Fuente:
Libertad Digital.
Mucho ha llovido y nevado desde que GTA: Episodes from Liberty City aterrizara en Xbox 360, y mucho se ha comentado por la red... incluso meses antes de que saliese GTA IV. Aún se dibuja en mi cara una leve sonrisa cuando recuerdo el tatuaje que mostró Peter Moore (entonces todavía en Microsoft) sobre GTA IV. Desde entonces, mucho ha llovido, pero los fans de la saga GTA han visto como Rockstar se decantaba por Xbox 360 una y otra vez (a pesar de que PS2 le dio un empuje a la saga colosal).
Por fortuna, los chicos de Rockstar no piensan abandonar a los sufridores usuarios de PlayStation 3, que al fin podrán disfrutar de las aventuras de Johnny Klebitz y Luis López, que os detallaré a continuación.
The Lost and Damned
Hace no mucho vimos cómo Niko Bellic cedía todo el protagonismo en The Lost and Damned a otro personaje. Este movimiento es de lo más lógico y esperado, pues el arco argumental de Niko Bellic parecía bien cerrado tras el final de GTA IV. En esta ocasión nos tocará manejar a Johnny Klebitz, un motero perteneciente a la banda Lost que sobrevive día a día en la ciudad gracias a sus compañeros y los negocios turbios que tienen entre manos. Johnny tiene la premisa de no meterse en líos, pero con la vuelta del anterior jefe, Billy, vemos que los problemas le crecerán por todas partes, pues la rivalidad con otras bandas se recrudecerá hasta niveles bastante elevados. Así se inicia GTA IV: The Lost and Damned, el primer episodio de GTA IV.
Con respecto al arco argumental, vemos que la aventura protagonizada por Johnny Klebitz no es tan interesante como la que Niko Bellic tuvo en su día. En parte se debe al carisma del personaje, pues el aspecto rudo y el poco sentido de las acciones de Johnny no ofrecen una motivación tan importante como la que movía al propio Bellic. Además, se echa de menos algún que otro personaje secundario tan interesante como era el propio Roman. Aun así, hay situaciones hilarantes "made in GTA" sin perder ese toque serio que ha adquirido la saga en esta cuarta entrega.
A pesar de que me parece que GTA IV tiene una historia mucho mejor hilvanada que The Lost and Damned, he de reconocer que este capítulo ofrece mucho más de lo que los fans de GTA IV podían esperar. Digo esto porque los usuarios de consola no están acostumbrados a recibir un contenido episódico tan sumamente extenso, amplio y divertido como es éste.
The Lost and Damned es mucho más grande de lo que cabría esperar. Completar el arco argumental de Johnny, más participar en unas cuantas misiones secundarias y minijuegos me ha llevado más de 13 horas. A partir de ahí, la duración se dispara dependiendo de lo que cada uno quiera hacer, pues hay gente que disfruta recorriendo cada recoveco, así como también hay gente que disfruta con las interesantes opciones multijugador que GTA IV: The Lost and Damned ofrece.
Nada más ponernos a jugar, vemos que The Lost and Damned nos trata como unos auténticos "veteranos", y es que aunque la dificultad de las primeras misiones es bastante asequible, no existen las típicas misiones que funcionan a modo de tutorial y que tanto molesta a algunos. Luego, viene una sucesión de misiones que, en algunos casos, nos recordarán a las vividas en GTA IV, y en otros aportarán algo de aire fresco. Sigue habiendo misiones del estilo "vete del punto A al punto B, te cargas a X y líbrate de la policía", pero también hay misiones más curradas como guerras entre bandas, emboscadas, misiones de rescate, carreras, etc. En definitiva, una buena variedad de situaciones que, a pesar de que algunas no son precisamente novedosas, entretendrán al usuario durante un montón de horas y se lo harán pasar tan bien como la primera vez, pues no podemos olvidar las cotas de diversión que GTA IV ofrecía.
Dentro del capítulo de novedades nos encontramos con algunos añadidos tan interesantes como nuevas armas (lanzagranadas, nuevos tipos de escopetas, etc.), nuevos vehículos (sobre todo en lo que concierne a los vehículos de dos ruedas) y algún que otro retoque a la jugabilidad que lo hace aún más atractivo. Eso sí, quizá lo más llamativo sea el renovado control de las motos, medio de transporte preferido por Johnny Klebitz. Vemos que el control se ha reajustado para hacerlo aún más cómodo y sencillo, aunque si he de decir la verdad, a mí me encantaba recorrer la ciudad en moto en GTA IV, con lo que no he notado tanto este cambio en el control como ha ocurrido con otros usuarios.
