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2009/11/13

Enterrando mitos médicos: los chicles no se pegan al estómago

Fuente: El Confidencial.

Tal vez no hace mucho tiempo se tragó un chicle y piensa que puede que esté pegado en alguna pared de su estómago. A lo mejor también cree que sólo utiliza un 10% de su cerebro y que el 90% restante lo tiene dormido. O no come por la noche porque le han dicho que engorda más; incluso se niega a levantar mucho peso por si le provoca una hernia. ¿Serán verdad, o simplemente son creencias que han pasado de generación en generación? Un grupo de pediatras británicos se han cansado de escuchar demasiados mitos médicos y han destapado ocho creencias que son mentira -o verdades a medias- y sólo existen en la cabeza de ya demasiada gente.

No se ha encontrado evidencia científica que avale que sólo utilizamos un 10% de nuestro cerebro. No existe ninguna área del cerebro inactiva. Como sucede con los músculos, utilizamos las regiones del cerebro según la actividad que se desempeñe. Cuanta mayor complejidad, mayor uso. Nunca se utiliza el 100% del cerebro simultáneamente. De hecho, sólo en grandes ataques epilépticos puede llegar a utilizarse toda la capacidad del cerebro al unísono. Tal vez este bulo se tejió cuando se afirmó que se utiliza el 10% del cerebro de forma consciente, mientras que el 90% restante se hace inconscientemente.

La mítica regla de que se puede comer algo que se ha caído al suelo si no han transcurrido cinco segundos también se desmonta. Hay bacterias que tienen una capacidad de adhesión a los alimentos en pocos segundos. La salmonella, por ejemplo, sobrevive en la madera o alfombras durante semanas, y siente especial admiración por subirse a un alimento que cae al suelo en pocos segundos. Depende del tipo de alimento, de la bacteria y del suelo. Pero los microbiólogos afirman que al 99% de estas bacterias les bastan cinco segundos, sobre todo si el alimento es un trozo de carne y el suelo, un azulejo.

No crecen las uñas y el pelo una vez muerto. La idea surgió de una ilusión óptica. Al morir, el cuerpo se deshidrata, la piel se seca y es como si encogiera. Por eso parece que el pelo y las uñas crecen, pero es falso. Físicamente es imposible: en el hipotético caso de que pudiera producirse este crecimiento, requiere la actividad de un conjunto de hormonas que, al morir la persona, mueren junto a ella.

Hay supuestos que reiteran que el color de la orina indica la hidratación de la persona. “La orina tiene que ser clara. Si es oscura, significa que no bebemos todo el agua que deberíamos tomar”. En este caso, los invetigadores dicen que es una verdad a medias. Sí es cierto que una orina con más color es un síntoma de deshidratación, pero no tiene por qué ser así. Puede ser también por el proceso de ósmosis: a mayor cantidad de sustancia a disolver en una cantidad de orina, es entendible que presente un color más fuerte.

No se asuste si convive con un sonámbulo y se levanta por la noche. En ningún caso existe el riesgo de que le dé un ataque al corazón o sufra un daño cerebral si lo despierta. Se recomienda no hacerlo simplemente para no confundir ni asustar al propio afectado. Por nada más.

Otra de las creencias que seguro le habrán advertido alguna vez es tener cuidado con los chicles que, si se tragan, pueden quedarse pegado durante años en el estómago. Tal vez este mito nació –es totalmente falso- para evitar que todos los chicles terminasen en el estómago de todos los niños. No se preocupe: el estómago está lo suficientemente preparado como para enfrentarse sin ningún problema a estos ‘contratiempos’.

Leyendas urbanas del hombre y su sexo

Es imposible y falso que los hombres piensen en sexo cada siete segundos. Si un hombre permanece despierto 15 horas al día, pensaría más de 7.700 veces al día en el tema. No cuadran las horas en el reloj, aunque no falten ganas. Sí es cierto que piensan más que las mujeres, aunque la diferencia va menguando conforme pasan los años. Un estudio refleja que un 54% reconoce pensar en ello una o varias veces cada 24 horas frente al 19% de mujeres.

