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2007/10/10

Cine digital y 3D, el futuro del séptimo arte

Fuente: Los Andes.

Por Pablo Pereyra ppereyra@losandes.com.ar

Avatar”, la última cinta de ciencia ficción del realizador canadiense de 53 años James Cameron, se ha convertido en el centro de discusión de Hollywood desde que se anunció que el film se estrenará completamente en formato 3D, convirtiéndose en el proyecto que lleva hasta las últimas consecuencias lo que muchos consideran la plataforma del cine del futuro.

Esta superproducción, con un presupuesto de 250 millones de dólares, sería la puerta de entrada a una nueva era, si consideramos que el estreno de “Avatar”, agendado para el 22 mayo de 2009, obligaría a las salas a dar el salto definitivo hacia la exhibición del formato 3D, por ahora disponible en pocos cines.

Luego de una década y todavía dueño del récord de taquilla mundial con “Titanic” (1.845 millones de recaudación), Cameron encara este nuevo desafío con la misma consigna: superarse a sí mismo en cada proyecto, tal como hizo con otras películas como “Terminator” y “El Abismo”. Coneste film, el director vuelve a su género favorito, en lo que sería una trilogía compuesta hasta ahora por “Avatar”, “Battle Angel” y una tercera todavía sin título.

El proyecto está protagonizado por Sigourney Weaver (la heroína de “Aliens”, también de Cameron), en un papel pequeño, acompañada de Michelle Rodríguez (“Lost”), Giovanni Ribisi (“Perdidos en Tokio”) Zoe Saldaña (“Piratas del Caribe 3”) y tal como Cameron hizo con Leonardo Di Caprio, eligió a un principiante, el australiano Sam Worthington, para el rol principal. El relato transcurre en un futuro distante cuando los humanos han comenzado a colonizar otros planetas y se encuentran con razas alienígenas. La historia gira en torno de Jake (Worthington), un veterano de guerra parapléjico que llega al planeta Pandora, habitado por los Na'vi, una raza humanoide, en el momento en que comienza una guerra.

“Créase o no, la filmación es una pequeña parte del todo”, dijo Cameron en un sitio web. “Es un gran proyecto donde el rodaje ocupa un mes y medio, no mucho más. Habrá mucho de imagen generada por computadora y los efectos especiales son un componente importante”.

Para el plan de filmación que empezó en marzo con locaciones en Los Ángeles y finalizará este mes en Nueva Zelanda en los estudios Weta Digital propiedad de Peter Jackson, Cameron usa una mezcla de acción real con fotografía 3D basada en técnicas de captura de movimiento y un sistema virtual de cámara en tiempo real. Lo que vale decir: tecnología de última generación. “Weta tiene la tecnología suficiente como para que el público no pueda cuestionar la realidad de lo que está viendo, y eso es precisamente lo que busca Cameron: el fotorrealismo visual”, afirmó Jon Landau, coproductor del filme.

“El mundo que él ha creado es sobrecogedor y la acción es vertiginosa. Tardaremos dos años más, pero en el verano de 2009, ‘Avatar’ supondrá un cambio sustancial en lo que hasta ahora significa ir al cine para el gran público”, afirmó Tom Rothman, directivo de los Estudios Fox, financiadores del film.



¿El futuro ya está aquí?

Más allá de las experimentaciones tecnológicas para un film en particular, lo que realmente importa es que si estas dos técnicas, el cine digital y el 3D, estén obligados a dar buenos resultados económicos lo suficientemente poderosos para que tanto cineastas como exhibidores decidan apostar por ellos.

En 2003, Cameron fue un adelantado en utilizar cámaras digitales, que estaba empezando a sustituir la película tradicional, y la adaptó al 3D. Filmó el corto documental “Ghost of the abyss”, sobre el Titanic, y lo exhibió con gran éxito en las salas Imax (ver despiece).

Filmar con tecnología digital abarata costos, aunque el 3D los aumenta entre un 5% y un 10%, pero parece claro que eso se recupera en taquilla.