También se observan novedades dentro del capítulo de minijuegos, pues ahora podremos echar pulsos, apostar a las cartas o echar una partida al air hockey. Todos ellos ayudan a ofrecer más posibilidades de juego, aunque no se convertirán en el centro de tus diversiones, pues son simples bagatelas que ayudan a pasar el rato en determinados momentos. También es verdad que se han incluido pequeños extras tan interesantes como ir en formación con nuestra banda (tenemos que colocarnos en el sitio exacto que nos corresponde) o la relación de camaradería que tenemos con ellos, pues nos proveerán de armas, munición y equipo, así como también nos acompañarán para hacer de las misiones algo más sencillo (podrán adquirir experiencia, haciendo que sean más fuertes, aunque si mueren serán repuestos por otros que no tienen experiencia). En líneas generales, la banda Lost ayuda a ofrecer un entorno nuevo que distinga a este contenido del que GTA IV ofrecía.
The Ballad of Gay Tony
Ahora le llega el turno a Luis López, personaje que no tendrá ningún problema en meterse en los problemas de los demás, aunque su propósito es el de mantener sus negocios a flote. De hecho, parece que Luis (o Luigi para los amigos) no tendrá problema a la hora de asesinar, dar palizas o delinquir. Se ve que su código ético y moral le permite llevar esta carga sin ningún problema, aunque en más de una ocasión se quejará del mundo en el que se está metiendo, y de que se juega la vida cada dos por tres.
No revelaré muchos detalles del argumento porque sería una lástima que os enterarais por mí. Eso sí, en The Ballad of Gay Tony nos encontraremos con unos personajes secundarios tan interesantes como los que ya pudimos ver en las entregas anteriores de GTA IV. Por una parte está Gay Tony, nuestro socio. Por su apodo ya os podéis hacer una idea de sus tendencias sexuales, lo que unido a su gusto por las compañías poco recomendables y las drogas, hará que se junte con prestamistas y demás personas ,que le harán un flaco favor a él y a sus negocios. Gracias a Dios que junto a Gay Tony siempre estaremos nosotros, pues si Luis no estuviese a su lado, seguro que ahora mismo no sería más que alimento para los peces de Liberty City.
Por otra parte nos encontramos con otros personajes secundarios como los amigos de toda la vida de Luis (Enrique y Armando), que quieren dar un gran golpe y ganar pasta a espuertas con la droga. Luego está Yusuf Amir, un ricachón al que le gusta coleccionar objetos de oro (teléfonos, coches, armas, etc.) y acostarse con "mujeres libertinas". Es uno de los personajes más graciosos de todo el universo de GTA IV (con permiso de Roman), y la verdad es que sus misiones son de lo más alocadas, pues a pesar de tener todo el oro del mundo, siempre querrá algo que ni con dinero podría conseguir.
Por último, me gustaría hablar sobre las apariciones estelares de Niko Bellic y Johnny Klebitz, pues durante el transcurso de alguna de las misiones principales de The Ballad of Gay Tony aparecerán, aunque no serán los únicos personajes que reaparecerán. Así se consigue rodear a este nuevo episodio de un contexto coherente, pues realmente se aprecia que estamos en la misma ciudad, haciendo fechorías a la vez que los protagonistas de las dos anteriores aventuras (no hay más que ver el primer vídeo de The Ballad of Gay Tony para darse cuenta de esto).
El concepto de juego del título que hoy nos ocupa es idéntico al que llevamos viendo en GTA IV y The Lost and Damned, aunque incluye novedades atractivas en forma de nuevos vehículos, armas, misiones secundarias, minijuegos, etc.
Aún así, lo más llamativo de todo es la variedad e intensidad que ofrecen las misiones principales a las que tendremos que hacer frente a lo largo de este nuevo episodio. Olvidaos de encontrar misiones sencillas al principio del desarrollo, pues The Ballad of Gay Tony empieza tan fuerte como puede, pues en una de las primeras misiones tendremos que robar un helicóptero militar de un yate (llegando sin que nos vean) y hundir el yate y las lanchas motoras con los supervivientes del naufragio.
