Fuente:
Umoya.
De acuerdo con el ministro de Minería de Malí, el oro es y representa actualmente el 80,5% de los ingresos de exportación del país. Pero a pesar de que los precios récord del oro, Malí obtiene pocos ingresos.
El ministro de Minería de Malí, Abu Bakr Traoré, ha presentado esta semana, durante una conferencia en Bamako, las estimaciones para 2009 del sector que cada vez más se hace más importante para la economía del país, pero revelando también la creciente dependencia de este volátil sector. Durante el pasado año 2009, Malí obtuvo el 80,47 por ciento de sus ingresos totales de exportación de las minas de oro.
El sector minero de oro, poco a poco, ha crecido en importancia. Hace cuatro años, el oro representa el 72 por ciento de las exportaciones de Malí. Durante la última década, la producción de oro ha llegado a más de 50 toneladas anuales, de las cuales alrededor del 90 por ciento se produce en las siete principales minas industriales del país y el resto procede de la producción artesanal.
Según el ministro Traoré, la gran importancia del sector de la minería del oro está en los salarios pagados a los residentes y ciudadanos de Malí. El sector emplea a casi 8.000 personas, lo cual representa unos 163 millones de dólares (133 millones de euros) en salarios.
Pero un informe publicado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) el mes pasado, en el que se profundiza en la tributación del sector minero de Malí, revela que las riquezas minerales más importantes del país sólo aportan un pequeño beneficio a Malí. El bajo nivel de tributación de Malí, debido en gran medida a que sigue las recomendaciones del FMI, está destinado a atraer las inversiones extranjeras.
El actual régimen fiscal de Malí establecido para el sector minero del oro consiste en un sistema mixto y, siguiendo las recomendaciones del FMI, el gobierno de Malí decidió reducir las tasas aplicadas a las compañías mineras de oro del 6 al 3 por ciento con el fin de fomentar la inversión en este sector.
Las empresas mineras se benefician además de no verse obligadas a pagar impuestos durante un periodo de cuatro o cinco años después de sus primeras inversiones, incluso en el rentable sector de la minería de oro. Pero, ahora, hasta el FMI reconoce que "el Estado no ha sido capaz de obtener suficientes ingresos" a través de esta medida, y de hecho recomienda la eliminación de exenciones fiscales concedidas a las empresas mineras en África.
De acuerdo con el documento del FMI, la producción de oro de 2008 en Malí ascendió a un valor de casi 150 millones de dólares. De acuerdo con la aplicación de impuestos de un 3%, el Estado habría obtenido entonces 4,5 millones de dólares. Si el gobierno hubiera aplicado la tasa anterior del 6%, habría llegado a 9 millones.
María Victoria García Ojeda, de la Red Europea sobre Deuda y Desarrollo (Eurodad) sostiene que incluso un 6 por ciento es una tasa demasiado baja para un sector tan rentable como es el de la minería de oro. "Si el tipo de interés aplicado hubiese sido del 12 por ciento, tal y como se analiza en el informe 'Golden profits on Ghana's expense', los ingresos recaudados por el gobierno de Malí hubiesen sido de 18 millones en 2008", sostiene García Ojeda.
Mientras el oro representa el 80 por ciento de las exportaciones totales de Malí, representa sólo el 8 por ciento del PIB del país. "Las exportaciones de oro de Malí se han triplicado en la última década, sin embargo, sus ciudadanos han tenido hasta ahora muy pocos beneficios de los ingresos de la minería", sostiene Oxfam América. También reconoce el papel del FMI a la hora de que el sector de la minería de oro tenga unas repercusiones positivas muy limitadas para la economía de Malí.