo más importante es que, en el resto de idiomas, no suena a nada. Es una palabra inocua que tratará de competir con la misma inocuidad de Google.
Es más que probable que Microsoft acabe así con su anterior buscador, Live.com. A pesar de haber tratado de dominar Internet durante 13 años, Bill Gates sólo consiguió tener un 8,9% en el mercado de los buscadores con esta marca, sencilla pero totalmente desconocida para los internautas.
"El cambio de marca es necesario, pero no es lo único que necesita Microsoft", dice Matt Rosoff, de la consultora Directions on Microsoft. "El buscador Live.com ha sido muy confuso, poco conocido. Además de darle un nuevo nombre, Microsoft necesita que los resultados orgánicos de sus búsquedas sean mejores".
Kumo no es sólo un cambio de nombre. Es un cambio de tecnología, el fruto de la compra de la empresa Powerset por Microsoft el pasado verano, por la que pagó 79 millones de euros. Powerset ha desarrollado una técnica de búsqueda más sofisticada y compleja que la de Google. Mientras Google ofrece los resultados de una búsqueda basados en un complejo sistema de indexaciones, palabras clave y número de enlaces que apuntan hacia una página, la búsqueda de Powerset es semántica.
Cuando alguien pregunte a Kumo "¿De qué color es el cielo?", no recibirá miles de páginas web en las que se repite esta misma pregunta, sino páginas con una respuesta: "El cielo es de color azul". Según la revista Forbes, "la capacidad de comprender y de construir frases le da a Powerset una ventaja significativa a la hora de encontrar resultados más relevantes que los de Google, que sólo puede comprender lo que el fundador de Powerset define como una serie primitiva de palabras clave". El problema para Microsoft puede ser que Google haya conseguido que los internautas se acostumbren a sus búsquedas. Y a veces las costumbres son más poderosas que los cambios de marcas.