Apple ha lanzado una nueva actualización de software para los nuevos modelos de MacBook Air, presentados en la última WWDC de la compañía. Esta actualización corrige los problemas, detectados por los usuarios, como el parpadeo de pantalla al utilizar Adobe Photoshop y un error que hacía que algunos usuarios tuvieran problemas con la conexión WiFi.
Los de Cupertino presentaron el pasado mes de junio sus últimos modelos de MacBook Air en su conferencia anual para desarrolladores. La compañía aseguró que esos nuevos modelos estarían a la venta al día siguiente de la presentación y semanas después los usuarios comenzaron a detectar los primeros problemas.
Estos nuevos modelos han sido los más afectados, los cuales recogen las principales quejas de los usuarios. Apple aseguró estar trabajando para resolver el problema y desde este viernes los usuarios ya cuentan con una solución. Según recoge Apple en su página de soporte, una nueva actualización para los MacBookAir ya está disponible.
Esta actualización soluciona los errores de conexión a redes WiFi, uno de los problemas más detectados por los usuarios. Los propietarios de los nuevos MacBook Air se encontraron con múltiples pérdidas de conexión, por lo que se veían obligados a efectuar frecuentes reinicios del sistema para intentar remediar la situación.
Por otro lado, los usuarios también detectaron un problema al iniciar el programa Adobe Photoshop en estos portátiles. La pantalla comenzaba a parpadear y los usuarios no podían hacer buen uso del programa. Este error también ha sido solucionado según confirma Apple. Por último, los de Cupertino también han corregido con esta actualización los errores en el volumen del audio al reproducir vídeos.
La actualización de software 1.0 se puede descargar a través de la página de soporte de Apple o a través de la herramienta de actualización de software en la Mac App Store.
2013/07/20
Google, Microsoft, Nokia y Whatsapp, tres peros y una ganga
Semana de calor y cuentas. De pros y contras. Tres grandes, Nokia, Google y Microsoft, han presentado sus cuentas trimestrales y los tres han propagado lo mejor de ellas, mientras los analistas han destacado sus peros. Como debe ser.
Microsoft se ha dejado 1.800 millones de dólares en pérdidas en su negocio on line desde 2005, pero son una pérdidas necesarias. Si después de ese chorro de dinero solo tiene el 17% de las búsquedas en Internet (Bing), apenas nada en publicidad online y menos en los móviles, qué hubiera sido sin esa inversión. También ha puesto en pérdidas 900 millones por la tableta Surface, y en solo seis meses. De venderla a 500 dólares a unos 300. Lo mismo: seguirán echando dinero en esos negocios para que broten algún día. De momento la tableta con su marca no tiene presencia entre los consumidores, pero su sistema operativo avanza gracias a que fabricantes de tabletas como Acer o Asus lo oncorporan a sus modelos. Dinero le sobra a espuertas, solo en el último trimestre ganó 3.786 millones de euros. Ni siquiera la caída de ventas de ordenadores, fuente de ingresos para su Windows, parece afectarle: han subido en ese capítulo un 5%.
La acción de Google a 1.000 dólares tendrá que esperar, pese a ganar 2.463 millones de euros en tres meses, un 16% más que hace un año. Para los analistas de Wall Street, no es suficiente. Se paga menos por sus clic publicitarios, fuente del 96% de sus negocio, y de poco le vale justificar que aumentan sus ingresos
Si Microsoft con sus Windows móviles va de menos a más, Nokia avanza en dirección contraria, aunque va menos mal, según su consejero delegado Elop. Continúa su travesía del desierto en plena tormenta. Vende más Lumia que nunca, como triunfalmente proclamó Elop, como si detrás hubiera una historia de décadas cuando apenas han pasado dos años. Su récord supone un 3% de todas las ventas mundiales de smartphones, muy lejos del 45% que Nokia poseía en 2007, cuando colocaba anualmente 500 millones de móviles. Hoy suspera por la mitad.
El lado bueno de Nokia es que sus pérdidas han caído un 80% respecto al pasado año. El lado malo, que sigue bajando en ventas de móviles, tanto en los básicos (39%) como en los smartphones (25%). No vende teléfonos caros ni teléfonos baratos. Han pasado casi tres años desde que Elop decidió despreciar sus propios sistemas operativos, Symbian y Meego, para abrazarse a su ex Microsoft con Windows Phone. Ahora se ve que a Microsotf la operación le empieza a salir bien; a Nokia, de momento, no.
Entre tantos miles de millones de dólares, basta uno, solamente uno, para mover el mundo. Es lo que piden los chicos de Whatsapp para seguir con su genial aplicación, y aún hay quien se ha dado de baja. Luego llorarán cuando desaparezca por falta de recursos. La ganga, sin duda, es Whatsapp. Un dólar que empezará a cobrar a la gente que se descargue la aplicación en los iPhone como se hace ya en las otras plataformas. Se mantienen independientes, pero acechados por servicios de operadoras como Joyn, Line o Kakao.
La semana que viene Apple y Google nos prometen grandes titulares. El martes, la empresa dirigida por Tim Cook presentará cuentas trimestrales espectaculares que, según Morgan Stanley, incluirán ventas de iPhone por encima de lo previsto por los analistas. iSuppli dice lo contrario: aunque vende más que el año anterior, su crecimiento estará por debajo de la media del sector. El iPad Mini seguirá imparable,
Al día siguiente, el miércoles, Google anuncia una nueva generación de tabletas Nexus 7 y, probablemente, el Moto X, el nuevo smartphone de Motorola, con el que pretende levantar la compañía que compró hace un año y que, de momento, solo le aporta pérdidas millonarias (325 millones en el último trimestre). No se activa físicamente y funciona por órdenes de voz. Tras ello, Google se podrá ir de vacaciones, aunque no tranquilas. será difícil que se libre de la multa de Bruselas, que puede llegar a los 4.000 millones de dólares.
La semana de estío ha dado también para noticias propias de la estación: muertes en China por recargar el iPhone -Ay¡ qué malos son estos de Apple-, un 3% de jugadores de Betfair que copula mientras apuesta o investigadores británicos que transforman la orina en elemento de recarga de móviles (luego se electrocutan chinos, claro). La canícula pega fuerte.
