Si usted fuera futbolista, jeque árabe o directivo de una gran multinacional ¿Qué tipo de tecnología le haría suspirar?
Recientemente, unos conocidos almacenes de lujo
en Londres inauguraron una sección entera dedicada a amantes de la
tecnología con abultadas billeteras.Televisores de un millón de dólares, cámaras de video Ferrari y submarinos individuales son algunos de los fetiches para hacer las delicias del millonario.
Una TV de 600 Kg
El televisor del millón de dólares es la joya de la corona.Se trata del modelo TH-152UX1W, presentado durante la última feria de tecnología de Las Vegas.
Tiene un tamaño de 152 pulgadas, pesa 600 Kg y además de una resolución superior a la normal (4096 x 2160) tiene la capacidad de ofrecer imágenes 3D Full HD.
"Sus potenciales compradores son futbolistas, banqueros y jefes de Estado", dijo a BBC Mundo Bassam Zaku, director de la división de productos de Harrods.
"Exclusividad", es lo que según Zaku se exige a las empresas tecnológicas que suministran sus productos, todos tienen que ofrecer lo más original de sus gamas.
En el caso de Apple, la empresa se compromete a entregar sus nuevos productos el mismo día de lanzamiento en el mercado.
"El iPad 3 estaba aquí desde su lanzamiento el 14 de marzo", puso a modo de ejemplo.
No obstante, las miradas de los curiosos se dirigen a objetos bastante menos usuales.
Bajo el agua
Pongamos que hemos salido de nuestra mansión y ya estamos cansados de rondar por ahí con nuestro yate, limousine, helicóptero o jet. Todavía nos queda la opción de comprar un submarino individual o para dos personas.Por unos US$20.000 se puede ser dueño de este submarino de la firma Spytech con aspecto de motocicleta que funciona con baterías y que puede sumergirse entre 6 y 12 metros bajo el agua durante 80 minutos.
Lo que llama la atención del vehículo es que la escafandra donde iría la cabeza del submarinista está totalmente abierta en la parte inferior.
"Es como cuando metes un vaso vacío en el agua, las bombonas de oxígeno de la parte delantera crean una burbuja donde la persona respira", dice Zaku.
Celulares de acero inoxidable
La distinción también se recrea en el mundo de los celulares.
Si uno no puede permitirse un celular con carcasas decoradas con cristales de Swarowski por valor de US$4.000 tal vez se puede conformar con un Blackberry Porche a mitad de ese precio.
Con una carcasa de acero inoxidable forjado, tiene un procesador de 1.2GHz y 8G de memoria. Por supuesto, el aparato ya cuenta con la tecnología NFC para realizar pagos a través del celular.
Aunque Zaku asegura que este templo de la tecnología de alto vuelos es visitado por gente de todo el mundo, lo cierto es que hay varios objetos que apelan a los petrodólares de Medio Oriente.
En el caso de Porche, tiene a la vista una pipa de shisha "para fumarla y apreciar la pureza de su sabor", hecha con Tecflex, el mismo material con el que están hechos los motores de sus vehículos.
Nikkon por su parte ofrece unos prismáticos de US$21.000 con un aumento de x20 y 15 kg de peso.
"Es muy popular", asegura Zaku, "es para la gente que tiene caballos y quieren verlos correr o para gente de Medio Oriente que quiere divisar a sus águilas desde lejos".
De la exclusiva marca Hasselband, esta cámara se vende por un precio de US$38.000 e incluye una lente de 80mm acoplada a un cuerpo hecho a mano con el sello distintivo de la marca de autos deportivos.
Por su parte, la japonesa Fujifilm ofrece un equipo de edición limitada con su cámara Fuji X-Pro1. Tan sólo existen 20 unidades por valor de U$15.000 e incluye una maleta hecha con fibra vulcanizada equipada con el cuerpo de la cámara y diversas lentes y filtros.
Más allá de la tecnología, cuando uno tiene una mansión y un televisor de un millón de dólares, tiene que pensar en la decoración a la altura, por lo que muchos terminan su recorrido tecnológico en un discreto rincón repleto de recuerdos de famosos.
Allí uno puede adquirir los guantes de boxeo que usó Muhammad Ali por US$115.000, el vestido blanco que Madonna lució en la gira de su album "Like a virgin" y, si todavía no ardió la tarjeta de crédito, siempre pueden adquirir la fotografía en daguerrotipo y firma original de todos y cada uno de los presidentes de Estados Unidos por US$238.000.
En definitiva, visto este escaparate, a algunos les queda el consuelo de que hay cosas en esta vida que no se compran con dinero.
Si uno no puede permitirse un celular con carcasas decoradas con cristales de Swarowski por valor de US$4.000 tal vez se puede conformar con un Blackberry Porche a mitad de ese precio.
Con una carcasa de acero inoxidable forjado, tiene un procesador de 1.2GHz y 8G de memoria. Por supuesto, el aparato ya cuenta con la tecnología NFC para realizar pagos a través del celular.
Aunque Zaku asegura que este templo de la tecnología de alto vuelos es visitado por gente de todo el mundo, lo cierto es que hay varios objetos que apelan a los petrodólares de Medio Oriente.
En el caso de Porche, tiene a la vista una pipa de shisha "para fumarla y apreciar la pureza de su sabor", hecha con Tecflex, el mismo material con el que están hechos los motores de sus vehículos.
Nikkon por su parte ofrece unos prismáticos de US$21.000 con un aumento de x20 y 15 kg de peso.
"Es muy popular", asegura Zaku, "es para la gente que tiene caballos y quieren verlos correr o para gente de Medio Oriente que quiere divisar a sus águilas desde lejos".
Videocámaras con sello Ferrari
Nada mejor para combinar con nuestro Ferrari que la videocámara H4D Ferrari de edición limitada. Tan sólo existen 499 unidades de este aparato en el mundo.De la exclusiva marca Hasselband, esta cámara se vende por un precio de US$38.000 e incluye una lente de 80mm acoplada a un cuerpo hecho a mano con el sello distintivo de la marca de autos deportivos.
Por su parte, la japonesa Fujifilm ofrece un equipo de edición limitada con su cámara Fuji X-Pro1. Tan sólo existen 20 unidades por valor de U$15.000 e incluye una maleta hecha con fibra vulcanizada equipada con el cuerpo de la cámara y diversas lentes y filtros.
Más allá de la tecnología, cuando uno tiene una mansión y un televisor de un millón de dólares, tiene que pensar en la decoración a la altura, por lo que muchos terminan su recorrido tecnológico en un discreto rincón repleto de recuerdos de famosos.
Allí uno puede adquirir los guantes de boxeo que usó Muhammad Ali por US$115.000, el vestido blanco que Madonna lució en la gira de su album "Like a virgin" y, si todavía no ardió la tarjeta de crédito, siempre pueden adquirir la fotografía en daguerrotipo y firma original de todos y cada uno de los presidentes de Estados Unidos por US$238.000.
En definitiva, visto este escaparate, a algunos les queda el consuelo de que hay cosas en esta vida que no se compran con dinero.