La firma ha cerrado el año con unos beneficios de 87,3 millones de dólares, una cifra superior a los 78 con los que concluía 2009.
Ya lo dice su CFO: el año fiscal que acaban de cerrar no era un tiempo primaveral en el ciclo macroeconómico. "Este año ha sido el del desarrollo consistente en medio de las condiciones económicas más difíciles de nuestra vida", ha señalado el responsable financiero de Red Hat, Charlie Peters, en un comunicado.
"Hemos controlado los costes con cuidado, mientras manteniamos de forma significativa la inversión", continúa Peters. Las cifras han sido positivas: han aumentado en 350 empleados su plantilla y han conseguido mantenerse en alzas y números más que verdes.
La compañía ha cerrado en febrero su año fiscal 2010 con unos ingresos de 748,2 millones de dólares, lo que supone un alza del 15% en relación a las cifras de 2009.
Además de aumentar caja, también han crecido los beneficios. Mientras en 2009 la firma open source concluía con 78,721 millones de dólares en ganancias, en 2010 conseguía unos beneficios de 87,3 millones.