Microsoft se ha dejado 1.800 millones de dólares en pérdidas en su negocio on line desde 2005, pero son una pérdidas necesarias. Si después de ese chorro de dinero solo tiene el 17% de las búsquedas en Internet (Bing), apenas nada en publicidad online y menos en los móviles, qué hubiera sido sin esa inversión. También ha puesto en pérdidas 900 millones por la tableta Surface, y en solo seis meses. De venderla a 500 dólares a unos 300. Lo mismo: seguirán echando dinero en esos negocios para que broten algún día. De momento la tableta con su marca no tiene presencia entre los consumidores, pero su sistema operativo avanza gracias a que fabricantes de tabletas como Acer o Asus lo oncorporan a sus modelos. Dinero le sobra a espuertas, solo en el último trimestre ganó 3.786 millones de euros. Ni siquiera la caída de ventas de ordenadores, fuente de ingresos para su Windows, parece afectarle: han subido en ese capítulo un 5%.
La acción de Google a 1.000 dólares tendrá que esperar, pese a ganar 2.463 millones de euros en tres meses, un 16% más que hace un año. Para los analistas de Wall Street, no es suficiente. Se paga menos por sus clic publicitarios, fuente del 96% de sus negocio, y de poco le vale justificar que aumentan sus ingresos
Si Microsoft con sus Windows móviles va de menos a más, Nokia avanza en dirección contraria, aunque va menos mal, según su consejero delegado Elop. Continúa su travesía del desierto en plena tormenta. Vende más Lumia que nunca, como triunfalmente proclamó Elop, como si detrás hubiera una historia de décadas cuando apenas han pasado dos años. Su récord supone un 3% de todas las ventas mundiales de smartphones, muy lejos del 45% que Nokia poseía en 2007, cuando colocaba anualmente 500 millones de móviles. Hoy suspera por la mitad.
El lado bueno de Nokia es que sus pérdidas han caído un 80% respecto al pasado año. El lado malo, que sigue bajando en ventas de móviles, tanto en los básicos (39%) como en los smartphones (25%). No vende teléfonos caros ni teléfonos baratos. Han pasado casi tres años desde que Elop decidió despreciar sus propios sistemas operativos, Symbian y Meego, para abrazarse a su ex Microsoft con Windows Phone. Ahora se ve que a Microsotf la operación le empieza a salir bien; a Nokia, de momento, no.
Entre tantos miles de millones de dólares, basta uno, solamente uno, para mover el mundo. Es lo que piden los chicos de Whatsapp para seguir con su genial aplicación, y aún hay quien se ha dado de baja. Luego llorarán cuando desaparezca por falta de recursos. La ganga, sin duda, es Whatsapp. Un dólar que empezará a cobrar a la gente que se descargue la aplicación en los iPhone como se hace ya en las otras plataformas. Se mantienen independientes, pero acechados por servicios de operadoras como Joyn, Line o Kakao.
La semana que viene Apple y Google nos prometen grandes titulares. El martes, la empresa dirigida por Tim Cook presentará cuentas trimestrales espectaculares que, según Morgan Stanley, incluirán ventas de iPhone por encima de lo previsto por los analistas. iSuppli dice lo contrario: aunque vende más que el año anterior, su crecimiento estará por debajo de la media del sector. El iPad Mini seguirá imparable,
Al día siguiente, el miércoles, Google anuncia una nueva generación de tabletas Nexus 7 y, probablemente, el Moto X, el nuevo smartphone de Motorola, con el que pretende levantar la compañía que compró hace un año y que, de momento, solo le aporta pérdidas millonarias (325 millones en el último trimestre). No se activa físicamente y funciona por órdenes de voz. Tras ello, Google se podrá ir de vacaciones, aunque no tranquilas. será difícil que se libre de la multa de Bruselas, que puede llegar a los 4.000 millones de dólares.
La semana de estío ha dado también para noticias propias de la estación: muertes en China por recargar el iPhone -Ay¡ qué malos son estos de Apple-, un 3% de jugadores de Betfair que copula mientras apuesta o investigadores británicos que transforman la orina en elemento de recarga de móviles (luego se electrocutan chinos, claro). La canícula pega fuerte.
La sociedad civil estadounidense acorrala a la NSA por el caso del espionaje
De momento han sido cerca de una veintena de organizaciones civiles y de defensa de los derechos humanos –desde Human Rights Watch a Greenpeace, pasando por partidarios de la legalización de la marihuana–, pero los grupos que están demandando a la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, siglas en inglés) por los programas de espionaje y recolección de datos revelados por el exagente de inteligencia Edward Snowden irán en aumento, según una fuente cercana al Departamento de Justicia, que prefiere guardar el anonimato y que conoce de primera mano la conocida como Ley Patriota.
Esa avalancha de demandas que denuncian que el espionaje llevado a cabo sobre los norteamericanos es inconstitucional está poniendo, además, en peligro una de las relaciones más importantes y básicas de la NSA: la que esta agencia mantiene con las empresas de telecomunicaciones y las compañías de internet y que son básicas para su supervivencia. “Si esas empresas decidieran no participar, por temor a las demandas o temor a perder a sus clientes más jóvenes”, dice la misma fuente, “la capacidad de maniobra de la NSA se vería seriamente afectada y la Administración tendría que replantearse su programa”, explica.
El pasado martes, 19 grupos –de defensa del medioambiente; organizaciones musulmanas; la Iglesia Unitaria de Los Ángeles; defensores de la posesión de las armas- presentaron en un tribunal federal de California una “prohibición preliminar y permanente” contra los programas de vigilancia de la NSA por violar la Constitución de EEUU, ya que vulnera, según ellos, su privacidad y su libertad de expresión. Según la fuente cercana a Justicia, esa demanda sigue a una planteada el pasado mes en una corte de Nueva York por la ACLU (Unión Americana de Libertades Civiles, siglas en inglés) y prueba la secuencia que está por llegar de organizaciones querellándose contra la NSA y su facultad de recopilar y almacenar registros de llamadas autorizada por un tribunal secreto también conocido como FISA, cuyos poderes se han ido ampliando progresivamente ante la pasividad del público y la complacencia del Congreso desde la aprobación de la llamada Ley Patriota de 2001 tras los ataques terroristas del 11 de septiembre.
“El programa [de la NSA] recopila información de todas las llamadas dentro de Estados Unidos, incluidas llamadas locales o llamadas entre EEUU y el extranjero, independientemente de las conexiones con el terrorismo internacional o la existencia de una razonable sospecha”, se lee en la demanda. La querella se centra en su crítica a la sección 215 de la Ley patriota que permite a FISA autorizar medidas de vigilancia de comunicaciones telefónicas siempre que se estime que la información puede ser de interés para una investigación en curso.
