Microsoft ha rechazado firmar un acuerdo extrajudicial con Motorola en
su batalla de patentes ante los tribunales estadounidenses, lucha
judicial en la que Motorola parece llevar ventaja, al menos de momento, y se ha apuntado ya algunas victorias.
Motorola
le propuso a Microsoft retirar la demanda (que podría llevar a la
prohibición de la venta de la consola Xbox 360 en EE.UU. si se dictamina
que Microsoft ha incumplido cuatro patentes de Motorola) a cambio de quedarse un 2,25% del valor de cada consola Xbox 360 vendida, además de 50 centavos de dólar por cada copia de Windows que use sus patentes.
Motorola, que es ahora propiedad de Google, ofreció como parte de este acuerdo que ellos pagarían 33 centavos de dólar por cada teléfono Android vendido por ellos que usara ActiveSync, tecnología de Microsoft que actualiza agendas y calendarios automáticamente.
Microsoft
ha rechazado la propuesta, alegando ante el juez que "aunque
agradecemos la buena fe del intento de acuerdo, es difícil aceptar que
se pida a Microsoft pagar tasas a Google muy por encima de los ratios
del mercado", recordando que Google "rechaza licenciar todas las
patentes de Microsoft que ha infringido Motorola".
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