En 2004 “El Expreso Polar”, el filme de animación digital de Robert Zemeckis, se mostró en su versión en 2D en 3.550 salas y en 3D en 62, y sin embargo, los beneficios de la exhibición en 3D sumaron el 25% del total, lo que demostró que el público estaba dispuesto a pagar hasta cinco dólares más por la experiencia tridimensional, y las cifras no han dejado de confirmarlo.

Otros largometrajes como “Chicken Little” (2005) y “Meet the Robinsons”(2007), de los que también se han hecho versiones tradicionales y tridimensionales, la exhibición en 3D ha demostrado ser la predilecta por el público, pese a mostrarse en menos salas. A esto hay que sumar varios tanques de ésta y la temporada pasada como “Superman returns”,“Batman inicia” y las tres últimas entregas de Harry Potter, largometrajes que han ofrecido también la posibilidad de ver al menos 30 minutos de película en 3D, y el público ha respondido con cines llenos.

Lo más cerca de la experiencia en nuestro país es la sala Imax en Showcenter Norte, en Capital Federal, el segundo de América Latina - el primero está en Ecuador - inaugurado en octubre de 2005, con 350 butacas.

¿Las salas cambiarán?

Hasta ahora muchos complejos de cines alrededor del mundo se han resistido a invertir los 100 mil dólares que cuesta abandonar los proyectores tradicionales y adoptar la tecnología digital, la que se quiere imponer en la industria desde hace cuatro años.

Los empresarios son conscientes de que los precios de exhibición bajarían notablemente, puesto que las copias digitales no cuestan nada en comparación con las de celuloide.

El sistema de la proyección digital apunta a que en el momento de estreno de un film, las copias se envíen simultáneamente por satélite a las antenas de los complejos multisala sin intermediarios. El cambio sólo afectaría un eslabón de la cadena de la industria, la distribución análoga, tal como se la conoce hasta la fecha.

Actualmente sólo 2.700 salas estadounidenses cuentan con tecnología de exhibición digital y apenas un millar de ellas tienen además proyectores de 3D (el sistema se llama Real-D), que cuestan otros 25 mil dólares.

El estreno de una superproducción puede llegar a ocupar hasta 3.500 salas en un solo fin de semana, y no poder exhibir, por falta de tecnología, lo nuevo de James Cameron -un rompe taquilla garantizado- es un lujo que los exhibidores difícilmente podrán permitirse.

“La pantalla ha sido siempre una barrera emocional para las audiencias, pero el 3D de calidad consigue que la pantalla desaparezca y que tú te asomes a una ventana que mira hacia el mundo”, afirmó en The New York Times el mencionado Jon Landau, productor de “Avatar”.

El 3D recargado

Cuando se lanzó el cine en 3D en la década del ’50, y su posterior reactivación en los ’80 con títulos como “Tiburón 3” (1983), o la más reciente “Mini espías 3” (2003), ver un film en este formato provocaba al menos una migraña.

Sin embargo, el 3D con el que experimenta Cameron es la llamada proyección polarizada, que alterna imágenes en dos sentidos a 144 fotogramas por segundo. Un auténtico avance si consideramos que el actual se proyecta a 24 cuadros por segundo.

Unas gafas polarizadas de diseño negras que, según Jeffrey Katzenberg, co-propietario de los estudios Dreamworks, en pocos años “todo espectador llevará en el bolso”, permiten experimentar la profundidad y realismo de las tres dimensiones sin los efectos secundarios de antaño. Eso hace suponer que el 3D es, potencialmente, el formato del futuro.

2 comentarios:

Cine Digital Ibero Leon dijo...

me a servido de mucha ayuda su blog vecinos les dejo esto

Se lanzó la tecnología 3D en el cine de Tandil
http://www.lavozdetandil.com.ar/ampliar_nota.php?id_n=19195

hola les dejo mi lick de mi blog
http://entretenimientoycinedigital.blogspot.com/

Anónimo dijo...

BUEN ENLACE CHAVOS