Según el grupo Public Knowledge –defensor de la libertad en la red y parte en la querella de California-, los programa de la NSA no solo invaden la privacidad sino también violan el derecho de la gente a la libre asociación garantizado en la Primera Enmienda.
“Cuando el Gobierno recaba información sobre quién llama a quién, cada cuánto tiempo y cómo, sin duda se hace con una fotografía muy exacta de los contactos y asociaciones de esa gente. Todos sabemos que en el pasado las autoridades han intentado confeccionar listas de miembros de grupos para disuadir a cierta gente de formar ciertos grupos”, explican desde Public Knowledge.
En lo que se ha considerado una victoria en una larga batalla todavía en marcha, a principios de semana FISA le daba la razón a Yahoo y ordenaba a la Administración de Barack Obama decir qué documentos podrían ser desclasificados en lo que concierne al grupo de internet. Tras las revelaciones de Snowden, Yahoo, al igual que otros grupos de Internet, solicitó el 14 de junio que se hicieran públicas las decisiones de ese tribunal. Pero Justicia no tomó "ninguna posición" sobre esta solicitud, de acuerdo con un documento publicado el lunes por FISA. Reggie Walton ha dicho ahora al Departamento de Justicia que debe tratar con “prioridad” el caso.
En 2008, FISA había ordenado a varios grupos de Internet -incluyendo Yahoo- permitir el acceso del Gobierno a sus datos a través de un programa de control conocido como PRISM y revelado por Snowden. Otros grupos de Internet, como Google y Microsoft, también exigen la desclasificación de las decisiones del FISA. Se espera que la Administración revele el 26 de agosto qué partes puede hacer públicas, lo que permitirá una mirada fugaz a cómo el Gobierno ha justificado de forma legal bajo la FISA la recolección de información.
Ayer, altos cargos de la Administración de Obama defendían en el Congreso los controvertidos programas de vigilancia frente a legisladores de ambos partidos, que mostraron su preocupación sobre el hecho de que esa recolección de información esté siendo demasiado amplia e intrusiva. “No me siento bien sabiendo que conocemos datos de millones de norteamericanos”, dijo el representante demócrata John Conyers, que declaró que la sección 215 de la Ley Patriota puede suponer “una violación de la Cuarta Enmienda de la Constitución”.
Por su parte, James Sensenbrenner, congresista republicano y uno de los patrocinadores de la Ley Patriota, advirtió de que en estos momentos no se cuentan con suficientes votos en la Cámara de Representantes para renovar esa ley cuando llegue su momento, a finales de 2015, y que el Congreso acabará con la norma si continua el espionaje. “Creo que este programa ha descarrilado y necesita volver a las vías de la legalidad”, puntualizó Zoe Lofgren, representante demócrata.
Esa avalancha de demandas que denuncian que el espionaje llevado a cabo sobre los norteamericanos es inconstitucional está poniendo, además, en peligro una de las relaciones más importantes y básicas de la NSA: la que esta agencia mantiene con las empresas de telecomunicaciones y las compañías de internet y que son básicas para su supervivencia. “Si esas empresas decidieran no participar, por temor a las demandas o temor a perder a sus clientes más jóvenes”, dice la misma fuente, “la capacidad de maniobra de la NSA se vería seriamente afectada y la Administración tendría que replantearse su programa”, explica.
El pasado martes, 19 grupos –de defensa del medioambiente; organizaciones musulmanas; la Iglesia Unitaria de Los Ángeles; defensores de la posesión de las armas- presentaron en un tribunal federal de California una “prohibición preliminar y permanente” contra los programas de vigilancia de la NSA por violar la Constitución de EEUU, ya que vulnera, según ellos, su privacidad y su libertad de expresión. Según la fuente cercana a Justicia, esa demanda sigue a una planteada el pasado mes en una corte de Nueva York por la ACLU (Unión Americana de Libertades Civiles, siglas en inglés) y prueba la secuencia que está por llegar de organizaciones querellándose contra la NSA y su facultad de recopilar y almacenar registros de llamadas autorizada por un tribunal secreto también conocido como FISA, cuyos poderes se han ido ampliando progresivamente ante la pasividad del público y la complacencia del Congreso desde la aprobación de la llamada Ley Patriota de 2001 tras los ataques terroristas del 11 de septiembre.
“El programa [de la NSA] recopila información de todas las llamadas dentro de Estados Unidos, incluidas llamadas locales o llamadas entre EEUU y el extranjero, independientemente de las conexiones con el terrorismo internacional o la existencia de una razonable sospecha”, se lee en la demanda. La querella se centra en su crítica a la sección 215 de la Ley patriota que permite a FISA autorizar medidas de vigilancia de comunicaciones telefónicas siempre que se estime que la información puede ser de interés para una investigación en curso.
Según el grupo Public Knowledge –defensor de la libertad en la red y parte en la querella de California-, los programa de la NSA no solo invaden la privacidad sino también violan el derecho de la gente a la libre asociación garantizado en la Primera Enmienda.
“Cuando el Gobierno recaba información sobre quién llama a quién, cada cuánto tiempo y cómo, sin duda se hace con una fotografía muy exacta de los contactos y asociaciones de esa gente. Todos sabemos que en el pasado las autoridades han intentado confeccionar listas de miembros de grupos para disuadir a cierta gente de formar ciertos grupos”, explican desde Public Knowledge.
En lo que se ha considerado una victoria en una larga batalla todavía en marcha, a principios de semana FISA le daba la razón a Yahoo y ordenaba a la Administración de Barack Obama decir qué documentos podrían ser desclasificados en lo que concierne al grupo de internet. Tras las revelaciones de Snowden, Yahoo, al igual que otros grupos de Internet, solicitó el 14 de junio que se hicieran públicas las decisiones de ese tribunal. Pero Justicia no tomó "ninguna posición" sobre esta solicitud, de acuerdo con un documento publicado el lunes por FISA. Reggie Walton ha dicho ahora al Departamento de Justicia que debe tratar con “prioridad” el caso.
En 2008, FISA había ordenado a varios grupos de Internet -incluyendo Yahoo- permitir el acceso del Gobierno a sus datos a través de un programa de control conocido como PRISM y revelado por Snowden. Otros grupos de Internet, como Google y Microsoft, también exigen la desclasificación de las decisiones del FISA. Se espera que la Administración revele el 26 de agosto qué partes puede hacer públicas, lo que permitirá una mirada fugaz a cómo el Gobierno ha justificado de forma legal bajo la FISA la recolección de información.
