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2012/04/24

El ocaso de Nokia


El abril de 1998, Nokia desbancaba a Motorola como líder de la pujante industria de la telefonía móvil. Catorce años ha durado la supremacía del gigante finlandés. En el primer trimestre del presente curso, la multinacional surcoreana Samsung vendió 88 millones de unidades, mientras que Nokia se quedaba en 83 millones. En el trimestre anterior, Nokia había vendido 113 millones de teléfonos.
Más preocupante que la rápida pérdida de cuota de mercado es la falta de convicción y dinamismo que parece tener maniatada a la dirección de la empresa. El nuevo buque insignia de Nokia es el modelo Lumia 900, equipado con sistema operativo Microsoft Windows Phone. En su estreno en sociedad, durante el trimestre enero-marzo, tan solo vendió dos millones de esos aparatos. La competencia viene marcando registros que la sitúan en otra liga. Apple, por ejemplo, vendió el año pasado un promedio de 23 millones de iphones por trimestre.
La semana pasada, Nokia advirtió a los inversores que los dos primeros trimestres del presente curso serán negativos. Como resultado, en cuestión de días, la empresa se dejó un 21% de su capital bursátil. Según analistas del banco de inversiones Morgan Stanley, “Nokia no logrará su objetivo de vender 37 millones de Lumia durante el presente año”. También los analistas finlandeses del sector comienzan a cuestionar la estrategia del patrón de Nokia, el canadiense Stephen Elop.
A comienzos del milenio, Nokia valía 300.000 millones de euros en Bolsa, el doble que el presupuesto nacional de Finlandia. Hoy ese valor se ha reducido a tan solo 12.000 millones, mientras que el registro para Apple es de 460.000 millones de euros. Nokia ni siquiera es la compañía finlandesa que paga más en impuesto de sociedades, superada por la multinacional de ascensores Kone y la energética Fortum.
Los males de Nokia se acentuaron a partir de 2007, cuando Apple lanzó su iPhone y RIM su BlackBerry. Pero son muchas las personas dentro de la empresa que aseguran que la estrategia mal diseñada viene de antes. “Yo creo que fue la estúpida arrogancia de sus directivos cuando se vieron en lo más alto del podio”, explica un ingeniero indio que trabajó 25 años para Nokia. “Recuerdo que, ya en 1999, el consejero delegado, Jorma Ollila, lanzó la idea de que Nokia debería tener un amplio catálogo de productos, con teléfonos de todas las gamas para todos los públicos. Así nacieron cientos, miles de modelos Nokia. Apple demostró más tarde que con un modelo bastaba”.

“El segundo craso error fue en 2004, cuando le presentamos a la dirección la novedosa pantalla táctil”, agrega el ingeniero. “Los directivos, ebrios de tanto éxito, no nos escucharon”, asegura el ingeniero, que ahora trabaja para la competencia en un país del Oriente Próximo.
En septiembre de 2010, cuando ya era evidente que Nokia perdía la batalla en el lucrativo mercado de smartphones, o teléfonos inteligentes, se contrataron los servicios de Stephen Elop para sacar a la empresa del atolladero. En el año y medio bajo la dirección de este correcaminos de las empresas de nuevas tecnologías, Nokia no ha levantado cabeza. Sus acciones caen en picado, desde 8,20 euros a 3,10. A finales de 2007, Nokia tenía el 63% de cuota de mercado de los smartphones, cifra que se ha visto reducida al 11%. En EE UU, que es el mercado que marca tendencia, la presencia de Nokia, con el 1%, es puramente testimonial.
En febrero del 2011, Elop anunció su nueva estrategia, un matrimonio de conveniencia con Microsoft. A partir de esa fecha, Nokia deja de producir teléfonos con sistema operativo Symbian y queda a merced de los Windows Phone.
Según la columnista Merina Salminen, del diario económico Kauppalehti, “la situación de Nokia comienza a ser de emergencia extrema. El mercado de teléfonos equipados con Symbian se reduce a pasos agigantados sin que Nokia pueda reemplazarlos con Windows Phone. Los Lumia no han logrado conquistar mercados, y los precios de los teléfonos de gama baja caen en picado”. A comienzos de la semana, la agencia de calificación Moody’s rebajó la confianza en Nokia, dejando sus bonos en Baa3, a un paso de los bonos basura.
Nokia acaba de reconocer que los márgenes de beneficio de sus smartphones se han reducido de un 30% a un mero 16%. Según el analista de la consultora Inderes Mikael Rautanen, los márgenes de beneficio son demasiado bajos. “Nokia intenta defender su posición con una política agresiva de precios, pero es una política muy cara”, dice Rautanen, quien asegura que es una política casi numantina, pues los teléfonos equipados con Symbian aún representan cerca del 50% de la facturación de la empresa.
“La masiva expansión del sistema operativo Android de Google es una muy mala noticia para Nokia. La entrada en el mercado, sobre todo en la gama baja, de muchos nuevos competidores corroe más la situación de Nokia”, sostiene el experto.

¿Y ahora?

A. S., Helsinki
En una conferencia con inversores, el consejero delegado de Nokia, el canadiense Stephen Elop, reconoció las dificultades que atraviesa la empresa y manifestó que “Nokia necesita implementar aún nuevas reformas estructurales”. Esta frase ha dado mucho que hablar. La columnista Merina Salminen, del diario económico Kauppalehti, dice que Nokia podría dividirse en varias empresas independientes, cada una con su precio.
Según la consultora finlandesa Balance Consulting, el precio de Nokia rondaría los 21.600 millones de euros. Al valor bursátil, la consultora suma entre 6.000 y 8.000 millones de euros por su cartera de patentes además de la liquidez en caja.
La suma es perfectamente asumible por varias empresas de nuevas tecnologías. Kauppalehti señala dos probables compradores: Microsoft y Google. Si Nokia ofrece dos joyas, como son su cartera de patentes y la división de teléfonos de lujo Vertu, tiene otras dos cargas que ningún comprador aceptará de buena gana.
La división de redes Nokia-Siemens Network está en venta desde hace años y no encuentra comprador. El acuerdo de fusión con el consorcio alemán concluye en 2013, fecha que se antoja muy lejana vista la actual situación de Nokia. La otra pesada carga es el sistema de mapas y GPS, Navteq, por el cual Nokia pagó 5.700 millones de euros en 2007. El único posible comprador es Microsoft, pues Google ya distribuye de forma gratuita un sistema de mapas similar.
Otra de las garantías que Nokia puede ofrecer a un potencial comprador es su eficiente red de producción, diseminada en los principales mercados emergentes como son China, India, Brasil y México. No cabe duda que la competencia hace lo posible para que el gigante herido no salga del atolladero. El tiempo se acaba para Nokia y 2012 no puede haber comenzado de peor manera. Por ahora, el primer trimestre deja pérdidas por un valor de 1.500 millones de euros, cuando el mismo periodo de 2011 dejaba beneficios de 403 millones. Para todo el curso se antojan cifras de color rojo púrpura.