Luego nos tocará participar en un torneo de lucha (al más puro estilo Club de la Lucha) para conseguir que el prestamista de nuestra madre dé la deuda por saldada, subir hasta lo más alto del rascacielos más elevado de Liberty City mientras nos cargamos a un montón de policías y varios helicópteros hasta llegar a la cima, donde nos lanzaremos en paracaídas. Sí, habéis leído bien, vuelven los paracaídas a la saga Grand Theft Auto después del GTA: San Andreas. Su uso será bastante importante a lo largo del desarrollo, pues serán varias las misiones principales que nos obligarán a utilizarlo, además de las misiones secundarias de salto base, de las que hablaré más adelante.
Otra misión bastante llamativa es aquella en la que teníamos que jugar al golf para darle a un personaje con la bola y que así "cantase" toda la información que sabe. Otra nos obligará a destrozar un avión, una grúa y un tren a base de bombas lapa, y así un largo etcétera de interesantes misiones, que ofrecen algo realmente nuevo en comparación con lo visto ya en anteriores episodios de GTA IV.
Llega el momento de hablar de alguna de las misiones secundarias, que tendremos que ir cumpliendo para poder decir que hemos completado el 100% de los desafíos de The Ballad of Gay Tony. Por una parte, hay que exterminar las gaviotas que hay repartidas por el escenario. Luego están las misiones secundarias a las que podemos acceder al encontrarnos con ciertos personajes por la calle (como también pudimos ver en anteriores episodios).
Aún así, lo más interesante de todo son los saltos base y las misiones de Guerra de Drogas. Los saltos base nos obligarán a saltar en paracaídas desde un helicóptero o lo alto de un edificio. Para cumplir todos los saltos que hay repartidos por todo el escenario bastará con pasar a través de los aros que nos marquen y aterrizando en el punto exacto que se nos ordene, o encima de un camión en movimiento. Por otra parte tenemos las Guerras de Drogas, que nos permitirán luchar contra otras bandas para conseguir así el monopolio del narcotráfico en Liberty City (son 25 misiones de creciente dificultad que ayudan a alargar la vida del producto). Por último, vemos que se han incluido otra serie de minijuegos interesantes como jugar al golf, participar en torneos de lucha (sin armas) o seguir quedando con nuestros amigos para ir a un local de striptease, emborracharnos en bares, jugar a los dardos, billar, etc.
A esto hay que sumar las opciones que nos ofrecen los locales que Gay Tony y Luis López tienen. Luis tendrá que pasarse por ellos para cumplir diferentes trabajos. De todas estas acciones, la más extraña es la de poder bailar con otra chica. Así se activa una serie de botones que debemos de mover siguiendo el ritmo de la música. Si conseguimos seguir bien el ritmo y las instrucciones de pantalla, la chica puede quedar tan agradecida que nos dará un morreo y nos invitará al baño para practicar un poco de "ejercicio". Otras acciones que podremos realizar en los bares es la de beber chupitos, ejercer de portero o participar en un minijuego de ver quién bebe más rápido en la zona VIP. Sólo echo de menos la opción de poder echar una siestecita en la moqueta del club en cuestión (es broma).
Pasemos ahora a hablar de otro aspecto muy importante en el desarrollo de The Ballad of Gay Tony. Al finalizar cada una de las misiones aparecen una serie de estadísticas relacionadas con la misión, que nos indican si hemos sido capaces de cumplir todos los objetivos marcados por el juego. Es una lástima que no podamos saber dichos objetivos al inicio de las misiones, pero así se consigue dotar al juego de un alto componente de rejugabilidad, pues una vez hayamos superado todas las misiones principales, podremos volver a jugarlas para mejorar nuestros tiempos (que luego podremos colgar en el Rockstar Social Club) o para completar todos los objetivos secundarios que no pudimos conseguir la primera vez que las jugamos.
También hay que comentar que se han incorporado nuevos vehículos (entre los que se encuentra un tanque), la mayor importancia que tendrán los helicópteros durante el desarrollo (con especial atención al Buzzard, que tiene ametralladora y misiles para acabar con todo lo que queramos) y la incorporación de nuevas armas al arsenal, entre las que destacan la escopeta de disparos explosivos (que es muy dañina en distancias cortas), un rifle de asalto que nos permite disparar en ráfagas muy rápidas o las bombas lapa, que incluso podremos lanzar desde el vehículo (ideal para deshacernos de los rivales más molestos que nos persiguen mientras intentamos escapar).