Ayer, altos cargos de la Administración de Obama defendían en el Congreso los controvertidos programas de vigilancia frente a legisladores de ambos partidos, que mostraron su preocupación sobre el hecho de que esa recolección de información esté siendo demasiado amplia e intrusiva. “No me siento bien sabiendo que conocemos datos de millones de norteamericanos”, dijo el representante demócrata John Conyers, que declaró que la sección 215 de la Ley Patriota puede suponer “una violación de la Cuarta Enmienda de la Constitución”.
Por su parte, James Sensenbrenner, congresista republicano y uno de los patrocinadores de la Ley Patriota, advirtió de que en estos momentos no se cuentan con suficientes votos en la Cámara de Representantes para renovar esa ley cuando llegue su momento, a finales de 2015, y que el Congreso acabará con la norma si continua el espionaje. “Creo que este programa ha descarrilado y necesita volver a las vías de la legalidad”, puntualizó Zoe Lofgren, representante demócrata.
¿Qué saben los gobiernos a partir de nuestros metadatos?
Metadatos, ese concepto. Hasta hace nada era apenas un término casi exclusivamente empleado por programadores informáticos. Sin embargo, con la filtración de las labores de espionaje llevadas a cabo por distintos gobiernos (EEUU, Francia, Alemania o Reino Unido -que se sepa, de momento-) se ha ganado un lugar en los titulares y se ha trasformado en sinónimo de invasión a nuestra privacidad sea bajo llamadas telefónicas o correos electrónicos.
En los pasillos del MIT (Instituto de Tecnología de Massachusetts) hace años que investigan el potencial de los metadatos. Recientemente, un proyecto del Media Lab permite elaborar un infográfico dinámico de nuestro perfil a partir del rastreo de los metadatos de nuestra cuenta de correo electrónico. Sin más, un proceso muy parecido al que estuvo empleando la NSA (Agencia de Seguridad Nacional) americana en sus labores de espionaje y rastreo de metadatos, según denunció el exempleado y miembro de la CIA (Centro de Inteligencia Americano) Edward Snowden.
La aplicación, de nombre Immersion y que por ahora sólo es operativa con una cuenta de Gmail, rastrea exclusivamente los metadatos del remitente, destinatarios y tiempo para elaborar un mapa interactivo de nuestro perfil y nuestros contactos. Cada uno de ellos se representa con un círculo que poseerá menor o mayor tamaño en función de nuestras interacciones con el mismo.
Los creadores de la aplicación animan a los interesados a volcar sus metadatos para crear su radiografía de contactos. Si no, también ponen a disposición una versión 'demo' con varios ejemplos ficticios para observar el funcionamiento de la herramienta.
Además de una visualización por tamaño, los contactos quedan agrupados en función de sus interacciones, se resalta la fortaleza de los vínculos al pasar por encima de cada contacto, se añade un filtro temporal y cada contacto enlaza a una radiografía individual.
Esta idea responde al ingenio y creatividad de tres estudiantes del departamento del Media Lab del MIT y fue lanzado al público el pasado 30 de Junio. Uno de los líderes intelectuales de la herramienta es el profesor chileno que ejerce en el mismo centro, César Hidalgo.
En declaraciones al Boston Globe, Hidalgo declara su estupefacción ante la polémica de los metadatos puesto que este es un campo que "los académicos estudian desde 2004 y 2005". "Hasta ahora nadie se preocupaba por nosotros y todo el mundo pensaba que trabajar con registros de teléfonos móviles o correos electrónicos era por curiosidad o una estupidez", sentencia.
Hidalgo añade que el estudio de los metadatos en nuestra vida digital ofrece una visión más profunda del uso que hacemos de las redes convencionales. Con sus palabras, "Facebook o Twitter es como mirar por la ventanilla del coche, mientras que el estudio de los metadatos es como mirar el GPS".
En los pasillos del MIT (Instituto de Tecnología de Massachusetts) hace años que investigan el potencial de los metadatos. Recientemente, un proyecto del Media Lab permite elaborar un infográfico dinámico de nuestro perfil a partir del rastreo de los metadatos de nuestra cuenta de correo electrónico. Sin más, un proceso muy parecido al que estuvo empleando la NSA (Agencia de Seguridad Nacional) americana en sus labores de espionaje y rastreo de metadatos, según denunció el exempleado y miembro de la CIA (Centro de Inteligencia Americano) Edward Snowden.
La aplicación, de nombre Immersion y que por ahora sólo es operativa con una cuenta de Gmail, rastrea exclusivamente los metadatos del remitente, destinatarios y tiempo para elaborar un mapa interactivo de nuestro perfil y nuestros contactos. Cada uno de ellos se representa con un círculo que poseerá menor o mayor tamaño en función de nuestras interacciones con el mismo.
Los creadores de la aplicación animan a los interesados a volcar sus metadatos para crear su radiografía de contactos. Si no, también ponen a disposición una versión 'demo' con varios ejemplos ficticios para observar el funcionamiento de la herramienta.
Además de una visualización por tamaño, los contactos quedan agrupados en función de sus interacciones, se resalta la fortaleza de los vínculos al pasar por encima de cada contacto, se añade un filtro temporal y cada contacto enlaza a una radiografía individual.
Esta idea responde al ingenio y creatividad de tres estudiantes del departamento del Media Lab del MIT y fue lanzado al público el pasado 30 de Junio. Uno de los líderes intelectuales de la herramienta es el profesor chileno que ejerce en el mismo centro, César Hidalgo.
En declaraciones al Boston Globe, Hidalgo declara su estupefacción ante la polémica de los metadatos puesto que este es un campo que "los académicos estudian desde 2004 y 2005". "Hasta ahora nadie se preocupaba por nosotros y todo el mundo pensaba que trabajar con registros de teléfonos móviles o correos electrónicos era por curiosidad o una estupidez", sentencia.
Hidalgo añade que el estudio de los metadatos en nuestra vida digital ofrece una visión más profunda del uso que hacemos de las redes convencionales. Con sus palabras, "Facebook o Twitter es como mirar por la ventanilla del coche, mientras que el estudio de los metadatos es como mirar el GPS".
Los nuevos ‘smartwatches’: relojes a lo Dick Tracy
No tienen la estética de un Patek Philippe’s, ni la potente maquina microscópica de un Cauny Prima, pero con su tecnología logran aproximarse a lo del moderno inspector de policía estadounidense Dick Tracy que a mediados del siglo XIX hacía lo que nadie podía, comunicarse a través de su reloj.
Son los smartwatches que además de dar la hora hacen posible enviar y recibir mensajes de texto, así como notificaciones de aplicaciones, escuchar radio y realizar búsquedas por GPS. Los relojes que permiten hacer llamadas son casi una realidad en el mundo tecnológico.