Firefox simplifica las actualizaciones


La rutina comenzaba a resultar pesada. Con cada actualización de un programa tocaba descargar en el disco duro el nuevo software, instalarlo y volver a poner los complementos, adaptarlo al gusto... Mozilla, que acaba de estrenar versión de Firefox, asegura que este proceso ha llegado a su fin.
En lo sucesivo las actualizaciones serán automáticas, sin que se tenga la percepción de ello. Este es uno de los 85 cambios que añade el programa recién lanzado, la mayoría de ellos enfocados para desarrolladores.

¿Kindle o Tagus?


Sony fue uno de los primeros fabricantes en apostar por el libro electrónico. En España se ha dado hasta una iniciativa local, Papyre, que ha cosechado un notable éxito. Sin embargo, ha sido necesario que desembarque Amazon para que se desarrolle verdaderamente un sistema que una el libro electrónico con los contenidos.
Kindle es el producto más vendido de todo el catálogo de Amazon en España. A finales de año llegó el modelo más modesto, por 99 euros. Ligero, con un tacto agradable y dos gigas de memoria. La batería dura casi un mes con uso normal y es muy sencillo de usar. La segunda versión, por fin táctil, se anunció el 27 de marzo. Su llegada estaba prevista para justo un mes después. A última hora acortaron los plazos de modo que hoy, día del libro, ya se puede comprar  el modelo Touch, con el doble de memoria y una batería más duradera, que cuesta 129 euros. El modelo más elevado mantiene las mismas características a las que añade conexión 3G, sin cargo adicional, en todo el mundo, por 189 euros.
Tagus es la propuesta de la Casa del Libro. Es el único y es algo más voluminoso. Entre sus ventajas se encuentra la ranura para leer tarjetas MicroSD, que posibilita añadir contenido sin necesidad de un ordenador. Cuesta 109 euros, es táctil, pero no pasa de página en página con la misma fluidez que lo hace el Kindle de Amazon.
El modelo de la veterana librería española es similar al que ofrecen tanto el Corte Inglés, bajo la marca Inves, como Fnac. El fabricante es la empresa bq, lo que cambia en cada uno de los casos, es la interfaz. Tagus presenta una profunda integración con la tienda online e incluye La Casa de los Espíritus de Isabel Allende precargado, lo que facilita su venta. No se tiene la sensación de comprar solo un cacharro sino también un libro para empezar a usarlo.

En ambos casos se incluye un diccionario de términos. Basta con marcar una palabra durante un par de segundos para acceder a su definición. Kindle resulta imbatible en la parte social. Conocen el mercado y saben cómo hacer la experiencia de lectura extensiva. No solo se puede subrayar las notas, sino también mandarlas por correo o a Twitter, a modo de citas literarias.
Tanto Casa del Libro como Amazon se han dado cuenta que para comprar un aparato no basta con la Red. La veterana librería lo ofrece en sus tiendas. Amazon ha optado por la cadena Worten. La estrategia parece inteligente, primero tocar, probar y después decidirse por uno.
El punto flaco de Tagus está tanto en el tiempo de carga de la batería como en los primeros pasos. Es imprescindible contar con un ordenador para crearse un usuario y clave, también hay que optar por una forma de pago. Solo entonces el libro electrónico cobra sentido.
Las tabletas no son precisamente aparatos para la lectura de libros. Sirven para ello, por supuesto, pero no es este su fin prioritario. Entre otras cosas porque la pantalla es retroiluminada, no simula la tinta del libro y, en consecuencia, cansa más. A esto hay que sumar el aluvión de aplicaciones, con sus respectivas notificaciones, que hacen difícil una lectura profunda, con cierto nivel de concentración. ¿Quién es capaz de no abrir Twitter cuando alguien le contesta?  ¿O consultar ese comentario a una foto en Facebook? Apple ha creado su propio iTunes de libros, un escaparate llamado iBookStore. Android sigue esperando el impulso de Google a su Google Books.
iPad y las tabletas Android pueden comprar en el catálogo de Amazon. Ahí también gana por goleada el servicio de Jeff Bezos, la aplicación de Kindle unifica la experiencia y se sincroniza automáticamente. Así, se puede leer el mismo libro, en el punto donde se dejo en un móvil, tableta o el propio Kindle.

Linux, el triunfo silencioso


Cuando navega por Internet, utiliza Linux. Cuando busca en Google, chismorrea en Facebook o juguetea con su teléfono Android —850.000 se activan a diario—, también usa este sistema operativo. Y cuando ve una película en el avión, saca dinero del cajero, le da al mando a distancia de la tele... Linux está en el corazón de múltiples actividades cotidianas, aunque no sea consciente.
El sistema operativo abierto más implantado en el mundo y motor del movimiento del software libre no está, sin embargo, masivamente instalado en los ordenadores de sobremesa donde reina Windows (Microsoft) con un 92% de cuota de mercado. Al igual que en los noventa, cuando Linus Torvalds (Helsinki, 1969) desarrolló Linux. El viernes la Academia de Tecnología de Finlandia reconocía a su compatriota por crear un sistema de “gran impacto en el desarrollo de los programas abiertos, el trabajo en red y la apertura de la Web para hacerla accesible a millones de personas”.
Torvalds tenía 21 años y estudiaba ingeniería informática en la Universidad de Helsinki en 1991. En su habitación empezó “un pequeño proyecto, un divertimento para aprender. Pero resulta que hacía todo lo que un sistema operativo debe hacer”.
El joven subió la primera versión de Linux a la Red y el boca a boca digital hizo el resto con un sistema protegido bajo la Licencia Pública General (GPL), que permite su uso, copia, modificación y libre distribución. A diferencia de otros, Linux mejora de forma colaborativa. Cerca de 8.000 desarrolladores y 800 compañías han contribuido en sus 15 millones de líneas de código desde 2005. La Ilíada, de Homero, tiene 15.000. Y cada tres meses sale una nueva versión del núcleo bajo la supervisión de Torvalds.
“Con Linux se dieron por primera vez las condiciones para que cualquiera instalase y utilizase un sistema operativo modificable”, explica Miguel Jaque, director del Centro Nacional de las Tecnologías basadas en fuentes abiertas (Cenatic). “Podías saber cómo funcionaban sus líneas de código. Se acabó el secreto. Y empezó el auge del software libre”.
Veinte años después no ha conseguido colarse en los ordenadores domésticos (0,98% de cuota mundial según Netmarketshare), pero reina en móviles, empresas, centros de datos, entornos críticos y en la infraestructura de la Red. El 80% de las transacciones bursátiles se realizan en sus plataformas y 9 de cada 10 superordenadores llevan el símbolo del pingüino en su interior. Hasta televisiones y coches. El 25% de su coste ya es software y en cuatro años será el 75%. De ahí que gigantes como General Motors, BMW, Hyundai, PSA Peugeot Citroën y Renault-Nissan construyan una plataforma abierta para los sistemas de entretenimiento e información (consorcio Genivi).
En España, Administración y comunidad educativa han liderado su avance. El 83% de organismos públicos tiene instalado algún tipo de software abierto, sin olvidar que Extremadura se puso a la cabeza en ordenadores por alumno gracias a Linex en el lejano 2003. Lo sigue usando, aunque no lo predique tanto. Una marea que se trasladó a Andalucía y Cataluña (Lincat) entre otras siete autonomías. El Guadalinex andaluz atiende hoy a 1.800.000 alumnos de 5.882 colegios con una red de 640.000 PC y 4.200 servidores.
¿Ventajas? “Reduces costes, porque la licencia es gratuita; cambias de proveedor sin problemas y personalizas todos sus componentes”, dice Jaque. El Ayuntamiento de Múnich ha ahorrado un tercio de su presupuesto tecnológico (4 millones de euros) y ahora, en época de crisis, se podría ahorrar más si las Administraciones “compartieran y reutilizaran los recursos informáticos”. En 2011, según el Cenatic, el 46% de ellas crearon sus programas, pero solo el 18% los liberaron.

