El principal buscador de Internet en China, Baidu,
ha desarrollado un coche sin conductor, según explica uno de sus
directivos en un artículo publicado en el diario estadounidense The Wall Street Journal.
En
la actualidad se está probando a dos vehículos sin conductor tipo BMW 3
Series Gran Turismo en autopistas ubicadas en el norte de Pekín, tras
un acuerdo con la automotriz alemana. En una siguiente fase se pondrán
los vehículos a prueba en calles más estrechas o concurridas de la
ciudad, o bajo la lluvia y la nieve, los principales retos para los
sensores de este tipo de automóviles."El objetivo está en el trabajo conjunto con el gobierno para proveer autos de uso compartido y público, como combis", dijo Wang Jing, vicepresidente de Baidu, y no brindó precisiones sobre la disponibilidad de los coches autónomos en el mercado.
Estos prototipos están equipados con la tecnología LIDAR, un radar láser que también emplea Google en sus vehículos, acompañado por sensores y software que permite reconocer un mapa detallado del entorno que recorre el coche autónomo.
Para el desarrollo del automóvil, Baidu contó con Andrew Ng, que previamente trabajó para Google en el área de inteligencia artificial. "El tráfico de China es mucho más complicado. Peatones y bicicletas se comportan de forma muy diferente a como lo hacen en Estados Unidos", agregó Wang, citado por la agencia DPA.
Los coches de Google, que se están probando desde 2009, buscan ser muy precavidos en la conducción en rutas y calles frente a diversos obstáculos, otros vehículos y ante ciclistas o peatones.
El camión ruso
En Rusia, un camión capaz de circular sin conductor incluso por campo abierto y a velocidades de hasta 60 kilómetros por hora en condiciones climatológicas adversas ya es una realidad gracias al trabajo de una universidad rusa y el fabricante Kamaz."Muchos otros fabricantes, como Volvo o Daimler, también trabajan en automóviles robot. Pero a diferencia de ellos, nosotros hemos logrado que nuestro Kamaz circule sin conductor con mal tiempo, con niebla, lluvia o nieve", explica a EFE Alevtina Chernikova, rectora de la Universidad Tecnológica MISIS de Moscú.
Esta universidad, la primera en ser distinguida por el Gobierno ruso como un centro de investigación nacional, ha desarrollado "los ojos del camión", un complejo programa óptico que analiza el medio por el que circula el vehículo y transmite la información al sistema de inteligencia artificial que lo conduce.
El Kamaz ya ha superado dos ensayos este año y ha demostrado que es capaz de seguir a otro camión conducido por una persona, calcando sus movimientos incluso si son en zigzag; detenerse ante los obstáculos y realizar maniobras sencillas como girar o cambiar de sentido.
"Nuestros camiones ya pueden circular en piloto automático a velocidades de 60 kilómetros por hora, suficientes para la ciudad. En unos años ya podrán alcanzar los 90 kilómetros por hora", explicó un portavoz de Kamaz, fabricante con fama mundial tras ganar 12 de las últimas 16 carreras del Rally Dakar.
Aunque la culminación del proyecto está prevista para 2020, varias empresas de los sectores agrícola, energético y minero ya han mostrado gran interés por hacerse con un camión de esas características.
"Necesitan vehículos capaces de circular en condiciones peligrosas, allí donde no hay carreteras" y en zonas donde el clima es muy adverso, como es el caso del círculo polar ártico ruso, donde este país explota ingentes yacimientos mineros, petrolíferos y de gas natural.
El sistema de reconocimiento del medio que ahora se ha adaptado al Kamaz ya fue desarrollado por la MISIS antes de sumarse al proyecto.
En la actualidad ya se emplea como "un ayudante en carretera, que avisa al conductor de los peligros y obstáculos en situaciones críticas", apunta Chernikova.
Animada por el éxito inicial del camión y de muchos de sus otros proyectos, la universidad ha puesto en marcha un centro de investigación de robótica aplicada, que se propone con vocación de reunir a los mejores científicos y técnicos del país en este área.
En el futuro, el centro acogerá distintos laboratorios de investigación, entre ellos uno de inteligencia artificial y otro de interfaz para sistemas autónomos intelectuales.
La prestigiosa universidad moscovita -reconocida como una de las cinco mejores de Rusia en ciencias aplicadas- tiene la ambición de estructurar una cadena integral para dar vida a sus desarrollos tecnológicos, desde el aula y el laboratorio donde nacen las ideas, hasta su materialización en algo útil y rentable.
"Queremos integrar la educación, la ciencia y los negocios en la introducción de nuestras tecnologías. Y aquí es clave nuestro papel de centro educativo, además de científico, porque es necesario formar cuadros capaces de dar uso" a todos los avances que estarán presentes en nuestras vidas en el futuro, subrayó Chernikova.
Para la universidad, recalcó, "es un orgullo que no sólo nuestros científicos participen en el proyecto del camión no pilotado, sino también nuestros estudiantes".