Entre los relojes inteligentes que ya se exhiben en los escaparates y portales de comercio electrónico están el Pebble, Sony SmartWatch I y II, Motorola MOTOACTV, I’m watch. Mientras continúan en desarrollo el Agent watch, el Geak watch y el tan esperado Iwatch de Apple.
Pebble
Mientras Iphone, Ipad y Ipod hacen esperar a sus fanáticos por el nuevo integrante de su familia, el Iwatch; la firma Pebble sigue liderando el mercado de los smartwatches con minimalistas relojes inteligentes fabricados en colores rojo, negro y blanco.
El reloj que cuesta unos 114 euros (150 dólares) tiene una pantalla de tinta electrónica ahorradora de energía, que garantiza siete días de funcionamiento sin interrupción. El Pebble permite ver notificaciones de las diversas aplicaciones instaladas en el móvil, correos electrónicos, SMS, y de llamadas.
“Con Pebble podrás ver quién te llama, ver tus correos, las alertas del calendario, mensajes de Facebook y Twitter, y podrás usarlo para estar al tanto de tus alertas sin que nadie se entere, ya que Pebble vibra. Y, si tienes Android, recibirás tus SMS en el reloj. Pebble hace uso también de un acelerómetro de tres ejes, que te permitirá hacer cosas como rechazar llamadas, silenciarlas, o cancelar notificaciones con sólo mover la muñeca”, se lee en la descripción del producto.
Los deportistas pueden activar los velocímetros o podómetros para conocer en directo datos relacionados con la distancia recorrida, el tiempo empleado y las calorías quemadas durante la actividad. Además permite controlar el reproductor de música y todas las listas almacenadas en el móvil.
Hasta la semana pasada se han vendido más de 275.000 unidades en el mundo y un millón de personas ya descargaron la aplicación para controlar el aparato que funciona al sincronizarlo con teléfonos móviles con los sistemas operativos IOS o Android.
Sony Smart watch II
Ha llegado al mercado para sustituir al SmartWatch I, sigue siendo compatible con Android pero con un diseño negro más elegante que incorpora NFC para emparejar el reloj con el smartphone. Su pantalla de 1.6 pulgadas posee una resolución de 220x176 píxeles.
Al igual que el Pebble, este dispositivo proporciona notificaciones de redes sociales como Facebook o Twitter, mensajes de correo electrónico y permite controlar la música del móvil, con la diferencia de que su batería posee menos duración, alcanza hasta tres días de uso.
Sonymobile.com recomienda así su producto: “Si tienes un smartphone Android, este es tu reloj ideal. El SmartWatch 2 amplía tu experiencia Android y te ofrece nuevas y emocionantes formas de vivir y comunicarte. Interactúa con tu smartphone a través de Bluetooth® y te muestra en su pantalla todo lo que ocurre en tu vida. Elige entre cientos de aplicaciones para el SmartWatch 2 en Google Play y sé uno de los primeros en adaptarte al estilo de vida SmartWatch”.
El Sony Smart watch II es compatible con cualquier dispositivo Android y ya es posible adquirirlo en Estados Unidos, pero en Europa comenzará a comercializarse a mediados de septiembre con un costo aproximado de 140 euros.
Motorola MOTOACTV
Cuesta unos 300 euros, y está pensado para deportistas, aventureros y amantes de la música. Es un reloj GPS resistente a los golpes y al agua que funciona con sistema operativo Androir. Durante las actividades deportivas el MOTOACTV registra datos como el ritmo cardíaco, distancia, tiempo y calorías quemadas.
Es también un reproductor de música con una capacidad de 8GB para almacenar archivos de audio, es pequeño, ligero y con pantalla táctil fabricada bajo la tecnología Gorila Glass que mejora la visión en exteriores. Al sincronizarlo con el móvil sirve para recibir llamadas y mensajes de texto, activar la radio FM y el bluetooth.
Motorola ha diseñado una línea de accesorios compatibles para este smartwatch que van desde los auriculares bluetooth stereo para deportes, el sensor de cadencia y pulsometro, hasta el pack montaje bicicleta para MOTOACTV.
I’m watch
Por un precio superior a 350 euros se puede adquirir el I’m watch considerado como uno de los relojes inteligentes que permite aprovechar mejor las funciones del smartphone al emparejarlo con el reloj de pulsera.
Ha sido fabricado en Italia y está disponible en colores azul, verde, rojo, negro, amarillo, rosa y blanco. Funciona con Android, IOS, BB10 y con todas las aplicaciones disponibles para estos sistemas operativos.
Su pantalla TFT de 1.54 pulgadas con alto brillo y el uso intensivo pueden incidir en el rendimiento de su batería, sin embargo cuenta con una función ahorradora programable para cuando se encuentre en stand by.
Los SMS, correos, notificaciones de redes sociales, llamadas entrantes, funciones de GPS y para deportistas están incluidas en este reloj. “i'm Watch incluye muchas aplicaciones diferentes ya integradas para permitirte hacer enseguida una infinidad de cosas. Meteo, Bolsa, Noticias, Calculadora, Husos horarios y muchas otras cosas te esperan. Es un universo de aplicaciones preparado para que lo descubras enseguida, en cuanto enciendas tu i'm Watch por primera vez”, describe imsmart.com.
Las funcionalidades de estos relojes han cautivado a miles de usuarios en el mundo poniendo contra la pared a Apple que desde hace tiempo desarrolla El IWatch, y debido a la potencia de su marca, los especialistas tecnológicos estiman que debería ser el que reúna las funciones más innovadoras entre los smartwatches, incluyendo un visor de fotografías.
Los últimos rumores que navegan por la red sobre la fabricación del reloj inteligente de Apple es que la compañía ha contratado a nuevos desarrolladores para adelantar su lanzamiento al mercado. Lo cierto es que como todos los productos de la marca, el Iwatch funcionaría exclusivamente con IOS limitando su competencia frente a los demás desarrolladores de smartwatches que fabrican dispositivos compatibles con diversos sistemas operativos.
Otros modelos que se desarrollan actualmente son el Samsung Galaxy Altius, El smartwatch de Microsoft que incluiría una versión modificada de Windows 8, el Agent watch, que podría salir a la venta este año y el Geak watch, con funciones similares a los ya existentes, pero con nuevas características como la batería de larga duración para el Agent, y la posibilidad de monitorear cosas como la presión sanguínea, el pulso, el sueño, y la temperatura corporal, en el caso del Geak watch.