Perfiles con muchos ‘huevos’


Aparentar popularidad. Básicamente, de eso se trata. Lo hacen las marcas y lo hacen los profesionales. Quieren parecer más populares de lo que son, incrementar su número de seguidores en Twitter, convertir a sus fans de Facebook en legión. En la Red, encontrar atajos para esta misión no resulta complicado. Ni caro: por 29 dólares (22 euros), cualquiera puede comprar 1.000 seguidores en un abrir y cerrar de ojos.
“Comprar seguidores de Twitter ayuda a que miles de seguidores estén informados acerca de tu producto o servicio en tiempo real”, reza el texto promocional de una de las múltiples empresas que ofrecen seguidores en Internet. “Teniendo seguidores relacionados con el giro de tu negocio, lo único que tienes que hacer es mostrarles una oferta que no puedan rechazar. Al hacer más famosa a tu marca en las redes sociales, LA GENTE CONFIARÁ EN TI. ¡Compra seguidores de Twitter YA! (sic)”.
El reclamo de esta empresa radicada en México y con una base en Barcelona no puede resultar más explícito y entusiasta.
La compra de seguidores es un fenómeno subterráneo del que se habla poco, pero que va a más. Como dice un profesional del sector del marketing en redes sociales, nadie habla a las claras de ello porque “todo el mundo tiene mierda debajo de la alfombra”; o muchos huevos en el perfil, que se dice en el sector: el comprador de seguidores en Twitter puede encontrarse de la noche a la mañana con un montón de seguidores sin foto; cuando un usuario no pone su fotografía en esta red social, aparece un huevo con fondo de color; por eso se habla de perfiles llenos de huevos.
Las marcas llevan tiempo obsesionadas con su presencia en las redes sociales. Suelen recurrir a empresas de mercadotecnia externas para que les gestionen su presencia en la Red. La petición suele ser casi siempre la misma: necesitamos tener más seguidores, más visitas, más fans. “La naturaleza del crecimiento de seguidores en las redes es lenta”, señala Marcos Morales, creativo y productor del sector del marketing digital. Pero las empresas quieren resultados rápidos. Y hay algunas agencias poco amantes de las buenas prácticas que, para cumplir con un cliente, pueden caer en la tentación de tomar algún tipo de atajo.
Fue a finales de 2010 cuando una marca de bebidas, insatisfecha con su cuenta de Facebook, consiguió multiplicar por 10 su popularidad en menos de un mes: el número de fans que decían que les gustaba la marca en esta red empezó a experimentar crecimientos espectaculares: 8.000 personas en un día, 10.000 más al siguiente, 22.000 más un día más tarde, 40.000 más al cuarto. En cuatro días multiplicó por cuatro sus datos de popularidad. En un mes, por 10. Tres expertos consultados por este periódico, que prefirieron mantener oculta su identidad, coinciden en diagnosticar que esos resultados son tan anómalos que solo se podrían explicar gracias a alguna artimaña en la compra de fans.
Esta práctica fraudulenta no es patrimonio de las marcas. “También recurren a esto los profesionales: abogados, médicos”, señala Marcos Blanco, director de la agencia de marketing digital Gestazion. “No hay más que ver las ofertas que hacen esas páginas, por valor de 50 dólares, orientadas a pequeños negocios: la mitad de lo que les entra son profesionales”, estima Blanco.

Hace apenas doce días, una persona que dirige una firma de marketing y publicidad experimentó crecimientos espectaculares en el número de seguidores de su cuenta de Twitter. Ganó más de 10.000 seguidores en un día; 13.000 más al día siguiente. En tan solo 48 horas registraba un incremento de seguidores de unos 49.000 a unos 72.000. En el perfil de esta persona que tuitea en español brotaron de pronto una legión de seguidores canadienses, francófonos y angloparlantes. Buena parte del escuadrón de canadienses no tenía ni un solo tuit en su cuenta. Y muchos tenían los mismos seguidores (pocos; en muchos casos, ocho, casi siempre los mismos) y seguían a las mismas personas (en múltiples casos, 237). Los tres expertos consultados por este periódico señalan que el comportamiento de esta cuenta obedece al patrón del clásico caso de compra de seguidores.
Este modo de fraude empezó hace unos cuatro años, señala Antonio Delgado, periodista, tuitero de pro y estudioso de las redes sociales. Por aquel entonces, los seguidores que el comprador incorporaba a su cuenta eran, en su mayoría, legiones de huevos. Es decir, seguidores sin foto, ilustrados por un huevo, y con un nombre fruto de una combinación aleatoria de letras, explica Delgado. La oferta se ha ido refinando con el paso del tiempo. Ahora las empresas ofrecen seguidores con foto, con biografías —el pequeño espacio en el que el tuitero se presenta— más trabajadas. Incluso se ofrecen seguidores de zonas geográficas concretas o que hablan un idioma en particular.
“Cada vez recibimos más propuestas de compra de fans”, afirma Ramón Azofra, director general de I’move, agencia digital fundada en 2008. “Es un fenómeno que cada vez está más organizado y estructurado. Esta práctica es un fraude, constituye un desastre para las marcas: cuando tratas con piratas, el resultado nunca es bueno”.
Las empresas que ofrecen seguidores se dirigen en muchas ocasiones a las agencias de marketing digital, que son las que tienen que presentar resultados ante las marcas que las contratan. “Cuando existe una obsesión por la acumulación de audiencia y popularidad”, argumenta Azofra, “la gente puede perder el foco de la recomendación y olvida que lo importante es la influencia y la reputación”. Como señalan todos los directores de agencias digitales consultados, lo importante no es el número de seguidores, sino la calidad de estos, su nivel de compromiso con la marca, de participación en las acciones y en la conversación. ¿De qué sirve tener miles de perfiles falsos a los que no se puede recomendar nada, que no responden a ninguna acción? A pesar de todo, la presión de las marcas sobre las agencias, en ocasiones, es tan fuerte que algunos optan por la vía fácil. “Las agencias serias no lo hacen, pero hay otras en las que alguien, por justificar su puesto o conservar su trabajo, cae”, dice Azofra. La práctica aún se mantiene vigente, sostiene. “Observo marcas que generan crecimientos de 2.000 fans al día, esto se sigue produciendo”.