Multijugador
Grand Theft Auto: Episodes from Liberty City también ofrecerá novedades importantes dentro del apartado multijugador, pues se han incluido nuevos modos de juego, que resulta bastante atractivos. De primeras, nos encontramos con el Chopper vs. Chopper, que será un 1 vs. 1 donde un usuario, que irá en moto, tendrá que escapar de un helicóptero (que es manejado por el otro usuario). Otro modo es el Conquista la Ciudad, donde habrá que luchar por equipos por controlar los diferentes territorios. Por otra parte tenemos la partida Protección de testigos, que viene a ser un enfrentamiento entre policías y los miembros de la banda Lost, que pretenderán rescatar a unos prisioneros. Luego está Lobo Solitario, donde un jugador deberá de aguantar la embestida de los demás el mayor tiempo posible, y cada vez que pierda, el testigo le pasará a otro. Ganará el que más puntos consiga. Por último también podremos participar en una serie de misiones en las que tomaremos el papel de un miembro de la banda de Lost, lo que viene a ser una especie de cooperativo con otros muchos jugadores.
Gráficos
El aspecto gráfico no ha variado mucho, aunque sí que se notan mejoras en la destrucción de ciertas partes de los escenarios. También he apreciado mejores daños en las carrocerías de los vehículos, aunque son cambios muy sensibles en los que hay que fijarse para notar la diferencia. Por otra parte, Rockstar ha retocado el motor gráfico para que la distancia de dibujado sea algo mayor, para que el número de vehículos en pantalla aumente y para que el número de ralentizaciones sean menores. Aún así, todas estas mejoras no son más que detalles que se suman al estupendo aspecto que Liberty City sigue mostrando, y es que cuando uno va en helicóptero es cuando realmente se da cuenta del curro que Rockstar se ha metido, pues pocas veces hemos visto ciudades tan realistas como ésta.
También vemos que se mantienen algunos pequeños defectos que en ningún caso consiguen restarle mérito a la gran labor realizada por Rockstar. Eso sí, se nota que el tiempo empieza a pasar, pues el aspecto ya no es tan impresionante como cuando lo vimos en abril de 2008.
Por otra parte, no puedo más que rendirme a los pies de Rockstar y la estética que han querido ofrecerle a cada uno de los capítulos, que se aprecia tanto en el apartado gráfico (por medio de diversos efectos de luz) como en el apartado sonoro (no es lo mismo la bso de The Lost and Damned que de The Ballad of Gay Tony).
Música/Sonido
Nuevas melodías para las emisoras de cada uno de los dos episodios, un doblaje al inglés estupendo y unos efectos de sonido que rayan a muy buen nivel es lo que nos encontraremos aquí.
Edición Española
Los dos episodios vienen con textos de pantalla en castellano, mientras que las voces se mantienen en inglés. Además, el juego sale al precio de 44.95 euros, lo que viene a ser un precio muy competitivo si tenemos en cuenta todas las horas de diversión que se juntan entre los dos episodios.
Por cierto, no es necesario el disco de GTA IV para poder jugar a estos episodios.
Conclusión
GTA: Episodes from Liberty City es el perfecto broche final para las aventuras vividas en esta nueva Liberty City. Entre los dos episodios se nos abre un mundo nuevo de posibilidades, siendo la excusa perfecta para volver a las calles de esta enorme urbe y disfrutar de las decenas de misiones que Rockstar nos tiene preparadas. Si os gustó GTA IV, no deberíais dejarlo pasar.
Lo mejor: Ofrece mucho más de lo que cabría esperar. Entre los dos episodios incluye muchas misiones principales y secundarias. Pequeños retoques en el motor gráfico para que luzca mejor. Las opciones multijugador de The Lost and Damned son muy divertidas. La incorporación de nuevas armas, vehículos y objetos como el paracaídas. La posibilidad de repetir las misiones para cumplir todos los objetivos secundarios y mejorar nuestros tiempos.
Lo peor: Pequeños defectos gráficos. Ya no habrá más contenidos para GTA IV. Las tramas argumentales quizá no dan tanto como la protagonizada por Niko Bellic.