Son los smartwatches que además de dar la hora hacen posible enviar y recibir mensajes de texto, así como notificaciones de aplicaciones, escuchar radio y realizar búsquedas por GPS. Los relojes que permiten hacer llamadas son casi una realidad en el mundo tecnológico.
Entre los relojes inteligentes que ya se exhiben en los escaparates y portales de comercio electrónico están el Pebble, Sony SmartWatch I y II, Motorola MOTOACTV, I’m watch. Mientras continúan en desarrollo el Agent watch, el Geak watch y el tan esperado Iwatch de Apple.
Pebble
Mientras Iphone, Ipad y Ipod hacen esperar a sus fanáticos por el nuevo integrante de su familia, el Iwatch; la firma Pebble sigue liderando el mercado de los smartwatches con minimalistas relojes inteligentes fabricados en colores rojo, negro y blanco.
El reloj que cuesta unos 114 euros (150 dólares) tiene una pantalla de tinta electrónica ahorradora de energía, que garantiza siete días de funcionamiento sin interrupción. El Pebble permite ver notificaciones de las diversas aplicaciones instaladas en el móvil, correos electrónicos, SMS, y de llamadas.
“Con Pebble podrás ver quién te llama, ver tus correos, las alertas del calendario, mensajes de Facebook y Twitter, y podrás usarlo para estar al tanto de tus alertas sin que nadie se entere, ya que Pebble vibra. Y, si tienes Android, recibirás tus SMS en el reloj. Pebble hace uso también de un acelerómetro de tres ejes, que te permitirá hacer cosas como rechazar llamadas, silenciarlas, o cancelar notificaciones con sólo mover la muñeca”, se lee en la descripción del producto.
Los deportistas pueden activar los velocímetros o podómetros para conocer en directo datos relacionados con la distancia recorrida, el tiempo empleado y las calorías quemadas durante la actividad. Además permite controlar el reproductor de música y todas las listas almacenadas en el móvil.
Hasta la semana pasada se han vendido más de 275.000 unidades en el mundo y un millón de personas ya descargaron la aplicación para controlar el aparato que funciona al sincronizarlo con teléfonos móviles con los sistemas operativos IOS o Android.
Sony Smart watch II
Ha llegado al mercado para sustituir al SmartWatch I, sigue siendo compatible con Android pero con un diseño negro más elegante que incorpora NFC para emparejar el reloj con el smartphone. Su pantalla de 1.6 pulgadas posee una resolución de 220x176 píxeles.
Al igual que el Pebble, este dispositivo proporciona notificaciones de redes sociales como Facebook o Twitter, mensajes de correo electrónico y permite controlar la música del móvil, con la diferencia de que su batería posee menos duración, alcanza hasta tres días de uso.
Sonymobile.com recomienda así su producto: “Si tienes un smartphone Android, este es tu reloj ideal. El SmartWatch 2 amplía tu experiencia Android y te ofrece nuevas y emocionantes formas de vivir y comunicarte. Interactúa con tu smartphone a través de Bluetooth® y te muestra en su pantalla todo lo que ocurre en tu vida. Elige entre cientos de aplicaciones para el SmartWatch 2 en Google Play y sé uno de los primeros en adaptarte al estilo de vida SmartWatch”.
El Sony Smart watch II es compatible con cualquier dispositivo Android y ya es posible adquirirlo en Estados Unidos, pero en Europa comenzará a comercializarse a mediados de septiembre con un costo aproximado de 140 euros.
Motorola MOTOACTV
Cuesta unos 300 euros, y está pensado para deportistas, aventureros y amantes de la música. Es un reloj GPS resistente a los golpes y al agua que funciona con sistema operativo Androir. Durante las actividades deportivas el MOTOACTV registra datos como el ritmo cardíaco, distancia, tiempo y calorías quemadas.
Es también un reproductor de música con una capacidad de 8GB para almacenar archivos de audio, es pequeño, ligero y con pantalla táctil fabricada bajo la tecnología Gorila Glass que mejora la visión en exteriores. Al sincronizarlo con el móvil sirve para recibir llamadas y mensajes de texto, activar la radio FM y el bluetooth.
Motorola ha diseñado una línea de accesorios compatibles para este smartwatch que van desde los auriculares bluetooth stereo para deportes, el sensor de cadencia y pulsometro, hasta el pack montaje bicicleta para MOTOACTV.
I’m watch
Por un precio superior a 350 euros se puede adquirir el I’m watch considerado como uno de los relojes inteligentes que permite aprovechar mejor las funciones del smartphone al emparejarlo con el reloj de pulsera.
Ha sido fabricado en Italia y está disponible en colores azul, verde, rojo, negro, amarillo, rosa y blanco. Funciona con Android, IOS, BB10 y con todas las aplicaciones disponibles para estos sistemas operativos.
Su pantalla TFT de 1.54 pulgadas con alto brillo y el uso intensivo pueden incidir en el rendimiento de su batería, sin embargo cuenta con una función ahorradora programable para cuando se encuentre en stand by.
Los SMS, correos, notificaciones de redes sociales, llamadas entrantes, funciones de GPS y para deportistas están incluidas en este reloj. “i'm Watch incluye muchas aplicaciones diferentes ya integradas para permitirte hacer enseguida una infinidad de cosas. Meteo, Bolsa, Noticias, Calculadora, Husos horarios y muchas otras cosas te esperan. Es un universo de aplicaciones preparado para que lo descubras enseguida, en cuanto enciendas tu i'm Watch por primera vez”, describe imsmart.com.
Las funcionalidades de estos relojes han cautivado a miles de usuarios en el mundo poniendo contra la pared a Apple que desde hace tiempo desarrolla El IWatch, y debido a la potencia de su marca, los especialistas tecnológicos estiman que debería ser el que reúna las funciones más innovadoras entre los smartwatches, incluyendo un visor de fotografías.
Los últimos rumores que navegan por la red sobre la fabricación del reloj inteligente de Apple es que la compañía ha contratado a nuevos desarrolladores para adelantar su lanzamiento al mercado. Lo cierto es que como todos los productos de la marca, el Iwatch funcionaría exclusivamente con IOS limitando su competencia frente a los demás desarrolladores de smartwatches que fabrican dispositivos compatibles con diversos sistemas operativos.
Otros modelos que se desarrollan actualmente son el Samsung Galaxy Altius, El smartwatch de Microsoft que incluiría una versión modificada de Windows 8, el Agent watch, que podría salir a la venta este año y el Geak watch, con funciones similares a los ya existentes, pero con nuevas características como la batería de larga duración para el Agent, y la posibilidad de monitorear cosas como la presión sanguínea, el pulso, el sueño, y la temperatura corporal, en el caso del Geak watch.