Las empresas que ofrecen fans y seguidores suelen usar robots, programas informáticos que generan perfiles falsos. “Hay plataformas en países como Filipinas que funcionan como si fueran un call center”, explica Juan Luis Polo, coautor del libro #socialholic, en el que se analiza el marketing en redes sociales.
Las metodologías son variadas. En la mayor parte de los casos se utilizan robots. Las empresas montan las llamadas granjas de perfiles falsos, granjas de huevos. Esos perfiles pasan a ser manejados por unos robots que les asignan funciones.
Polo, que dirige la agencia Territorio Creativo, cuenta que se ha encontrado con profesionales del sector que le contaron cómo funcionan las agencias tramposas. “Una persona me contó cómo en una de las agencias en la que trabajó le encomendaron la labor de construir perfiles falsos durante 15 días seguidos”. Algunas encomiendan a los becarios que mantengan decenas de perfiles falsos para que estén vivos y actúen en las redes. Polo relata que uno de sus alumnos de marketing se dedicaba a crear su propia granja de perfiles falsos para hacerlos crecer poco a poco. Ramón Azofra, de I’move, confirma estas impresiones: “Hay gente que construye granjas de fans y las vende”.
Un profesional del sector que prefiere no identificarse cuenta que hace dos años hizo el experimento de darse de alta y solicitar una compra de seguidores para saber cómo funcionaban las empresas que ofrecen fans. Creó un perfil de Twitter falso y contrató con una empresa australiana la compra de 1.000 seguidores por 50 dólares (38 euros).
La mecánica, en casos como este, es la siguiente, explica el directivo: el comprador facilita el usuario y contraseña de su cuenta de Twitter; la empresa asigna a la cuenta un robot —programa informático— cuya tarea es ponerse a seguir a 1.000 personas cuya biografía —las líneas en las que cada usuario se presenta— contengan una palabra determinada; de esos 1.000 seguimientos lanzados a personas reales, un porcentaje contesta convirtiéndose en seguidor: es lo que se llama follow back, es decir, tú me sigues, yo te sigo, normas de cortesía de la Red. El robot, al cabo de un tiempo, da de baja a todas aquellas cuentas que no han devuelto el seguimiento, y lanza una nueva operación sobre otras 1.000 cuentas. Este profesional comprobó que el sistema funciona: consiguió 1.000 seguidores en 10 días. Fue hace dos años.
Ahora los hay que ofrecen seguidores al instante. Y cada vez más baratos: una página que se presenta como mercadillo de servicios contiene ofertas como las siguientes: por 10 euros, 1.000 usuarios nuevos de Facebook; por 100 euros, 10.000 fans de Facebook “100% reales y que hablan en español”; en un plazo de entre 5 y 12 días.
También se pueden comprar tuits que realizan usuarios que cuentan con millones de seguidores. Esas cuentas generan un alto porcentaje de retuits —reenvío de mensajes—, lo que permite construir un trending topic —tema más popular del momento— con relativa facilidad, explica Antonio Delgado: “Los trending topics están sobrevalorados: no significan, ni mucho menos, que toda la Red esté hablando en ese momento de algo”. Hay franjas horarias en las que conseguir un trending topic cuesta mucho menos que en otras: por ejemplo, cuando los norteamericanos duermen.
Las compras de seguidores o fans se suelen hacer por paquetes. Pero hay empresas que ya, a las claras, ofrecen 10 céntimos a quien se haga fan de una determinada marca. Algunas agencias digitales recurren a estas artimañas sin saberlo la marca que las contrata. Este periódico se puso el jueves pasado en contacto con la empresa Iberocruceros al encontrar en la Red una página que ofrecía 10 céntimos de euro a quien se hiciera fan. “Iberocruceros dice que desconocían completamente la existencia del anuncio, que no lo han promovido ellos y que en breve desaparecerá”, comunicó una portavoz de prensa de la firma.
En las cloacas del marketing digital también se lleva el astroturfing, que consiste en contaminar la imagen de otra marca promoviendo comentarios desfavorables. Se suele hacer desde granjas de perfiles falsos. Un profesional del sector cuenta que en España existe un caso reciente en el que una agencia que representaba a una marca de bebidas descubrió cómo otra estaba lanzando ataques de comentarios negativos contra una competidora desde perfiles falsos.
Este periódico se puso en contacto con Facebook y Twitter para recabar su opinión sobre estos fenómenos y conocer las políticas que llevan a cabo si descubren prácticas fraudulentas o crecimientos inusuales en alguna cuenta. No hubo respuesta.
“España no es el país en el que más se dan estas prácticas”, apunta Fermín Álvarez, director de la agencia Social Noise. “Hay países como Turquía, Italia, Reino Unido o India donde son aún más comunes”.
La preocupación en el sector del marketing digital ha conducido a la creación esta misma semana de una plataforma, Adsocial, que pretende, entre otras cosas, implantar un código deontológico que evite fenómenos como la compra de seguidores. IAB, asociación que representa al sector de la publicidad en medios digitales, también trabaja en estos días en un código de buenas prácticas.


Skype para Windows Phone abandona su fase beta y lanza la versión 1.0


  El servicio de VoIP Skype para el sistema operativo Windows Phone abandona su fase beta y lanza su versión estable 1.0. En esta mejorada versión el equipo de Skype ha añadido nuevas características que incluyen llamadas de vídeo en modo retrato y varias opciones de gestión, como la posibilidad de aceptar invitaciones y bloquear y desbloquear contactos.
Skype para Windows Phone llegó el pasado mes de febrero en fase beta. De esta forma los usuarios de uno de los servicios de VoIP más famosos en todo el mundo podrían realizar llamadas y videollamadas a través de los dispositivos móviles con SO de Microsoft. Tras el lanzamiento de la fase beta, el equipo de Skype continuaba trabajando para lanzar una versión definitiva de la aplicación. Dos meses después, esta versión ya está disponible.
Disponible para su uso en redes 4G, 3G y Wi-Fi, Skype para Windows Phone permite a los usuarios conectarse con amigos y familiares al instante. Podrán realizar llamadas a teléfonos fijos y móviles con crédito de Skype, crear y mantener conversaciones uno a uno y chats en grupo. Además, también los usuarios podrán actualizar su perfil y la información de su cuenta.
Además, el equipo de Skype ha añadido algunas nuevas características que incluyen llamadas de vídeo en modo retrato y capacidades de gestión, incluyendo la posibilidad de invitar amigos, aceptar invitaciones, bloquear y desbloquear contactos, entre otras características.
Skype para Windows Phone está disponible en 18 idiomas. Los usuarios pueden descargar la versión estable de forma gratuita a través de Windows Marketplace, que está disponible para dispositivos con la versión Windows Phone 7.5 Mango o superior.
"Este es el primero de muchos lanzamientos que están por llegar para Windows Phone. Creemos en el gran potencial de la plataforma Windows Phone y seguiremos invirtiendo tiempo para permitir experiencias inigualables", asegura el equipo de Skype.
Con Skype para Windows Phone, los usuarios del SO móvil de Microsoft pueden unirse a la comunidad de 200 millones de personas que utilizan Skype a través de cualquier dispositivo: teléfonos inteligentes y 'tablets' con Android, iOS y Symbian; PC y portátiles Mac y Windows; y Smart TV.

