El cineasta Michael Moore ofrecerá su más reciente documental Slacker Uprising a partir del 23 de septiembre para ser bajado gratis de Internet (http://slackeruprising.com/, sólo estará disponible para residentes de Estados Unidos y Canadá). Lo único que busca a cambio, dice el realizador, es que en la contienda electoral de noviembre participe “el mayor número de votantes jóvenes” en la historia estadunidense.
El año que entra, el director cumplirá dos décadas desde que realizó su primera película, Roger & Me; 20 años de realizar los documentales que han popularizado el género. Y, le dice al conductor de televisión Larry King que qué mejor manera de cumplir años que ofreciendo gratis su más reciente obra.
El documental muestra la gira realizada por el director de Fahrenheit 9/11 en 2004 por 60 ciudades de 20 estados críticos en la elección de hace cuatro años. Durante aquella gira participaron artistas como Eddie Vedder, Steve Earle, R.E.M., Tom Morello (Rage Against the Machine) y Vigo Mortensen, ante enormes públicos.
Moore también lanzó Mike’s Election Guide 2008 (Guía Electoral 2008 de Mike). El primer libro que escribe en cinco años es descrito en su página electrónica como “su esfuerzo por entender la carrera por la Casa Blanca y el Congreso” y anuncia que contesta preguntas que toda la nación se hace, como: “¿cuántos demócratas se necesitan para perder la elección con mayores probabilidades de ser ganada en la historia de Estados Unidos?”
Además, en las pasadas tres semanas el documentalista ha subido a su página de Internet (www.michaelmoore.com) seis cartas abiertas. Una de ellas está dirigida a Dios. Por cierto, en una carta posterior dice que Dios le respondió y que pronto hablará al respecto.
Al atacar una cinta, los repulicanos pierden el tiempo
Otra es en respuesta al senador Joe Lieberman, quien, durante un discurso pronunciado en la Convención Nacional Republicana dijo que “si John McCain es sólo un militante republicano más, entonces yo soy el demócrata favorito de Michael Moore”. Tras preguntarse porqué los republicanos le dedican energía (“con todos los problemas que el mundo enfrenta, ¿porqué pierden tiempo valioso haciendo una crítica de una película y atacando a un cineasta?”), concluye que “mientras gastaron años tratando de convertirlo en el coco”: en las elecciones del Congreso en 2006, los republicanos perdieron 30 asientos en la Cámara Baja y seis en el Senado; y desde 2002, 11 estados cambiaron de gobernador republicano a demócrata.
En cambio, dice, dos tercios del país coinciden en su posición respecto a la guerra, dos tercios está de acuerdo con él acerca de un sistema de servicios de salud universal; dos tercios están de acuerdo en que haya algún tipo de control de las armas. “Menciona un documental, elige un tema, y el público estadunidense está de acuerdo con Michael Moore. Así que ya olvídense de mi. Sólo se están haciendo daño a sí mismos”, les dice a los republicanos.
En sus cintas, Moore ha tratado los asuntos de las armas en Estados Unidos (Masacre en Columbine), el sistema de salud en aquel país (Sicko) y la guerra (Fahrenheit 9/11), entre otros.
En otra carta dice que nadie debe confundirse con la “falsa preocupación” de John McCain por la gente de Luisiana, ya que tuvo bastantes oportunidades para hacer algo después del huracán Katrina y no lo hizo. En vez de ello, McCain advirtió que no había que gastar de más en las víctimas porque si no probablemente terminarían “con el más alto déficit en la historia del país”.
Así que “francamente, es un insulto ahora verlo exhibir lo preocupado que está”, escribe el cineasta que ganó un Óscar por Masacre en Columbine.
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