BBVA lanzará tras el verano una tarjeta virtual para frenar a PayPal y Google
El banco español BBVA ha decidido pasar al ataque y empezar a cerrar espacios a sus nuevos rivales digitales, PayPal y Google entre otros. La entidad sabe que internet y las nuevas tecnologías están cambiando las reglas de juego en el sector financiero y prepara para después del verano el lanzamiento de Wizzo, una tarjeta virtual dirigida a un público muy joven, a los llamados nativos digitales. El monedero digital, que se conectará con las redes sociales, permitirá al usuario hacer compras online, envíos de dinero entre personas, sacar efectivo de cajeros y planes de ahorro. “Es una forma de conectar el dinero con las cosas que hacemos en los entornos digitales”, dice Hugo Nájera, jefe de Innovación de BBVA.
El nuevo sistema de pagos requerirá que los usuarios se registren online (la herramienta es muy sencilla de usar) con muy pocos datos (nombre completo, teléfono móvil, e-mail y NIF). Después, deberán recargar el monedero virtual desde cualquier tarjeta, sin cobro de comisión. Al menos, por ahora. Inicialmente, el límite anual será de 2.500 euros por monedero; aunque si el usuario tiene un móvil con doble SIM podría tener más de un tarjeta, cada una con esa suma límite.
“Estamos trabajando en un sistema de verificación más sofisticado para tener la certeza que cada persona es quien dice ser y poder ampliar ese cantidad”, aclara Nájera, que apunta que cuando se estrene la solución tampoco se podrá retirar más de 1.000 euros de la tarjeta virtual desde los cajeros automáticos.
María Luisa Antón, responsable de Wizzo, detalla algunas acciones que se podrán hacer con la herramienta, que permitirá crear una especie de red social con amigos y familiares. Una, pedir dinero: “Imaginemos una cena de amigos donde uno paga todo y el resto le abona después su parte. Podrían hacerlo a través de Wizzo, sin necesidad de conocer las cuentas corrientes de sus amigos. Además, el sistema te recuerda quien te ha pagado y quién no”.
El nuevo sistema de pagos permite también hacer botes entre los miembros de Wizzo y recaudar dinero para un fin común, un regalo o fiesta, por ejemplo. “La herramienta deja poner mensaje del tipo págame pronto”, continúa Antón. Esta añade que el usuario de Wizzo puede igualmente enviar dinero a otros miembros del servicio o a cuentas bancarias si la persona a quien se lo manda no está registrada, permite recuperar dinero de la tarjeta virtual desde cualquier cajero BBVA, de forma que uno puede salir de casa sin la cartera, y hacer un plan de ahorro, “donde los padres podrían ingresar a su hijo la paga semanal por ejemplo”.
Nájera defiende que Wizzo es un producto vivo, “al que iremos añadiendo funcionalidades como los micropagos”. El servicio se estrenará primero en España (inicialmente solo funcionará con los números móviles españoles), pero la idea es llevarlo a todos los países donde opera BBVA
El nuevo sistema de pagos requerirá que los usuarios se registren online (la herramienta es muy sencilla de usar) con muy pocos datos (nombre completo, teléfono móvil, e-mail y NIF). Después, deberán recargar el monedero virtual desde cualquier tarjeta, sin cobro de comisión. Al menos, por ahora. Inicialmente, el límite anual será de 2.500 euros por monedero; aunque si el usuario tiene un móvil con doble SIM podría tener más de un tarjeta, cada una con esa suma límite.
“Estamos trabajando en un sistema de verificación más sofisticado para tener la certeza que cada persona es quien dice ser y poder ampliar ese cantidad”, aclara Nájera, que apunta que cuando se estrene la solución tampoco se podrá retirar más de 1.000 euros de la tarjeta virtual desde los cajeros automáticos.
María Luisa Antón, responsable de Wizzo, detalla algunas acciones que se podrán hacer con la herramienta, que permitirá crear una especie de red social con amigos y familiares. Una, pedir dinero: “Imaginemos una cena de amigos donde uno paga todo y el resto le abona después su parte. Podrían hacerlo a través de Wizzo, sin necesidad de conocer las cuentas corrientes de sus amigos. Además, el sistema te recuerda quien te ha pagado y quién no”.
El nuevo sistema de pagos permite también hacer botes entre los miembros de Wizzo y recaudar dinero para un fin común, un regalo o fiesta, por ejemplo. “La herramienta deja poner mensaje del tipo págame pronto”, continúa Antón. Esta añade que el usuario de Wizzo puede igualmente enviar dinero a otros miembros del servicio o a cuentas bancarias si la persona a quien se lo manda no está registrada, permite recuperar dinero de la tarjeta virtual desde cualquier cajero BBVA, de forma que uno puede salir de casa sin la cartera, y hacer un plan de ahorro, “donde los padres podrían ingresar a su hijo la paga semanal por ejemplo”.
Nájera defiende que Wizzo es un producto vivo, “al que iremos añadiendo funcionalidades como los micropagos”. El servicio se estrenará primero en España (inicialmente solo funcionará con los números móviles españoles), pero la idea es llevarlo a todos los países donde opera BBVA
Una 'app' permite participar en el estudio de la dispersión del mosquito tigre
La aplicación Tigatrapp, para móvil y tableta Android, permite que los ciudadanos recojan datos, como si fueran científicos, cada vez que ven un mosquito tigre. Como la aplicación registra la posición, el sistema permite hacer un mapa de presencia del mosquito tigre y participar así en el estudio de su dispersión.
La aplicación forma parte del proyecto piloto Atrapa el Tigre!, impulsado por el grupo de investigación Movement Ecology Lab del Centro Estudios Avanzados de Blanes (CEAB) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Cuenta con la financiación del Programa de Cultura Científica y de la Innovación de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), y la colaboración del Servicio de Control de Mosquitos de la Bahía de Roses y del Baix Ter.
Tanto el proyecto como la aplicación, que de momento sólo está en catalán, fueron creados inicialmente para que estudiantes de primaria de más de 200 escuelas de la provincia de Girona - que asistieron al taller educativo del mosquito tigre del Servicio del Control de Mosquitos- pudieran participar, con sus familias, en el seguimiento de este mosquito a través de la telefonía móvil inteligente.