HTC creará su propio chip para 'smartphones' de gama baja


  De esta forma, está pensando en desarrollar su propio procesador móvil en colaboración con ST-Ericsson. Este nuevo procesador sería el elegido para un nuevo smartphone de gama baja que saldría al mercado el próximo año.
La lucha por hacerse con el primer puesto en el mercado de dispositivos móviles continúa. Los dispositivos HTC incorporan el sistema operativo Android, el de mayor cuota de mercado a nivel mundial, y utiliza procesadores NVIDIA y Qualcomm, dos alianzas que durante todo este tiempo le han permitido ofrecer una fuerte demanda para competir en el uno de los mercados más cotizados en los últimos años.
Sin embargo, parece que en cuanto a procesadores móviles la taiwanesa quiere volar sola, centrándose en el desarrollo de sus propios procesadores. Así, se convertiría en una empresa más independiente al nivel de Samsung y Apple, principales competidoras de HTC. Según ha podido saber el diario China Times, la taiwanesa junto con ST-Ericsson estaría trabajando en un nuevo procesador que se incorporaría en un nuevo smartphone HTC de gama baja. Este nuevo dispositivo vería la luz el próximo año.
En esta nueva alianza, HTC tendría todo el control del desarrollo del nuevo procesador mientras que contaría con la experiencia en creación de ST-Ericsson, que ha sido la artífice de varios procesadores y que en la actualidad se está centrando en procesadores ARM Cortex-A9.
De esta manera, la estrategia de la taiwanesa puede basarse simplemente en que desea tener un control más directo sobre sus cadenas de suministro y reducir su actual dependencia de los diseños ya elaborados de Qualcomm o NVIDA.

Apple y Samsung solidifican su dominio en el reino de los teléfonos inteligentes


La industria de los teléfonos inteligentes es cada vez más un reino con dos monarcas: Apple y Samsung Electronic.
Ambas empresas se disponen a anunciar ganancias récord para el primer trimestre , en gran parte gracias a las robustas ventas de teléfonos inteligentes. Apple y Samsung controlan cerca de la mitad del mercado en desmedro de rivales como Nokia, HTC y Research in Motion .
Apple y Samsung, no obstante, han ascendido a la cima con modelos de negocios muy diferentes.
Apple, la empresa de tecnología más rentable y valiosa del mundo, sólo vende un aparato: el iPhone. La empresa de Cupertino, California, enfatiza el diseño y la rentabilidad más que las ventas. También invierte grandes cantidades en su marca, mantiene un estricto control sobre sus tiendas minoristas y se beneficia de un fuerte ecosistema de software y aplicaciones.
Samsung, la mayor compañía tecnológica del mundo por ingresos en 2011, prioriza la escala. La empresa surcoreana se adapta rápido a las últimas tendencias y crea múltiples versiones para toda una gama de productos, como su línea de teléfonos inteligentes Galaxy, para atender las distintas necesidades de sus socios. Maximiza ganancias a través del control de su manufactura.
Sus caminos divergentes son prueba de que varios modelos pueden prevalecer. Tanto Apple como Samsung están por alcanzar cada una 25% del mercado global de teléfonos inteligentes, según la firma de investigación IDC, lo que significa que juntos controlarán la mitad de una industria que factura US$219.000 millones al año.
Se trata de los únicos dos fabricantes importantes de teléfonos inteligentes cuya participación de mercado aumentó en el cuarto trimestre. La de Apple pasó de 16% a fines de 2010 a 23,5% y la de Samsung de 9,4% a 22,8% en igual período.

Además, Apple y Samsung concentraron 91% de las ganancias operativas de todos los fabricantes de celulares en el cuarto trimestre, frente a 61% del año pasado, según la firma de investigación de Londres Strategy Analytics.
"En esta etapa, parece que estas dos se están escapando", afirma Manish Nigam, analista de Credit Suisse en Hong Kong.
La competencia codo a codo ha generado conflictos entre Samsung y Apple. En abril de 2011, Apple demandó a Samsung sobre diseños y patentes de sus teléfonos inteligentes. Samsung contrademandó y la batalla legal se ha expandido a los tribunales de nueve países .
De todos modos, siguen colaborando.
Apple es el principal cliente de la división de componentes de Samsung que fabrica pantallas y chips. A pesar de su dominio, "no siempre será una carrera de dos caballos", advierte Rajeev Chand, director de investigación del banco de inversión Rutberg & Co., quien resalta el crecimiento de empresas como el fabricante de equipos tecnológicos Huawei Technologies Co., aunque a una escala pequeña.
De hecho, la industria telefónica se ha caracterizado por ciclos de cambios rápidos, donde perder siquiera un ciclo puede desembocar en un retroceso. "En los años 80 Motorola (lideraba), luego Ericsson y para 2000 fue el turno de Nokia. Ahora es el de Apple y Samsung", señala Neil Mawston, director ejecutivo de Strategy Analytics.
La industria ya está dando pasos como reacción al creciente dominio de las dos empresas. "Es importante que exista un tercer ecosistema y lo apoyamos completamente junto a Microsoft ", indicó la semana pasada Francis Shamo, director de finanzas de Verizon Communications Inc., uno de los principales operadores celulares de EE.UU.

La ZX Spectrum cumplió hoy 30 años


Es uno de los grandes hitos de la informática inglesa, y uno de los primeros equipos (junto con los productos de Commodore) en llevar la informática al hogar cuando la PC de IBM todavía era un equipo netamente corporativo. Salió a la venta en Inglaterra el 23 de abril de 1982.
La ZX Spectrum fue creada por Sir Clive Sinclair, un inventor inglés que fundó su compañía en 1961 y se especializó en la electrónica y, en los últimos tiempos, en el transporte eléctrico. Permitía usar un televisor color como pantalla (una novedad para la época) y en su primer modelo admitía 16 KB de RAM, que llegó a 128 KB en su última versión.
Para tener una referencia: una PC moderna tiene 2 GB de RAM; la ZX Spectrum, 0,000015 GB y un chip corriendo a 0,0035 GHz; hoy es normal que el procesador de una PC corra a 2 GHz.
El equipo tenía un chip Zilog Z80A de 8 bits que corría a 3,5 MHz. Zilog fue fundada por Federico Faggin, uno de los creadores del primer chip de Intel ( el 4004, que en noviembre último cumplió 40 años ), y de hecho el procesador es famoso por ser compatible con un Intel 8080 en la ejecución de código. El Z80 también se incluyó en la Commodore 128 (aunque no era su procesador central).
La ZX Spectrum original tenía todos sus componentes detrás del teclado de goma, y un tamaño pequeño: 233 x 144 milímetros. Al igual que el resto de los equipos de la época, se vendía sin pantalla propia, ya que tenía una salida de video para televisor convencional. Los modelos siguientes ampliaron la RAM incluida y permitieron el uso de una diskettera para cargar los programas; al principio debía hacerse con un cassette de audio.

La edición argentina

La versión inglesa de Google le dedicó hoy su Doodle mostrando un gráfico (San Jorge contra el dragón, ya que hoy es su día) con la resolución y colores disponibles para ese equipo. Era capaz de codificarlos en 8 bits, típicamente para mostrar 8 colores; hace rato que las PC usan 24 bits o más para codificar el color en las imágenes en pantalla.
En la Argentina tuvo una legión de seguidores que le dispustaban la popularidad a los productos de Commodore (las computadoras 64 y 128), sobre todo por la participación de Czerweny Electrónica , una subsidiaria de un reconocido fabricante de generadores de Santa Fe, que comenzó la producción en 1982 con el modelo CZ 1000 (una versión de la Timex Sinclair 1000) y siguió con la CZ 2000, la versión local de la ZX Spectrum. Era totalmente compatible con el modelo inglés, ya que usaba el mismo sistema operativo, aunque parte de los componentes se hacían en la Argentina (menos el procesador central).
En 1986 Sinclair -que ya tenía problemas para competir con Commodore y otros equipos hogareños por un lado, y veía el crecimiento de la IBM PC y sus clones por otro- vendió su compañía a otra firma inglesa, Amstrad, que al poco tiempo desistió de mantener su propia arquitectura y se sumó al mundo de las PC.
Además de revivir como un sistema operativo emulado capaz de correr en teléfonos móviles y computadoras para aprovechar el gusto retro por los videojuegos de la época, en el sitio Speccy hay una comunidad en español que se reune online para mantener viva la memoria de la ZX Spectrum.

