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2009/08/29

PAGAFANTAS

Fuente: El Pais.

Este verano se estrenó, por fin, Pagafantas. Digo por fin, no por la calidad de la película, sino porque ya era hora de que el cine prestara atención a este personaje clave en la sociología moderna. El pagafantas se podría definir como el compañero fraternal de toda chica, ese "nada más que un amigo" que nunca se comerá una rosca aunque se pase el día atendiéndola y ofreciéndole consuelo afectivo. Casi todos hemos sido pagafantas alguna vez. Es más, hay millones que no han sido otra cosa hasta que se resignan y se consagran a la soltería o al casorio convencional, con esa a la que nunca le pagaron ni una bolsa de pipas, porque la pobre estaba tan descolgada como ellos y encima les quería.

Los pagafantas no salen en las estadísticas. A nadie le gusta reconocer que es un paria del sexo, literalmente un intocable. Las chicas los ven únicamente como lacayos receptivos, alguien a quien contar sus penas, las que les causa otro, por supuesto, un canalla sin corazón que las hace sufrir a lo Cumbres borrascosas. No como el pagafantas, que es todo corazón, pero un corazón eunuco, un mero escuchador sin derecho a roce ni a piquito, que debe conformarse a lo sumo con una caricia tipo perrillo faldero o a un beso casto y de soslayo como el que se da en un funeral a una tía solterona.

Quiero dejar bien claro que no siento pena alguna por ellos. El pagafantas no es sólo un memo y un pringao. Es un indigno de género, un sujeto que avergüenza y desprestigia a toda la masculinidad al difundir con su mal ejemplo que siempre habrá hombres que por una mujer están dispuestos a todo por nada, a escuchar, a invitar y a dejarse manipular como una palanca, con tal de alimentar su quimera romántica.

De hecho, el pagafantas no es un hombre sino un hombro, un apéndice dócil en el que se apoya la amiga, un confesionario ambulante para purgar las penitencias que les causan siempre otros, los guapos, los gallitos, los que sí tienen falo. Y además es irredento. Siendo adolescente paga fantas y espera el milagro. Luego envejece y se convierte en pagaMahous y, más tarde, en pagaJB, y sigue esperando.

Hace tiempo, un cínico seductor amigo, alarmado por mi pagafantismo rampante, me aconsejó que no me anduviera con rodeos, y que si la fémina me negaba la pasión amorosa al principio, respondiera con la burla en lugar de insistir con el vasallaje. "En la primera cita con una mujer, o le metes o le sacas la lengua", resumía. Tomen nota los ilusos o háganse devotos de Onán.

2009/07/01

¿Qué es un pagafantas?

Fuente: El Mundo.

'Pagafantas'. Dícese del hombre que busca una relación sexual con una chica que sólo lo ve como amigo. Un término surgido a la sombra de internet -la culpa la tiene un vídeo de Youtube- y que ha hecho suyo Borja Cobeaga para dar nombre a su primera incursión en el mundo del largo.

En el terreno cinematográfico, 'Pagafantas' es una comedia -Premio de la Crítica en la pasada edición del Festival de Málaga- plagada de rostros televisivos asociados al humor: Gorka Otxoa -'Vaya semanita' o 'Cuestión de sexo'- los 'muchachadas' Julián López y Ernesto Sevilla, o los veteranos Óscar Ladoire, Kiti Manver y María Asquerino.

"Yo he sido pagafantas, pero estoy en perfecta recuperación. Huí de ahí. Incluso me han pasado cosas que no he metido en la película porque no eran verosímiles", confiesa Cobeaga. E insiste: "Todos hemos sido pagafantas alguna vez. La gente llena la película con sus experiencias. Es una obra abierta, porque lo que más miedo da en el mundo es que una chica te quiera sólo como amigo; más que un psicópata con un hacha".

¿Orson Welles pagafantas de María Asquerino?

En la película se ilustra además sobre multitud de conceptos asociados al 'pagafantismo', como 'hacer la cobra', el 'abrazo del koala', o el 'lémur' [Ver vídeo].

Y ojo a las anécdotas de sus protagonistas: María Asquerino confiesa que el mismísimo Orson Welles fue su 'pagafantas' en un Festival de Cannes allá por los años 50, cuando presentaba la película 'Surcos'. "A mí no me gustaba nada y él me perseguía por ahí para que bailásemos", cuenta. Genio y figura.

Con esta película, Borja Cobeaga da el salto al formato largo, tras una trayectoria como cortometrajista, con 'La primera vez' y 'Éramos pocos', nominado al Oscar a Mejor Cortometraje, y director de programas de televisión como 'Vaya Semanita' o 'Agitación + IVA'.

"Sólo quiero que el éxito de 'Pagafantas' me permita hacer la siguiente película con tranquilidad y celeridad. Espero que vayan a verlo los pagafantas con la chica pagafanteada". Ahí queda su deseo.