Quizá la más extendida y popular de las creencias es que el tamaño de los pies se asemeja al tamaño del órgano sexual masculino. No se lo crea. La ciencia creó este mito al contar que los genes Hox, implicados en el desarrollo embrionario, inciden tanto en el crecimiento de los dedos de las manos y pies como en el desarrollo del pene. De ahí surgió la relación entre los tamaños de las distintas partes del cuerpo. Pero no tiene nada que ver: unos pies grandes no necesariamente suponen un mismo tamaño en otras partes.

2009/01/16

Masticar chicle sin azúcar aumenta el flujo de la sangre en el cerebro

Fuente: Europa Press.

La acción de masticar chicle sin azúcar aumenta el flujo sanguíneo cerebral y provoca un mayor suministro de oxígeno que activa el estado de alerta y mejora la capacidad de concentración,

Así lo recoge un estudio dirigido por el Instituto Wrigley Science cuyos resultados aparecen publicados en la nueva página web 'www.orbitgumisgood.es', destinada a promover los beneficios de estas golosinas.

Tradicionalmente, nadie se había planteado que el chicle, "considerado más una golosina que un beneficio", según este centro, podía ser bueno para salud, si bien las primeras investigaciones realizadas con los chicles sin azúcar de la marca 'Orbit' han demostrado que proporciona beneficios para la salud bucal pero también sugieren beneficios potenciales para la dieta y el control de peso, el alivio del estrés, la concentración y la atención.

Por un lado, el chicle sin azúcar puede incidir en la salud bucal estimulando el flujo de saliva, eliminando los restos de comida y aliviando la sequedad bucal, entre otros. Pero, además, masticar chicle puede ayudar a proporcionar alivio durante el estrés y las tensiones cotidianas y contribuye a mejorar el estado de ánimo, así como también puede ser útil para controlar el peso, porque estos chicles tienen de 5 a 10 calorías por unidad y puede ayudar a reducir la ingesta de calorías de los 'snack' y a controlar el apetito.

Estos y otros resultados de ensayos clínicos serán los que se publiquen en la citada web inaugurada hoy, en la que el usuario podrá encontrar toda la información referente a los beneficios para el control de peso, la capacidad de atención o la disminución del estrés.

2007/09/14

Un grupo de científicos británico inventa un chicle biodegradable que no se pega

Fuente: Canarias7.

Un equipo de científicos británicos ha inventado un tipo de chicle que no sólo no se pega al suelo, a los zapatos o a cualquier superficie, sino que es además biodegradable.
El chicle contiene un polímero similar a la goma, pero que carece de la pegajosidad que hace del chicle tradicional un fastidio para muchos ciudadanos cuando lo pisan o se lo encuentran en el asiento del autobús, así como para los ayuntamientos.

Millones de trozos aplastados de la goma de mascar tachonan las aceras de muchas ciudades y son muy difíciles de eliminar por los servicios municipales de limpieza.

Según el profesor Terence Cosgrove, el chicle desarrollado por su equipo puede, por el contrario, eliminarse fácilmente de forma natural y se degrada además con el agua.

El chicle tradicional contiene un polímero similar al que se utiliza en los neumáticos de los coches y su pegajosidad se debe a sus propiedades "hidrofóbicas" -es decir, repelentes del agua-, lo que impide que se degrade.

El chicle desarrollado por Cosgrove y sus colaboradores, presentado en el Festival de las Ciencias que se celebra en la ciudad inglesa de York, tiene, por el contrario, una capa hidrófila, es decir que se mezcla bien con el agua, por lo que no se pega y es además fácilmente eliminable.

Los científicos británicos han efectuado varias pruebas para comprobar que no produce tampoco irritación bucal y, si consiguen la necesaria aprobación de las autoridades antes de fin de año, pretenden comercializar el producto a comienzos del 2008.

En el mismo festival, otro grupo de científicos, esta vez de la universidad de Sheffield, presentaron unos esquís que, según aseguran, son un ocho por ciento más rápidos que los tradicionales.

Los esquís van desprendiendo un lubricante que contribuye a aumentar la velocidad del esquiador cuando desciende por una pendiente, explicaron sus inventores, que aseguran que podrían utilizarse en competiciones internacionales de ese deporte porque son "legales".