Pinterest valdría 7700 millones de dólares


Con la irrupción de la adquisición de Instagram por parte de Facebook, que valuó a la aplicación móvil en 1000 millones, entre las redes sociales y emprendimientos tecnológicos el caso de Pinterest no deja de llamar la atención en la industria.
Mientras Linkedin se posiciona tras su salida a la bolsa con una valuación de 10.000 millones de dólares y Twitter, sin cotizar en el mercado bursátil, podría estar valuada en 8000 millones, el sitio que permite realizar una selección de imágenes y videos en un gran panel virtual se ubicó como una de las redes sociales más visitadas en Estados Unidos, incluso por delante de Google+ .
Una nota publicada en el sitio de la revista Forbes toma varios datos sobre su uso y las ganancias que tiene para hacer una valuación estimativa de la compañía en 7700 millones de dólares.
Según la consultora Experian Hitwise a marzo de 2012 las 104 millones de visitas mensuales que logró Pinterest le permitieron posicionarse como la tercera red social más popular de Estados Unidos, y sigue de cerca a Twitter, con 182 millones de visitas en el segundo lugar. A su vez, relegó al cuarto lugar a Google+, el sitio que buscaba posicionarse como el principal rival de Facebook, con 61 millones de visitantes.
Si bien aún no cuenta con ingresos, la consultora Maximize Social Media cree que el principal atractivo publicitario de Pinterest reside en el tiempo que los usuarios permanecen en la plataforma, unos 89 minutos contra los 21 de Twitter. A su vez, destaca que el nivel de visitas puede causar un mayor impacto en los usuarios al momento de decidir sus compras, dado su interfaz atractiva, mucho más visual que Facebook, la gran red social que cuenta con 845 millones de usuarios.
Sin embargo, lo que más llama la atención sobre esta plataforma es su explosivo crecimiento: registró 21,5 millones de visitas en una semana de enero, 30 veces más que en los seis meses previos. ¿Cuál será el techo para Pinterest?
El sitio cofundado y liderado por Ben Silbermann (egresado de la Universidad de Yale y ex empleado de Google) deberá recorrer su camino al igual que el resto de los emprendimientos tecnológicos: rondas de inversiones y un modelo de negocio basado en ingresos generados por anuncios publicitarios, como ocurrió en Twitter y Facebook. O ser adquirida por uno de los grandes jugadores del sector, como hizo Mark Zuckerberg con Instagram , una plataforma móvil prometedora en visitas y cantidad de usuarios, pero sin ingresos monetarios genuinos.

Los orígenes del éxito de Instagram


Pasada la medianoche, en un depósito sutilmente iluminado ubicado cerca de la bahía de San Francisco, Kevin Systrom y Mike Krieger presentaron algo sobre lo que habían estado trabajando durante semanas: una aplicación para iPhone que se utiliza para compartir fotografías, llamada Instagram. Lo que sucedió después fue más loco que lo que podrían haber imaginado.
En cuestión de horas, miles de personas la descargaron. Los sistemas de computadora que manejan las fotografías continuaron fallando. Ninguno de ellos sabía qué hacer.
"¿Quién es la persona más astuta a la que puedo llamar?", recordó que pensaba Systrom. Él buscó en el directorio de su teléfono y halló a su hombre: Adam D'Angelo, un ex jefe de tecnología en Facebook. Ellos se habían conocido en una fiesta hacía siete años, tomando cerveza en tazas de plástico rojo, en la fraternidad Sigma Un, de la Universidad Stanford. Esa noche de octubre de 2010, D'Angelo se convirtió en la soga para la salvación de Instagram.
"Adam pasó aproximadamente 30 minutos hablando por teléfono con nosotros", recordó Systrom, "guiándonos por las cosas básicas que necesitábamos hacer para recuperarnos".
Systrom, quien ahora tiene 29 años, ofreció esto a modo de parábola en el cuarto repleto de personas que deseaban llegar a ser empresarios, y que habían venido a escucharlo hablar en Stanford, la última primavera boreal: en la intensamente competitiva escena de los "recién iniciados" aquí, el éxito está muy asociado a quién conoces y qué tanto sabes de la otra persona. "Asegúrense de pasar algún rato después de la charla conociendo a las personas que los rodean", dijo a la audiencia.
Esas personas, podría haber agregado, algún día podrían moldear sus destinos. Ellos algún día podrían colocar dinero a la fuerza en sus manos. Podrían codearlos para que abandonen el trabajo fijo y apuesten a una vaga idea. Esta semana, apenas 18 meses después de aquella noche en el depósito, Instagram fue adquirido por Facebook, que pagó 1000 millones de dólares , convirtiendo de este modo a Systrom, a Krieger y a varios de sus inversores amigos en multimillonarios.
El extraordinario éxito de Instagram es un relato sobre la cultura de la escena tecnológica del área de la Bahía, la cual funciona gracias a una red de tejido apretado compuesta de empresarios e inversores que nutren los proyectos mutuos con dinero, consejos y también con la presentación de las personas adecuadas. En líneas generales, se trata de una red de hombres jóvenes, muchos de los cuales se educaron en Stanford y tuvieron la atención de los capitalistas de riesgo más importantes del mundo, incluso antes de abandonar la ciudad universitaria.

En este grupo, se considera que tomar riesgos es una prueba de valentía. Las ideas son desechables: si uno no trabaja, rápidamente se lo cambia por otro. El ritmo es importante. Tú haces tu propia suerte.
"Hay cierta cosa de hallazgo por casualidad respecto de los emprendedores, pero las personas triunfadoras son las que necesitan encontrar los empresarios para hacer aquellas conexiones que llevan al éxito", expresó Ted Zoller, un antiguo miembro de la Fundación Ewing Marion Kauffman, quien estudia desarrollo económico vinculado con el ámbito empresarial. "Los lazos sociales que haces se correlacionan directamente con el éxito".
Para Systrom, las conexiones forjadas en Stanford fueron cruciales.
D'Angelo, un graduado en el año 2006, del Instituto de Tecnología de California, lo ayudó a encontrar ingenieros, a configurar bases de datos y a enriquecer las características del sistema. Inmediatamente después de que Instagram salió a la luz, D'Angelo invirtió en él. Lo mismo hizo Jack Dorsey , de 35 años, quien es uno de los fundadores de Twitter; Systrom había sido un pasante en la compañía que posteriormente se convirtió en Twitter.
Un colega en Google, donde Systrom trabajó inmediatamente después de terminar la universidad, le presentó a Marc Andreessen, un capitalista de riesgo que ya había invertido millones en Facebook. Durante la primavera boreal del año 2010, incluso antes de que naciera Instagram, Andreessen le entregó un cheque por 250.000 dólares.
El invernadero para muchas de estas conexiones vitales fue un competitivo programa de estudio y trabajo para recientes empresarios, denominado Programa Mayfield Fellowship. Systrom fue miembro de dicho programa en el año 2005; Krieger le siguió dos años después. Fue importante para ambos ya que puso a los dos hombres en contacto con empresas recién iniciadas y de gran aceptación en el área de la Bahía, junto con capitalistas de riesgo que deseaban sembrar empresas más nuevas y de mayor aceptación.
"Hay grandes oportunidades de conocer a capitalistas de riesgo y hacer conexiones", recordó Becky Neil, quien estuvo en el programa Mayfield con Systrom, en el año 2005. "Nosotros los tratamos como nuestros pares".
Tanto Systrom y Krieger no quisieron hacer comentarios para este artículo, y alegaron restricciones regulatorias, adelantándose a la oferta pública de Facebook.