Ahora, sin embargo, la participación está abierta a otros ciudadanos de esta comunidad autónoma. Para hacerlo, hay que enviar un correo electrónico, desde el que se facilitará una contraseña y las instrucciones de descarga de la aplicación.
¿Por qué el mosquito tigre?
El mosquito tigre (Aedes albopictus) es una especie invasora que proviene del sudeste asiático. Este mosquito habita y cría en zonas urbanas, es un potencial transmisor de enfermedades víricas tropicales (como el Dengue) y es muy molesto para sus agresivas picaduras.
Fue visto por primera vez en Catalunya (en Sant Cugat del Vallés) en 2004. Desde entonces se ha extendido a muchos municipios y recientemente ha llegado a Valencia, las Islas Baleares y Murcia. Pero como vive principalmente en lugares privados (casas, jardines, balcones, etc.) resulta muy complicado hacer un seguimiento y control de su dispersión por parte de la administración pública. Tigatrapp permite que esta tarea, tradicionalmente delegada a los servicios técnicos de la administración y los científicos, pueda ser compartida por la ciudadanía.
¿Qué datos recoge la aplicación?
La aplicación Tigatrapp recoge datos a través de dos juegos: Tigre hallazgos y Tigre viajes.
Los Tigre hallazgos son identificaciones del mosquito tigre que recogen y comparten los participantes, y contienen información sobre las características del mosquito y el lugar donde lo han visto. Permiten estudiar su presencia en el territorio y construir, de manera participativa, el mapa del mosquito tigre. Mediante una serie de imágenes y de preguntas clave, la aplicación ayuda a confirmar que el insecto que ha visto el participante es efectivamente un mosquito tigre.
Los Tigre viajes son trayectos que se realizan en coche de manera habitual (viajes cotidianos como ir a casa de unos amigos, al cine, de compras, una excursión...). El mosquito tigre es pequeño y vuela poco pero, a pesar de ello, se dispersa de forma muy rápida. Se cree que una de las vías que tiene para conseguirlo es escondiéndose en los coches (atraído por dióxido de carbono, las altas temperaturas y los rincones oscuros del interior de un coche).
Los investigadores del CSIC, Frederic Bartumeus y Aitana Oltra, explican: "Cuando un participante hace un viaje, pulsa el botón del Tigre viaje para que la aplicación registre el trayecto -en la aplicación aparece un mapa que le va siguiendo. Cuando llega a destino, el usuario debe pulsar el STOP. De esta forma el desplazamiento queda registrado. En este caso no es necesario haber detectado un mosquito tigre porque el objetivo es tener datos de movilidad humana en coche durante el verano, para poder compararlos después con la dispersión del mosquito. Así podremos saber si el mosquito tigre invade nuevas zonas gracias a la ayuda del transporte en coche".
Los datos que se recogen son enviados a un servidor del CSIC y encriptados para proteger la privacidad de los participantes. Finalmente, de manera automática, los datos son compartidos en la web del proyecto.
La aplicación forma parte del proyecto piloto Atrapa el Tigre!, impulsado por el grupo de investigación Movement Ecology Lab del Centro Estudios Avanzados de Blanes (CEAB) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Cuenta con la financiación del Programa de Cultura Científica y de la Innovación de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), y la colaboración del Servicio de Control de Mosquitos de la Bahía de Roses y del Baix Ter.
Tanto el proyecto como la aplicación, que de momento sólo está en catalán, fueron creados inicialmente para que estudiantes de primaria de más de 200 escuelas de la provincia de Girona - que asistieron al taller educativo del mosquito tigre del Servicio del Control de Mosquitos- pudieran participar, con sus familias, en el seguimiento de este mosquito a través de la telefonía móvil inteligente.
Ahora, sin embargo, la participación está abierta a otros ciudadanos de esta comunidad autónoma. Para hacerlo, hay que enviar un correo electrónico, desde el que se facilitará una contraseña y las instrucciones de descarga de la aplicación.
¿Por qué el mosquito tigre?
El mosquito tigre (Aedes albopictus) es una especie invasora que proviene del sudeste asiático. Este mosquito habita y cría en zonas urbanas, es un potencial transmisor de enfermedades víricas tropicales (como el Dengue) y es muy molesto para sus agresivas picaduras.
Fue visto por primera vez en Catalunya (en Sant Cugat del Vallés) en 2004. Desde entonces se ha extendido a muchos municipios y recientemente ha llegado a Valencia, las Islas Baleares y Murcia. Pero como vive principalmente en lugares privados (casas, jardines, balcones, etc.) resulta muy complicado hacer un seguimiento y control de su dispersión por parte de la administración pública. Tigatrapp permite que esta tarea, tradicionalmente delegada a los servicios técnicos de la administración y los científicos, pueda ser compartida por la ciudadanía.
¿Qué datos recoge la aplicación?
La aplicación Tigatrapp recoge datos a través de dos juegos: Tigre hallazgos y Tigre viajes.
Los Tigre hallazgos son identificaciones del mosquito tigre que recogen y comparten los participantes, y contienen información sobre las características del mosquito y el lugar donde lo han visto. Permiten estudiar su presencia en el territorio y construir, de manera participativa, el mapa del mosquito tigre. Mediante una serie de imágenes y de preguntas clave, la aplicación ayuda a confirmar que el insecto que ha visto el participante es efectivamente un mosquito tigre.
Los Tigre viajes son trayectos que se realizan en coche de manera habitual (viajes cotidianos como ir a casa de unos amigos, al cine, de compras, una excursión...). El mosquito tigre es pequeño y vuela poco pero, a pesar de ello, se dispersa de forma muy rápida. Se cree que una de las vías que tiene para conseguirlo es escondiéndose en los coches (atraído por dióxido de carbono, las altas temperaturas y los rincones oscuros del interior de un coche).
Los investigadores del CSIC, Frederic Bartumeus y Aitana Oltra, explican: "Cuando un participante hace un viaje, pulsa el botón del Tigre viaje para que la aplicación registre el trayecto -en la aplicación aparece un mapa que le va siguiendo. Cuando llega a destino, el usuario debe pulsar el STOP. De esta forma el desplazamiento queda registrado. En este caso no es necesario haber detectado un mosquito tigre porque el objetivo es tener datos de movilidad humana en coche durante el verano, para poder compararlos después con la dispersión del mosquito. Así podremos saber si el mosquito tigre invade nuevas zonas gracias a la ayuda del transporte en coche".
Los datos que se recogen son enviados a un servidor del CSIC y encriptados para proteger la privacidad de los participantes. Finalmente, de manera automática, los datos son compartidos en la web del proyecto.
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