Los orígenes de los futuros multimillonarios

Systrom creció en un suburbio de Boston y concurrió a la escuela Middlesex, una academia privada ubicada en Concord, Massachusetts, con 375 alumnos y casi la mitad de esa cifra en hectáreas de extensión.
En 2002, él se inscribió en Stanford, y se especializó en ingeniería y ciencias de la administración, un programa creado para aquellos que deseaban estar inmersos en el mundo de los negocios. Systrom pasó a formar parte de la fraternidad Sigma Un, la cual, tal como recuerda Neil, era famosa por sus fiestas relativamente insulsas; de esas que no terminaban con alguien al que había que salir corriendo para llevarlo al hospital. Se las promovía con videos de música, algunos de los cuales muestran a un pícaro Systrom.
Sus compañeros recuerdan a Systrom por tener buen ojo para la fotografía y el diseño; él realizaba presentaciones en clase que estaban entre las más hermosas que se exhibían. Era naturalmente sociable y también estaba entusiasmado por ser empresario. Durante un corto tiempo, dirigió un negocio de comidas por encargo, como, los que figuran en Craigslist, para los alumnos de Stanford. Ya en el año 2005, recordó un compañero de clase, Alex Gurevich, Systrom tenía su mira puesta en los teléfonos móviles porque consideraba que eran lo que haría furor en el futuro.
Systrom no estaba muy preparado para largarse solo.

Después de graduarse, fue a trabajar a Google, en la vecina ciudad de Mountain View. Según los estándares de sus compañeros, a eso se lo consideraba un trabajo bueno y seguro, aunque no terriblemente de onda. Y él comenzó allí años después de que Google cotizara en bolsa, lo cual fue demasiado tarde como para obtener ganancias inesperadas. Allí duró menos de tres años y se pasó a Nextstop, un sitio de recomendaciones de viajes que fue fundado por ex colegas de Google y que fue finalmente adquirido por Facebook. Pero Systrom, según recordó Gurevich, era "inquieto". Había hecho suficientes contactos con inversores durante sus días en Stanford y, para comienzos del año 2010, tenía un atisbo de idea de negocio.
Su gran oportunidad, si hubo alguna, llegó en una fiesta en el Madrone Art Bar, en enero de 2010, con la apertura de una empresa llamada Hunch, como el host. Allí, conoció a Steve Anderson, de 44 años, quien es el fundador de Baseline Ventures y también es un inversor experimentado, quien para ese entonces tenía intereses en Twitter. Systrom sacó su iPhone y le mostró algo que estaba creando, llamado Burbn, después de que había tomado su bebida alcohólica preferida.
Según recuerda Anderson, Systrom tenía un prototipo y una vaga idea. Quería crear un servicio que permitiera a las personas compartir su ubicación con amigos, al igual que la famosa aplicación Foursquare, y que tuviera algunas herramientas vinculadas con la fotografía. Estaba probando el prototipo con amigos.
"Sabíamos que todo lo que tuviera que ver con la telefonía móvil iba a ser importante, y sabíamos que había una oportunidad para crear experiencias irresistibles para los dispositivos móviles", recordó Anderson de sus conversaciones iniciales. "Pero nosotros no sabíamos mucho más que eso".

Anderson estaba preocupado por una cosa: la cámara de resonancia que puede acosar a una compañía nueva formada por una sola persona. Él sugirió que Systrom debía hallar un socio. Y Systrom estuvo de acuerdo. En pocos días, Anderson transfirió 250.000 dólares a una compañía recién nacida, establecida por un abogado que había recomendado a Systrom. Andreessen pronto agregaría 250.000 dólares de su propia firma. Systrom pudo entonces abandonar su trabajo fijo.
Su búsqueda de un socio naturalmente lo llevó a la red Mayfield, y a Krieger, un inmigrante de Brasil conocido como Mikey y, en palabras de Gurevich, un "activo ingeniero".
Krieger aportó diferentes habilidades. Se había especializado en sistemas simbólicos, un programa interdisciplinario que une la codificación con la psicología, la lingüística y la filosofía. Uno de los proyectos de Krieger, tal como mencionó su profesor Clifford Nass, fue diseñar una interfaz de computadora para calcular la emoción humana.
"Él claramente estaba muy interesado y meditabundo respecto de la psicología", dijo Nass. "Ves eso en Instagram. No es un triunfo de la tecnología. Es un triunfo del diseño y de la psicología".
Los dos hombres comenzaron trabajando en Dogpatch Labs, ubicada en un antiguo embarcadero, con redes de pesca colgadas de las paredes y largas mesas que funcionaban como un espacio de oficina compartido para las compañías de tecnología con aspiraciones de progreso. Julian Green, quien trabajó poco tiempo en Dogpatch, recordó que los dos hombres estaban inusualmente obsesionados con los detalles de diseño. Una vez, dijo, pasaron dos horas perfeccionando los extremos redondeados de los íconos de la aplicación.
Una de las lesiones cruciales de Instagram es que sus fundadores no pasaron mucho tiempo preocupándose por su idea original.
Inmediatamente después de que comenzaron a trabajar juntos, en marzo de 2010, Krieger y Systrom decidieron que Burbn no funcionaría. Tenía demasiadas funciones. Era demasiado parecido a lo que Foursquare ya estaba haciendo. Ellos rápidamente cambiaron; pivotaron, según la jerga de Silicon Valley. Decidieron que las fotografías, populares entre los usuarios de Burbn, serían lo más importante.
El lanzamiento del iPhone 4 les brindó un anzuelo perfecto: tenía una cámara de alto rendimiento y podía mostrar imágenes de mayor resolución. Los usuarios podían tomar fotografías, realizarles ajustes, escribir epígrafes y enviarlas al mundo. Le dieron un nuevo nombre: Instagram.
"Le colocamos otro nombre porque sentimos que captaba mejor lo que hacía: un telegrama instantáneo, en cierto modo", escribió Systrom en Quora, un sitio de preguntas y respuestas que su amigo D'Angelo había creado. "También sonó el nombre cámara-y."
Los hombres trabajaron hasta altas horas de la madrugada, el 6 de octubre de 2010, para poner en marcha a Instagram. A las 4 de la mañana, Systrom escribió en su Twitter: "Bueno, se fue una noche de sueño".
Rob Abbott, uno de los asesores de Dogpatch Labs, quien les estaba haciendo compañía esa noche, dijo: "Los recuerdo sentados uno al lado del otro, con teléfonos desparramados sobre el escritorio y latas de Red Bull".
Instagram despegó como un cohete, en parte porque Systrom había incitado la demanda. Tal como explicó en una entrevista que concedió a la cadena de televisión para Internet denominada Revision3, en enero, Systrom permitió que algunos influyentes bloggers y algunos contactos, como Dorsey, de Twitter, probaran una versión de la aplicación antes de su lanzamiento oficial. Pronto Dorsey estaba usándola para enviar fotografías a sus seguidores de Twitter y se corrió la voz.
Pero el frenesí fue tanto una bendición como una maldición. La pesada carga hizo que el esfuerzo de toda una noche se tradujera en el alquiler de un servidor de Amazon, el cual facilitó el agregado de capacidad para moverse al ritmo del crecimiento.
Systrom y Krieger pronto se acostumbraron a llevar MacBook Airs y tarjetas inalámbricas a todos lados. Si había alguna falla en el sistema, ellos rápidamente podrían conectarse a Internet y solucionarla. "Lo cual sucedió muchísimo, debido a la afluencia de tráfico", dijo Abbott.
De 25.000 usuarios que tuvieron en las primeras 24 horas, Instagram creció hasta alcanzar los 300.000 en la tercera semana, y posteriormente llegó a las decenas de millones.
Con sus extravagantes bordes y filtros, que conferían a las fotografías una potencia adicional o un brillo nostálgico, llegó al corazón y al alma. Las personalidades del espectáculo lo adoptaron, incluyendo a la estrella del pop Justin Bieber, el último mes de julio. En Twitter, él publicó una fotografía Instagram del tránsito en Los Ángeles. Las adolescentes gritaron; y después revisaron Instagram. Una versión de la aplicación para Android, que fue lanzada este mes, atrajo a un millón de personas en las primeras 24 horas.
Los fundadores mantuvieron a una escasa cantidad de colaboradores en su equipo; agregaron 11 personas desde el lanzamiento de la aplicación, incluyendo a varios graduados de Stanford. Los inversores hicieron cola en la puerta.

Inversiones y el gran golpe de efecto: Facebook

Benchmark Capital, a cuyos socios Systrom había conocido mientras estaba en la universidad, lideraron una ronda de inversiones de 7 millones de dólares, en febrero de 2010. Dorsey y D'Angelo se unieron. La semana última, hubo una segunda ronda de financiamiento que valuó a la compañía en 500 millones de dólares. Systrom dijo a los asociados hace pocos meses que no estaba interesado en vender.
Pero luego llamó Mark Zuckerberg.
Cuando él y Systrom hablaron, el viernes último, Zuckerberg, el jefe de Facebook, fue categórico: Facebook deseaba comprar Instagram. Durante las 48 horas siguientes, las dos compañías elaboraron minuciosamente los detalles para celebrar un acuerdo por 1.000 millones de dólares, en dinero en efectivo y en acciones, según personas que conocían el tema y que hablaron desde el anonimato porque las negociaciones fueron de carácter privado.
Para celebrar la ocasión, Zuckerberg escribió una larga publicación en su página personal de Facebook, donde describió a la transacción como un "importante hito" para la compañía, la cual ha estado ansiosa por introducirse con más fuerza en las aplicaciones móviles. El acuerdo, y la velocidad con la que se celebró, se traducen en que Zuckerberg vio el meteórico ascenso de Instagram como una potencial amenaza, ya sea como un servicio autónomo o en manos de uno de sus rivales como Google o Twitter. Un vocero de Facebook se negó a hacer comentarios.
Systrom no terminó derrotando a Foursquare. Sucedió que él y Dennis Crowley, uno de los fundadores de Foursquare, crecieron en ciudades vecinas, en Massachusetts. Hace dos años, para Navidad, se encontraron en un bar local. El mes último, volvieron a verse en un viaje de negocios a Londres, donde se reunieron con el primer ministro y decidieron pasar unas breves vacaciones juntos en Escocia, repleto de degustaciones de whisky escocés.

Systrom quizás perdió una conexión en el acuerdo: Dorsey, de Twitter. Su compañía, según lo que diversas personas comentaron sobre el tema, había expresado interés en comprar Instagram en los últimos meses. Dorsey alguna vez utilizó Instagram diariamente para enviar fotografías a Twitter, pero desde el anuncio del acuerdo no lo ha vuelto a hacer; quizás esto sea un signo de que no está contento de verlo en manos de un competidor. Un vocero de Twitter se negó a hacer declaraciones.
El equipo de Instagram estuvo en Facebook esta semana, tal como está documentado por un vicepresidente de Facebook en (adónde más) Instagram. Si Systrom permanecerá allí durante mucho tiempo es lo que todos se preguntan. Con una inminente oferta pública, existe el riesgo de que Facebook pronto se convierta en lo que era Google: un lugar seguro, corporativo pero lejos de la onda bohemia y electrizante de un emprendimiento. Y Systrom quizás nuevamente se ponga inquieto.



Según un estudio el 40% de los jugadores paga por contenido de pago en juegos gratuitos

El grupo estadístico NDP Group ha realizado un estudio en Estados Unidos que indica que el 40% de personas que decide jugar a juegos gratuitos paga por contenido que éstos ofrecen para mejorar o expandir la experiencia.

Éste es un modelo de juego bastante extendido sobre todo en móviles y redes sociales, que ofrece el producto de manera gratuita, pero que limita las posibilidades del mismo en mayor o menor grado con el objetivo de forzar al jugador a pagar (normalmente con microtransancciones) para disfrutar del conjunto completo.

El estudio también revela que mientras que, del total de jugadores que conocen el sistema de juego de estos títulos gratuitos, el 15% decide obviarlos, el 85% les da una oportunidad. De igual modo, apunta que las mujeres suelen dedicar más tiempo a estos productos, y que los hombres de entre 13 y 34 años no suelen pasar de la primera partida.

NDP concluye que, según sus estadísticas, los jugadores más aficionados a PC y/o consolas muestran un rechazo mucho mayor a este sistema de juego, ya que no equivalen su concepto de "juego".

Motorola gana la demanda contra Microsoft por violación de patentes

Un juez ha dictado sentencia a favor de Motorola, empresa que será parte de Google, afirmando que Microsoft viola cuatro patentes, incluyendo de comunicación inalámbrica y codificación de vídeo, en su consola de sobremesa Xbox 360 por una demanda interpuesta por la primera en 2010. La sentencia no es definitiva y está a la espera de ser revisada.

Motorola ha afirmado que "Microsoft continúa infringiendo la patente de movilidad de Motorola, y estamos seguros de nuestra postura. Este caso fue archivado como respuesta a la primera estrategia de ataque litigada de Microsoft, y estamos esperando a la sentencia final de la comisión en agosto".

Por su parte, Microsoft defendió que "la sentencia que el juez ha dictado hoy es sólo el primer paso en el proceso que lleva a la sentencia final de la comisión. Estamos seguros de que la comisión dictará finalmente a favor de Microsoft en este caso, y que Motorola se verá obligada a mantener su promesa de permitir que sus patentes esenciales estén disponibles dentro de los términos de uso razonable y justo".